Informaci¨®n privilegiada o jugar en Bolsa con las cartas marcadas

Jugar con las cartas marcadas es de tramposos. Y en Bolsa hay unos cuantos. La informaci¨®n privilegiada es un mal end¨¦mico del mercado. Alguien recibe un soplo y se beneficia de ello. El insider trading, como se conoce en la jerga a esta operativa, es una de las prioridades de los supervisores del mercado. Es relativamente f¨¢cil de comprobar que se est¨¢ operando con un soplo (subidas bruscas de la cotizaci¨®n de una compa?¨ªa acompa?adas de mucho volumen de negociaci¨®n los momentos antes al anuncio de un hecho relevante), pero dif¨ªcil de demostrar si no hay una pistola humeante que certifique el delito.

El polic¨ªa burs¨¢til estadounidense, SEC por sus siglas en ingl¨¦s, recoge en su web con pelos y se?ales aquellos casos de informaci¨®n privilegiada que ha sido capaz de demostrar. Es una especie de aviso a navegantes: os vigilamos y podemos llegar hasta los m¨¢s peque?os detalles. Estos son algunos de los ¨²ltimos casos de tramposos en Wall Street:

El agente del FBI y un ¡®rolex¡¯

Seth Markin, agente del FBI, y su amigo Brandon Wong ganaron 82.000 y 1,3 millones de d¨®lares respectivamente gracias a la compra de Pandion Therapeutics por parte de Merck en febrero de 2021. Markin supo con antelaci¨®n que se iba a producir esta opa gracias a unos documentos que ley¨® en casa de su novia, que trabajaba como abogada para Merck. Le pas¨® esta informaci¨®n a Wong, que inmediatamente compr¨® acciones de Pandion que se revalorizaron con fuerza cuando se hizo p¨²blica la operaci¨®n. En compensaci¨®n por el soplo, Wong le regal¨® un reloj rolex a Markin.

Negocios turbios de un excongresista en el hoyo 18

Stephen Buyer fue congresista del Partido Republicano en representaci¨®n del Estado de Indiana. Cuando en 2011 dej¨® la pol¨ªtica cre¨® una firma de consultor¨ªa que proporcionaba servicios a T-Mobile, entre otros clientes. En 2018, Buyer comparti¨® un partido de golf con un alto directivo del operador de telefon¨ªa, quien le confes¨® que la compa?¨ªa ten¨ªa previsto anunciar una oferta de compra sobre Sprint. Con esa informaci¨®n que a¨²n no era p¨²blica, el excongresista hizo acopio de un buen paquete de acciones de Sprint. Un a?o despu¨¦s, Buyer dio otro pelotazo con la informaci¨®n privilegiada que le proporcion¨® otro cliente sobre la compra de Guidehouse por Navigant Consulting. En total, la SEC estima que con ambas maniobras se apunt¨® un beneficio de 1,5 millones de d¨®lares.

Avaricia en torno a las criptomonedas

Ishan Wahi trabajaba en la plataforma de compra y venta de criptomonedas Coinbase. Desde su puesto ten¨ªa informaci¨®n de las nuevas divisas digitales que iban a ser admitidas a negociaci¨®n. A pesar de que la compa?¨ªa calific¨® como sensibles esos datos y pidi¨® a sus empleados confidencialidad, Wahi hizo caso omiso y filtr¨® los nombres de las nuevas admisiones a su hermano y a un amigo. Normalmente, cuando se anunciaba la llegada de una nueva criptomoneda al mercado, la cotizaci¨®n del resto lo celebraba con subidas, pues era se?al de la pujanza de este nuevo mercado. Con este patr¨®n en mente, el hermano y el amigo de Wahi tomaron posiciones en las criptomonedas para luego vender r¨¢pidamente tras la confirmaci¨®n de la noticia. En total, se repartieron plusval¨ªas de 1,1 millones de d¨®lares con esta operativa.

