Isabel Vizca¨ªno: ¡°Los ni?os han conseguido conectarse gracias a las redes vecinales y casi ninguno se ha quedado atr¨¢s¡±
Esta profesora de un colegio en el Pozo del T¨ªo Raimundo asegura que el trabajo por proyectos ha sido la clave para sobrevivir a esta crisis con una ense?anza m¨¢s personalizada
Recuerda su infancia de escuela en escuela rural, detr¨¢s de su madre, maestra y rodeada de sus cuatro hermanos. Todos menos uno son hoy profesores. Isabel Vizca¨ªno (Navalmoral de la Mata, C¨¢ceres, 1973) lleg¨® a Madrid con 18 a?os para seguir la tradici¨®n familiar. Tras estudiar Magisterio se form¨® con la metodolog¨ªa de la Fundaci¨®n Hogar del Empleado. Cuando tuvo que elegir destino, quer¨ªa comprobar si trabajar por proyectos en el aula funcionaba en todos los contextos socioecon¨®micos. Todas las opciones que puso para elegir plaza estaban en Vallecas, cerca del Pozo del T¨ªo Raimundo. ¡°Estaba convencida de que se pod¨ªa ofrecer una educaci¨®n de calidad excepcional y personalizada a la poblaci¨®n que m¨¢s dif¨ªcil lo ten¨ªa¡±, recuerda.
As¨ª lleg¨® a Entrev¨ªas, a un antiguo asentamiento de chabolas, donde siguen viviendo hoy algunos de los m¨¢s olvidados. En su colegio p¨²blico, el Manuel N¨²?ez de Arenas, han tenido que reinventarse un nuevo sistema educativo durante la cuarentena que ha obligado a cerrar las aulas de todos los colegios de toda Espa?a y trasladarlos a un entorno virtual. Y cree que ante este desaf¨ªo han demostrado que su manera de trabajar era la mejor para cubrir las necesidades de sus alumnos. Pese a las carencias y dificultades, se enorgullece de que su centro haya logrado hacer un seguimiento personalizado a cada uno de sus alumnos, aunque fuera v¨ªa telef¨®nica.
Pregunta. ?C¨®mo se educa a distancia cuando al otro lado hay familias que ni siquiera tienen m¨®vil, o no han escrito un correo electr¨®nico en su vida?
Respuesta. No hemos cambiado metodol¨®gicamente nada. Hemos seguido trabajando con los proyectos que ten¨ªamos previstos pero adapt¨¢ndolos a la realidad a la que se estaban enfrentando los ni?os. Lo que s¨ª nos ha obligado esta situaci¨®n ha sido a utilizar las tecnolog¨ªas como herramienta. Al principio fue un bache, pero desde Semana Santa hasta ahora hemos trabajado mucho mejor. El WhatsApp ha sido clave porque muchas familias no pod¨ªan, ni sab¨ªan conectarse a plataformas, pero casi todos ten¨ªan la aplicaci¨®n. Y lo acompa?¨¢bamos del blog de la clase que funcionaba como un tabl¨®n de anuncios donde colg¨¢bamos los avances que se lograban. Corregimos con audios, con fotos, con v¨ªdeos, pero no hacemos ex¨¢menes al uso sino proyectos de forma cooperativa. Para ello usamos documentos en los que todos pueden colaborar cada uno desde su casa, con las herramientas gratuitas de Google.
P. ?Qu¨¦ proyectos se han trabajado?
R. Han sido muy competenciales, escogidos por ellos en asamblea: proyecto de cocina, peluquer¨ªa, el medio ambiente y el mar, que se han complementado con el de reciclaje y coronavirus. Todos estaban interconectados de alguna manera, y ellos iban investigando, proponiendo preguntas y buscando respuestas en torno a lo que estaba pasando y les ¨ªbamos guiando e introduciendo las competencias del curr¨ªculo de forma pr¨¢ctica.
