Llega la junta de accionistas m¨¢s temida por S¨¢nchez Gal¨¢n

Viernes 29 de marzo de 2019. Palacio Euskalduna de Bilbao. Un euf¨®rico Ignacio S¨¢nchez Gal¨¢n se pasea por el vest¨ªbulo tras presidir la junta general de accionistas de Iberdrola repartiendo saludos y haci¨¦ndose fotos. Acaba de recibir el apoyo a su gesti¨®n y de ser renovado para cuatro a?os m¨¢s (hasta 2023, cuando tenga 72). Sobre el asunto, hab¨ªa afirmado que ¡°el consejo tiene perfectamente definidos los planes sucesorios¡± ante una pregunta tan aparentemente inocente como teledirigida.

Viernes 18 de junio de 2021. Nueva junta general. Las restricciones de la pandemia, como ocurri¨® en 2020, impiden exaltaciones, paseos y selfis; pero a S¨¢nchez Gal¨¢n le basta con que nadie ha hecho menci¨®n alguna de la investigaci¨®n abierta a la empresa por el juez Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n por supuestos encargos de espionaje al comisario retirado Jos¨¦ Manuel Villarejo (pieza separada n¨²mero 17 del caso T¨¢ndem). S¨¢nchez Gal¨¢n, mientras, aprovecha para descargar arremetidas contra el Gobierno por las medidas sobre los beneficios ca¨ªdos del cielo de las el¨¦ctricas.

Mi¨¦rcoles 23 de junio de 2021. El alivio, sin embargo, solo dura cinco d¨ªas, los que tarda el juez de la Audiencia Nacional en imputar a S¨¢nchez Gal¨¢n y tres directivos por los supuestos delitos de cohecho y revelaci¨®n de secretos de los que les acusa la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n. Seg¨²n esta, hay ¡°numerosos indicios¡± de que el ejecutivo conoci¨® y autoriz¨® los trabajos de espionaje que encarg¨® la el¨¦ctrica al comisario entre 2004 y 2017. Constan, al menos, 17 facturas, por las que Villarejo recibi¨® 1,04 millones de euros. Entre otras, las correspondientes a los proyectos Black Board, para conseguir informaci¨®n comprometedora sobre Manuel Pizarro cuando este era presidente de Endesa, y Posy, espionaje a Florentino P¨¦rez, presidente de ACS y del Real Madrid, para evitar el asalto del grupo constructor a la el¨¦ctrica, en la que se acerc¨® al 20% del capital, en 2009.

Viernes 10 de junio de 2022. Ahora se avecina una junta general at¨ªpica, empezando porque se celebra en su sede social de la Torre Iberdrola de Bilbao, con un auditorio mucho m¨¢s reducido. La compa?¨ªa ha invitado a sus accionistas a que no acudan presencialmente y que asistan a trav¨¦s de canales telem¨¢ticos o deleguen el voto. Para ello ofrece como incentivo un dividendo adicional de involucraci¨®n, que est¨¢ condicionado a que se alcance el 70% de qu¨®rum. Este dividendo, que debe aprobar la junta, es de 0,005 euros brutos por acci¨®n. Es la primera empresa del Ibex 35 que premia as¨ª a sus accionistas en el evento m¨¢s importante de una sociedad an¨®nima.

El objetivo, parad¨®jicamente, es aumentar la asistencia ¡°dentro de un concepto de junta m¨¢s participativa, accesible, cercana, sostenible e innovadora¡± y ¡°preservar su salud, fomentar la sostenibilidad y evitar las molestias derivadas de las medidas que pudieran ser impuestas por las autoridades¡±. S¨¢nchez Gal¨¢n afronta la junta con un bagaje de alto nivel por sus conquistas en proyectos de renovables e hidr¨®geno; pero sin haber resuelto su imputaci¨®n. Su objetivo es que sus accionistas le resuelvan la papeleta. Hasta dentro de un a?o no tiene que someter a consenso su renovaci¨®n, pero en el curso de esta junta los accionistas pueden pronunciarse sobre la imputaci¨®n e, incluso, exigirle la dimisi¨®n por este asunto, que ya supuso el rechazo de las autoridades de Nuevo M¨¦xico, en diciembre de 2021, a la adquisici¨®n de PNM Resources por parte de Iberdrola.

La junta es el mejor term¨®metro para medir la percepci¨®n que los grandes accionistas tienen de su primer ejecutivo. Los principales son el fondo soberano Qatar Investment Authority (8,7%), BlackRock (5,2%) y Norges Bank (3,6%). La expectaci¨®n se centra en la postura de los asesores de voto (proxy advisors), que influyen en mayor medida sobre los accionistas institucionales y no coinciden precisamente en su punto de vista. Mientras algunos, como ISS, respaldan el apoyo a la veintena de puntos del orden del d¨ªa, otros, como el espa?ol Corporance, sugieren que se opongan por el impacto reputacional del caso Villarejo. Al tiempo, apela al reglamento interno sobre los supuestos en los que los miembros del consejo deben presentar su dimisi¨®n y cuestiona su pasividad ante la ausencia de un plan de sucesi¨®n transparente.

Pero Gal¨¢n es un tipo duro. Desde que lleg¨® a Iberdrola en 2001 como consejero delegado (en 2006 sustituir¨ªa en la presidencia a ??igo Oriol) ha demostrado que se crece en las adversidades. As¨ª lo hizo cuando se enfrent¨® al imperio Caixa rechazando la fusi¨®n con Gas Natural y, posteriormente, oponi¨¦ndose a la entrada de la ACS de Florentino P¨¦rez. Lleg¨® a tal punto su obsesi¨®n que orden¨® comprar acciones de ACS para acudir a la junta y torpedear los acuerdos. Y, para diluir la participaci¨®n de la constructora, orquest¨® la compra de Scottish Power y Energy East (hoy Avangrid), que a la larga le han dado la posibilidad de convertirse en una de las grandes el¨¦ctricas del mundo, encabezar la tabla de cotizaciones y duplicar sus accionistas hasta los actuales 600.000.

Algunos patinazos

El acervo de Ignacio S¨¢nchez Gal¨¢n, que orden¨® a sus servicios de prensa que omitiesen su primer apellido en las notas oficiales, es amplio y ambicioso. Quiz¨¢ el suficiente para sentirse con alta autoestima; pero no ha evitado tener serios patinazos, como el de llamar tontos a parte de sus clientes (¡°solamente los tontos que siguen con la tarifa regulada marcada por el Gobierno pagan ese precio¡±) o infravalorar a sus empleados (¡°no piensen, ejecuten, que ya piensan otros¡±), que le han pasado factura.