Invertir con la Biblia en la mano

Corr¨ªa 2014 cuando Borja Barrag¨¢n experiment¨® una especie de epifan¨ªa. Este inversor madrile?o acumulaba una s¨®lida carrera profesional en firmas de renombre en el sector financiero (Goldman Sachs, Royal Bank of Scotland y Merrill Lynch) cuando decidi¨® hacer un M¨¢ster en Pastoral Familiar en el Instituto Pontificio Juan Pablo II Para las Ciencias del Matrimonio y la Familia. All¨ª coincidi¨® con religiosos de diferentes ¨®rdenes encargados de gestionar el dinero de sus congregaciones. ¡°Al ver sus carteras vi dos cosas que me enfadaron. Por un lado, las altas comisiones que les cobraban, en muchos casos fuera de mercado. Por otro, hab¨ªa una falta de coherencia total entre los activos en los que invert¨ªan y la fe que profesaban¡±, recuerda.

Ese momento fue un punto de inflexi¨®n. Decidi¨® dejar Merrill Lynch para ayudar a esas organizaciones religiosas que le hab¨ªan acompa?ado y guiado durante toda su vida. La primera decisi¨®n fue lanzar un fondo cat¨®lico con Julius Baer, Temperantia. En 2018 fue m¨¢s all¨¢ en la meta que se hab¨ªa marcado, dej¨® la entidad suiza y cre¨® Altum Faithful Investing, una empresa de asesoramiento financiero registrada en la CNMV y que en la actualidad asesora a clientes con activos totales valorados en 200 millones de euros. ¡°Nuestra misi¨®n es acompa?ar a los inversores con sensibilidad cristiana de una manera consecuente con la doctrina social de la iglesia cat¨®lica¡±, resume Barrag¨¢n, padre de siete hijos (el dato del n¨²mero de v¨¢stagos se destaca en el perfil del equipo de la compa?¨ªa alojado en la web corporativa).

Altum Faithful Investing ha elaborado una serie de protocolos de inversi¨®n que sirven como gu¨ªa para sus clientes. Se trata de delimitar qu¨¦ queda dentro y qu¨¦ fuera de los criterios morales de la iglesia. Una de las estrategias es la ¡°promoci¨®n de la dignidad humana¡±. ¡°Ayudamos a confeccionar carteras que, entre otros cometidos, preserven la dignidad de sus trabajadores, ayuden a frenar la pornograf¨ªa, promuevan la libertad del hombre frente a las adicciones o que respeten la libertad religiosa¡±, reza su web. Tambi¨¦n buscan la promoci¨®n de la familia. ¡°Evitamos invertir en compa?¨ªas o activos cuyas acciones y pr¨¢cticas ataquen activamente la concepci¨®n cat¨®lica del matrimonio y la familia¡±, razonan.

Otra pilar de su estrategia es la promoci¨®n de la vida humana. ¡°Evitamos invertir en compa?¨ªas o activos involucrados en la investigaci¨®n con c¨¦lulas madre embrionarias, la investigaci¨®n con c¨¦lulas madre derivadas de tejido fetal o embriones, as¨ª como la clonaci¨®n humana¡±. Tambi¨¦n dan la espalda a aquellas empresas o activos involucrados directa o indirectamente en la pr¨¢ctica de la eutanasia, la pena de muerte o que participan en la producci¨®n y venta de armas indiscriminadas o de destrucci¨®n masiva. ?Y qu¨¦ pasa con las armas individuales? ¡°El magisterio cat¨®lico reconoce la leg¨ªtima defensa¡±, argumenta Barrag¨¢n.

La pregunta del mill¨®n ¡ªcriterios morales aparte¡ª es si tantas l¨ªneas rojas casan bien con la b¨²squeda de rentabilidad. La entidad, en colaboraci¨®n con Azvalor ¡ªse encarga de la gesti¨®n, pero ateni¨¦ndose a los criterios cat¨®licos antes explicados¡ª tiene el mercado un fondo, Azvalor Lux Sicav Altum Faith (domiciliado en Luxemburgo), que en 2021 logr¨® una rentabilidad del 44%, en 2022 el r¨¦dito obtenido fue del 41% y en lo que va de a?o la ganancia es ligeramente superior al 1%. ¡°Los criterios ASG [medioambientales, sociales y de gobernanza corporativa] a un cat¨®lico se le quedan cortos¡±, dice el fundador de la entidad.

Sello de calidad

Otra l¨ªnea de negocio de Altum Faithful Investing es la creaci¨®n de un sello de calidad para fondos de otras entidades que certifica que sus criterios de inversi¨®n cumplen con al doctrina cat¨®lica. En funci¨®n del grado de cumplimiento, la etiqueta ser¨¢ de plantino, oro, plata y bronce. El fondo Equam Global Value es uno de los certificados y ha obtenido la escarapela oro (grado de cumplimento de los principios cat¨®licos entre el 90 y el 99%). Un reclamo sin duda para atraer el importante patrimonio econ¨®mico que mueven las ¨®rdenes religiosas en Espa?a. ¡°S¨ª que hemos notado tener la certificaci¨®n porque diferentes colectivos del mundo cat¨®lico est¨¢n m¨¢s tranquilos sabiendo que su dinero se invierte en empresas que est¨¢n acordes con sus valores¡±, reconoce Carmen Fern¨¢ndez, encargada de las relaciones con clientes en Equam.

El camino abierto en Espa?a por Altum es bastante habitual en los mercados anglosajones, donde hay fondos para todos los credos: cat¨®licos, presbiterianos, musulmanes, menonitas o evang¨¦licos. Y aquel que se declare ateo que sepa que en el mercado hay respuesta (y negocio) para todo: tambi¨¦n existe el Vice Fund o fondo del vicio, que invierte en fabricantes del alcohol, tabaco o casinos.

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