P. ?Y c¨®mo se ha afrontado la brecha social?
R. Los que segu¨ªan el blog han realizado los proyectos genial, como si estuvieran en clase. A los que no, les hemos dado cuadernillos que preparamos y se los llevaban voluntarios. Las primeras semanas, ante la falta de soluciones de la Administraci¨®n, las familias del centro se movilizaron y lograron que cada ni?o tuviera un dispositivo, o bien m¨®vil, tableta o port¨¢til. Los conseguimos a trav¨¦s de las redes de apoyo surgidas en el barrio, al igual que la comida. Desde el propio centro ha habido un movimiento solidario bestial para llegar a todos y que nadie en nuestra comunidad educativa pasara necesidades. Y hemos logrado al menos conectar con todos, y que los alumnos trabajen motivados, a pesar de las circunstancias. Han hecho trabajo cooperativo, como el que est¨¢n acostumbrados a hacer en clase, y se han reunido por equipos: los lunes hac¨ªamos asamblea, los mi¨¦rcoles quedaban con el tutor y los viernes se reun¨ªan solos para avanzar de forma aut¨®noma. Incluso hemos aprovechado esta circunstancia para convertirlos en ecoyoutubers.
P. Pasando necesidades es dif¨ªcil preocuparse por el colegio. ?C¨®mo se puede enganchar a las familias en esta circunstancia?
R. Hemos trabajado much¨ªsimo para localizar a todos los ni?os, y hemos llegado a ellos incluso haciendo las tareas por tel¨¦fono, hemos mantenido el contacto con todos luchando porque no se quedaran descolgados. Y ha habido un seguimiento personalizado total, atendiendo tambi¨¦n emocionalmente a las familias. Para poder llegar a todos partimos el horario y dividimos los grupos en dos: hac¨ªamos una sesi¨®n a las cuatro y otra por la ma?ana, adapt¨¢ndolo en funci¨®n de las necesidades de los alumnos, porque sab¨ªamos perfectamente hasta donde llegaba cada uno. Aunque esta situaci¨®n sea un horror, podemos sacar algunas lecturas positivas de la crisis del coronavirus.
P. ?Cu¨¢les?
R. Nos hemos sabido organizar. Lo hemos hecho a costa de luchar y trabajar much¨ªsimo, pero hemos conseguido estar a un nivel curricular digno para las circunstancias, y competencial muy adecuado. Adem¨¢s, hemos mejorado much¨ªsimo en la gesti¨®n de la programaci¨®n docente. Por primera vez hemos podido asistir todos a las reuniones, y planificar las semanas con cierto margen, algo que en el d¨ªa a d¨ªa es casi imposible. Y esto ha puesto sobre la mesa cu¨¢les son las necesidades reales de un sistema educativo de calidad. En realidad son muy parecidas a las de la escuela rural. Debe haber grupos m¨¢s peque?os, maestras muy cercanas a los alumnos, implicar a nuestras comunidades cercanas en los procesos educativos. En resumen: necesitamos m¨¢s profesores en las escuelas, m¨¢s tiempo y m¨¢s espacio.
P. ?Y c¨®mo profesora que se puede aprender de esta cuarentena educativa?
R. Competencialmente hemos aprendido much¨ªsimo. Nos ha ense?ado a optimizar la tecnolog¨ªa, nos ha permitido una atenci¨®n m¨¢s personalizada. Ten¨ªamos una autoestima muy baja con las tecnolog¨ªas y nos hemos puesto las pilas. Adem¨¢s, hemos mejorado en la coordinaci¨®n pedag¨®gica. El tener que responder a nuevos desaf¨ªos a diario nos ha obligado a pararnos a pensar c¨®mo resolverlos, ha habido un proceso reflexivo mucho m¨¢s intenso del que tenemos en el d¨ªa a d¨ªa.
P. Vuestro centro era ya un referente en innovaci¨®n, ?c¨®mo os ha ayudado ese factor a afrontar esta crisis?
R. Cuando llegu¨¦ a este colegio hace nueve a?os, estaba en un proceso de transformaci¨®n para educar por proyectos. Elimin¨® los libros de texto, introdujo el m¨¦todo cient¨ªfico y puso a los ni?os como centro del proceso de aprendizaje con gran flexibilidad. Llevamos casi una d¨¦cada demostrando que los proyectos son eficaces en el aula independientemente del nivel socioecon¨®mico de tus estudiantes. Hemos puesto sobre la mesa que funciona contar con las familias, que hay que hacer un relato positivo de la educaci¨®n p¨²blica poniendo en valor sus logros y que una educaci¨®n personalizada de calidad es posible en una escuela p¨²blica en el Pozo del T¨ªo Raimundo, al igual que en cualquier otro lugar. En todos los sitios se pueden sacar buenas cosas. Y ahora hemos aprendido que cuando llegan las situaciones de crisis este modelo tambi¨¦n es muy ¨²til y funciona porque es un modelo mucho m¨¢s personalizado.
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