At¨ªpico equinoccio para la Fed
Los futuros ya descuentan que, para marzo de 2023, la Reserva Federal situar¨¢ los tipos de inter¨¦s en el 4,5%
Esta semana, coincidiendo con la reuni¨®n de la Fed, el sol se situar¨¢ sobre el ecuador del planeta Tierra marcando el equinoccio de Oto?o, uno de los dos ¨²nicos momentos del a?o en que la noche tendr¨¢ exactamente la misma duraci¨®n que el d¨ªa, 12 horas. A partir de entonces, el hemisferio norte se ir¨¢ inclinando cada vez m¨¢s lejos del sol y recibir¨¢ sus rayos en un ¨¢ngulo m¨¢s pronunciado, lo que, de manera paulatina y hasta m...
Esta semana, coincidiendo con la reuni¨®n de la Fed, el sol se situar¨¢ sobre el ecuador del planeta Tierra marcando el equinoccio de Oto?o, uno de los dos ¨²nicos momentos del a?o en que la noche tendr¨¢ exactamente la misma duraci¨®n que el d¨ªa, 12 horas. A partir de entonces, el hemisferio norte se ir¨¢ inclinando cada vez m¨¢s lejos del sol y recibir¨¢ sus rayos en un ¨¢ngulo m¨¢s pronunciado, lo que, de manera paulatina y hasta marzo, dar¨¢ lugar a d¨ªas m¨¢s oscuros y a condiciones climatol¨®gicas m¨¢s fr¨ªas, propias del invierno.
En paralelo, la Reserva Federal abordar¨¢ su propio equinoccio de normalizaci¨®n monetaria, con la banda alta de sus tipos oficiales en el 2,5%, justo en la neutralidad: precisamente en ese nivel en que los tipos de inter¨¦s todav¨ªa no han comenzado a ser realmente restrictivos.
Dado que, en los ¨²ltimos seis meses, la Fed ha implementado las mayores y m¨¢s r¨¢pidas alzas de los ¨²ltimos 50 a?os y ya est¨¢ reduciendo su balance a un ritmo del 1% al mes, ?podemos esperar una pausa relativamente r¨¢pida en su proceso de normalizaci¨®n monetaria?
Dif¨ªcilmente, ya que aunque la tasa general de inflaci¨®n ha marcado techo en EE UU ¡ª8,3% en agosto frente al 9,1% de junio¡ª, durante los pr¨®ximos meses primar¨¢ la resiliencia de la inflaci¨®n subyacente y el miedo a no volver a cometer los errores del pasado.
Esta misma semana ha quedado claro que los efectos de segunda ronda se est¨¢n trasladando a los precios. La inflaci¨®n subyacente aument¨® un 6,3% empujada por los alquileres, un componente que pesa m¨¢s del 30% de la cesta de la compra. Adem¨¢s, algunos indicadores relevantes que miden la perseverancia de los incrementos de precios, como el IPC mediano de la Fed de Cleveland, o el indicador de precios pegadizos de la Fed de Atlanta, alcanzaron sus m¨¢ximos (7,2% y 6,1%, respectivamente).
La Reserva Federal tiene las manos atadas y debe proseguir con la retirada de est¨ªmulos. Powell lo dej¨® claro en Jackson Hole, advirtiendo que ser¨¢ necesario infligir ¡°algo de dolor¡± durante un tiempo, en una clara alusi¨®n a enfriar la demanda incidiendo sobre el mercado laboral. En su mente sobrevuela el fantasma de Arthur Burns que, a comienzos de los a?os 70, precipit¨® bajadas de tipos de inter¨¦s cuando la inflaci¨®n no estaba totalmente ¡°apagada¡± y el resultado fue nefasto.
El remedio a la inflaci¨®n pasa por infligir una recesi¨®n moderada y la senda de subidas de tipos est¨¢ escrita. Y no solo por los 50 puntos b¨¢sicos que la Fed subir¨¢ esta semana. Los futuros ya descuentan que, para el pr¨®ximo equinoccio, el de marzo de 2023, los tipos de inter¨¦s se situar¨¢n en el 4,5%. Probablemente, el deterioro de la macro que vivamos para entonces obligue a la Fed a parar antes, en los entornos del 4%. Mientras, pensemos en la suerte que tenemos de vivir en la Tierra: en Urano los equinoccios son mucho m¨¢s largos y los inviernos duran m¨¢s de 20 a?os.