Hacerse de oro con las pizzas

En el departamento de contabilidad de Domino¡¯s Pizza hab¨ªa alguien que sab¨ªa demasiado. Gracias a la informaci¨®n que manejaba, Bernard L. Compton traz¨® un minucioso plan durante cinco a?os con el que se apunt¨® un beneficio de 960.000 d¨®lares. De 2015 a 2020 el contable de la cadena de comida r¨¢pida sab¨ªa si los resultados que iba a publicar la compa?¨ªa iban a sorprender o decepcionar al mercado y tom¨® posiciones alcistas o bajistas los d¨ªas previos a los que Domino¡¯s rindiera cuentas ante el mercado. Para no dejar huella, Compton dividi¨® las operaciones a trav¨¦s de siete cuentas, algunas suyas y otras que estaban a nombre de familiares. Su minucioso plan, sin embargo, no termin¨® bien.

Un chat siempre deja rastro

La informaci¨®n privilegiada no descans¨® ni en los d¨ªas m¨¢s oscuros de la pandemia. Hari Sure, Lokesh Lagudu y Chotu Pulagam eran ingenieros de software en Twilio, una compa?¨ªa con sede en San Francisco especializada en servicios de computaci¨®n en la nube (cloud computing). Gracias al puesto que desem?pe?aban ten¨ªan acceso a las bases de datos de la compa?¨ªa donde se proyectaban los ingresos futuros. En marzo de 2020, cuando la covid-19 se expandi¨® por todo el mundo, comprobaron c¨®mo la compa?¨ªa reconoc¨ªa en sus documentos internos que hab¨ªa notado un fuerte aumento de la demanda de sus servicios por parte de los clientes debido a las restricciones de movilidad que impusieron los gobiernos. En un chat compartido, los tres ingenieros reconocieron que con esa informaci¨®n las acciones de Twilio ¡°subir¨ªan como la espuma¡±. D¨ªas despu¨¦s compraron opciones sobre acciones de la empresa a trav¨¦s de cuentas propias y de familiares con las que ganaron un mill¨®n de d¨®lares tras la presentaci¨®n de resultados trimestral.

Dinero de laboratorio

Daniel Catenacci es un profesor universitario de Chicago que firm¨® un acuerdo de consultor¨ªa con la farmac¨¦utica Five Prime Therapeutics. Gracias a esta colaboraci¨®n tuvo acceso a los prometedores resultados de las pruebas m¨¦dicas con Bemarituzumab, el f¨¢rmaco estrella contra el c¨¢ncer que la compa?¨ªa ten¨ªa en fase de estudio. A pesar del acuerdo de confidencialidad que hab¨ªa firmado, Catenacci no pudo reprimirse y tras enterarse de los avances del antitumoral compr¨® 8.700 acciones de Five Prime Therapeutics. Cuando el mercado supo de la buena marcha de los ensayos cl¨ªnicos, la compa?¨ªa se dispar¨® en Bolsa un 300% en esa sesi¨®n. Al d¨ªa siguiente, el profesor vendi¨® los t¨ªtulos y amas¨® una plusval¨ªa de 134.142 d¨®lares.

Un guion para Netflix

Los datos de suscriptores son la clave de b¨®veda sobre la que se asienta el plan de negocio de cualquier compa?¨ªa de streaming. Sung Mo Jay trabaj¨® como ingeniero en Netflix entre 2016 y 2017. Ten¨ªa informaci¨®n de primera mano sobre la evoluci¨®n de las altas y bajas que acumulaba la plataforma cada trimestre y se la iba suministrando a un hermano y a un amigo. Cuando se acercaba la publicaci¨®n de los resultados de Netflix, iban tomando posiciones en el valor si los datos de suscriptores eran buenos o ejecutando posiciones en corto si la evoluci¨®n de los clientes iba a decepcionar al mercado. En total, amasaron plusval¨ªas valoradas en tres millones de d¨®lares.