Draghi advierte que ning¨²n pa¨ªs por s¨ª solo puede invertir lo necesario para evitar la decadencia europea

Las ingentes inversiones que necesita Europa para desencallar la econom¨ªa en los pr¨®ximos a?os son tan grandes que ning¨²n pa¨ªs de la UE puede hacerlas por s¨ª solo. La idea ha sido lanzada por Mario Draghi, autor del informe para relanzar la competitividad en la Uni¨®n, este lunes: ¡°El presupuesto europeo supone el 1% del PIB. Necesitamos entre el 4% y el 5%. La pregunta es si pueden hacerlo los Estados miembros con sus propios presupuestos. La respuesta es no. Algunos de ellos, creo que realmente todos ellos, carecen de la capacidad fiscal necesaria¡±. As¨ª, con sutileza y un punto de provocaci¨®n ¨D¡±todos¡± incluye a Alemania, sus saneadas cuentas p¨²blicas y su falta de inversi¨®n p¨²blica desde hace a?os¡ª, el tambi¨¦n expresidente del BCE ha defendido una de las propuestas de su documento: ¡°La emisi¨®n de bonos de deuda comunes, ya sean de la UE, como se hizo con el Fondo de Recuperaci¨®n, con un activo seguro com¨²n¡±.

Draghi apuesta por esta v¨ªa porque tambi¨¦n hay pa¨ªses que no pueden a?adir m¨¢s presi¨®n sobre sus propios presupuestos nacionales. Su propio pa¨ªs, Italia, es uno de ellos, pero tambi¨¦n Francia o Espa?a podr¨ªan incluirse en ese grupo. Pero, adem¨¢s, a?ade que hay inversiones conjuntas que los Veintisiete tienen que hacer, ha explicado el ex primer ministro italiano en un acto organizado en Bruselas este lunes por el centro de estudios Bruegel.

La cantidad dinero que se precisa aparece en el Informe El futuro de la competitividad europea, nombre oficial del documento: 800.000 millones de euros, contando la parte que deber¨ªa costear el sector privado. Pero Draghi se ha apresurado a aclarar que esa cifra no es suya, viene de c¨¢lculos hechos por la Comisi¨®n Europea y el Banco Central Europeo. ?l, en realidad, piensa que es un dato ¡°conservador¡±. ¡°No incluye inversiones en educaci¨®n ni formaci¨®n¡±, ha se?alado a modo de ejemplo.

Estos aspectos de la financiaci¨®n que aparecen en el informe Draghi fueron los que m¨¢s llamaron la atenci¨®n el d¨ªa de su presentaci¨®n. Y tambi¨¦n los que levantaron m¨¢s rechazo. Los ministros de Finanzas de Alemania y Pa¨ªses Bajos tardaron muy poco en salir a rechazar la propuesta de activos o bonos de deuda comunes. Y aunque en esa frase, en la que afirma que ¡°todos ellos carecen de la capacidad fiscal necesaria¡±, est¨¢n sendos pa¨ªses con presupuestos saneados y las m¨¢ximas calificaciones en sus t¨ªtulos de deuda, el italiano dice que la financiaci¨®n no era el elemento principal del documento.

Por ello, en sus primeras palabras, antes del turno de preguntas, ha optado por destacar tres mensajes. ¡°Si hay un elemento com¨²n durante todo el informe es que deber¨ªamos esforzarnos por aumentar la productividad. Es esencial para elevar nuestros niveles de vida y tambi¨¦n para mantener nuestros valores de prosperidad, igualdad, seguridad e independencia¡±.

El segundo mensaje es m¨¢s concreto: lograr integrar los mercados, profundizar en el mercado ¨²nico. Lograrlo supone incrementar el PIB de la UE en 10 puntos, seg¨²n un c¨¢lculo del informe que present¨® Enrico Letta en abril y que Draghi hizo suyo. Pero no es solo por esto, tambi¨¦n es porque ¡°la escala importa¡±. ¡°La escala a la que me refiero es la ¨²nica que est¨¢ a la altura de nuestros retos actuales. Y es la ¨²nica cualidad. Es la ¨²nica cualidad de la que carecen los Estados miembros. Los Estados miembros individuales no tienen esta escala, y esa es otra percepci¨®n, en cierto sentido, relativamente novedosa que se deriva de este nuevo entorno, de este nuevo contexto geopol¨ªtico. Los pa¨ªses individuales son demasiado peque?os para hacer frente a nuestros retos¡±, ha explicado.

La ¨²ltima idea fuerza que ha destacado Draghi es que la UE no tiene que ser ingenua, la geopol¨ªtica importa y la competencia est¨¢ siendo desigual en los mercados globales. ¡°S¨ª, la competencia mundial est¨¢ siendo impulsada por la tecnolog¨ªa, pero tambi¨¦n por asimetr¨ªas masivas en las pol¨ªticas industriales y los subsidios¡±, ha indicado, en clara referencia al modelo econ¨®mico chino y a medidas estadounidenses como las ayudas fiscales masivas al sector privado para impulsar las tecnolog¨ªas verdes. Y la respuesta a esto no debe ser individual, no deben ser 27 respuestas. El riesgo de eso, de dejar que cada Estado responda con sus propias capacidades dando ayudas a su industria para que no pierda el paso frente a las empresas de los grandes rivales econ¨®micas o se vayan all¨ª en busca de los subsidios, supone ¡°sacrificar¡± la competencia en el mercado interior.

En esa l¨ªnea, Draghi tambi¨¦n ha defendido una pol¨ªtica comercial que no sea ingenua. No defiende un ¡°muro proteccionista¡±. En su razonamiento, Europa no puede permitirse eso porque tiene una econom¨ªa mucho m¨¢s abierta que otras ¨¢reas: el 50% del PIB procede del comercio exterior, frente al 37% en China y el 27% en Estados Unidos. ¡°Tenemos que ir sector por sector¡±, ha defendido, para saber d¨®nde la competencia comercial se debe a la innovaci¨®n y no al doping de las ayudas p¨²blicas.