La hegemon¨ªa universitaria de Estados Unidos se agrieta sin Espa?a en el horizonte

Poco a poco la hegemon¨ªa de Estados Unidos en el poderoso ranking de Shangh¨¢i o ARWU (Clasificaci¨®n Acad¨¦mica de Universidades del Mundo, en sus siglas en ingl¨¦s) se va resquebrajando. Hace una d¨¦cada 36 de las 50 mejores del campus estaban dentro de sus fronteras, este domingo ¨Dque se ha dado a conocer el influyente listado¨D son 28, eso s¨ª con Harvard, Stanford y el Instituto Tecnol¨®gico de Massachusetts (MIT) a la...

Poco a poco la hegemon¨ªa de Estados Unidos en el poderoso ranking de Shangh¨¢i o ARWU (Clasificaci¨®n Acad¨¦mica de Universidades del Mundo, en sus siglas en ingl¨¦s) se va resquebrajando. Hace una d¨¦cada 36 de las 50 mejores del campus estaban dentro de sus fronteras, este domingo ¨Dque se ha dado a conocer el influyente listado¨D son 28, eso s¨ª con Harvard, Stanford y el Instituto Tecnol¨®gico de Massachusetts (MIT) a la cabeza. Los pa¨ªses ricos ¨DSuiza, Holanda, Dinamarca, China o Australia, junto a Reino Unido que ya estaba arriba¨D hacen una fuerte apuesta econ¨®mica por sus centros superiores y a la larga recogen sus frutos en los rankings. Pero en esta terna no entra Espa?a, que cuenta con unas universidades p¨²blicas infrafinanciadas y unas privadas desligadas de la investigaci¨®n.

Doce campus p¨²blicos espa?oles entran en el top 500 de Shangh¨¢i ¨Duno menos que en 2020, salen Zaragoza y Oviedo y entra Salamanca¨D, una clasificaci¨®n muy centrada en la labor cient¨ªfica, pero hay que irse a la franja de la posici¨®n 151 a 200 para encontrar el primero, la Universidad de Barcelona, que recuper¨® ese puesto en 2018. ¡°La pregunta es: ?qu¨¦ ser¨ªamos capaces de hacer si estuvi¨¦semos bien financiados¡±, se plantea Joan Gu¨¤rdia, su nuevo rector. ¡°El sistema [espa?ol] se merece estar m¨¢s arriba porque hay talento y trabajo¡±.

Guardia cree que Espa?a arrastra la lacra de que hasta mediados de los ochenta no se apost¨® por la investigaci¨®n con la LRU (Ley de Reforma Universitaria) y cree que ahora se necesita un nuevo espaldarazo. ¡°Despu¨¦s de la pandemia si no apuestas por la ciencia¡­ Se lo debemos a las nuevas generaciones de investigadores, que est¨¢n m¨¢s preparadas que nosotros¡±. En el top 50 han entrado dos nuevas universidades europeas (Munich 48? y Utrecht 50?) y Francia escala un puesto con Paris-Saclay (13?), una universidad que ha fusionado dos universidades y nueve grandes escuelas para crear su propio MIT.

Los campus se ordenan uno a uno hasta el n¨²mero 100 y partir de ah¨ª se divide por franjas. Treinta y ocho de las 47 universidades p¨²blicas espa?olas con grado presencial est¨¢n entre los 1.000 mejores campus, seg¨²n ARWU. A ellas se suma una ¨²nica privada, la Universidad de Navarra (del 501 al 600), fuerte en ciencias de la salud. En la franja del 201 al 300 repiten tres campus (Aut¨®noma de Barcelona, Complutense y Granada) y se descuelga Valencia, que se sit¨²a junto a la Aut¨®noma de Madrid, Polit¨¦cnica de Valencia y Pa¨ªs Vasco en la banda de 301 a 400. Un pelda?o desciende tambi¨¦n la Pompeu Fabra (Barcelona), que comparte espacio con Salamanca, Santiago de Compostela y Sevilla (de 401 al 500).

No es trivial el puesto que se ocupe en el ranking, pues determina muchas decisiones: de los pol¨ªticos al dise?ar su sistema universitario ¨Das¨ª surgieron los campus de excelencia con Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero¨D; de las universidades, que solo tejen alianzas con otras de su estatus o superior, o de la gesti¨®n de las becas internacionales, asociadas muchas veces a una buena reputaci¨®n del campus de destino.

Francisco Michavila, exconsejero de Educaci¨®n ante la OCDE y la Unesco, cree que ha ayudado a terminar con el monocultivo de Estados Unidos que ¡°durante la Administraci¨®n Trump muchos estados no se han sentido c¨®modos a la hora de captar fondos federales para ciencia¡±. Europe¨ªsta convencido, cree que el Viejo Continente: ¡°se ha dado cuenta de que la universidad es su cerebro y que debe mimarlo y exigirlo¡±. A su juicio, tres hitos han marcado el devenir de la UE: el euro, el gigante aeron¨¢utico Airbus y ahora la descarbonizaci¨®n, que est¨¢ fuertemente ligada a la investigaci¨®n. Para lograrla antes de 2050, Europa tiene por delante muchos retos cient¨ªficos y t¨¦cnicos. ¡°Solo entre 2020 y 2030, Europa va a invertir m¨¢s de un bill¨®n de euros en transformaci¨®n verde. Para lograr la excelencia cient¨ªfica, van a tener que trabajar en conjunto¡±, prosigue.

En esta carrera por liderar el ecologismo no est¨¢ la Am¨¦rica de Biden, pero Michavila sostiene que Estados Unidos va a hacer una fuerte inversi¨®n en investigaci¨®n sanitaria en paralelo a la de Europa; porque la pandemia ha puesto de manifiesto que solo la ciencia puede salvar al planeta. El creador de la c¨¢tedra Unesco de Gesti¨®n y Pol¨ªtica Universitaria cree que este gran impulso por la investigaci¨®n verde y sanitaria va a dividir a¨²n m¨¢s las universidades en dos tipos: las punteras, enfocadas en la ciencia, y el resto centradas en la docencia, como en Estados Unidos.

Al carro verde se sube Salamanca, plet¨®rica de pasar de la franja del 700 a la del 400. Va a invertir fondos europeos de recuperaci¨®n en crear un campus agroambiental. Aglutinar¨¢ un centro de recursos naturales del CSIC y la facultad de Ciencias Agrarias que conjuntamente investigar¨¢n sobre la adaptaci¨®n de los cultivos al cambio clim¨¢tico. Su rector, Ricardo Rivero, cree que su espectacular subida responde a que por fin se ha visibilizado la labor de grupos muy potentes que llevan a?os trabajando. En su plantilla cuentan con tres investigadores altamente citados y todo ello suma a ojos de los evaluadores de Shangh¨¢i, que analizan a 2.000 universidades y clasifican en su ranking, concebido para becar fuera de China a sus cient¨ªficos, a 1.000 centros. No se sabe bien cu¨¢ntas universidades hay en el mundo, pero superan las 7.000, por lo que ya es un ¨¦xito posicionarse en el millar.

Pilar Aranda, rectora de la Universidad de Granada, comparte la percepci¨®n de Michavila: ¡°Cada vez pasa m¨¢s, los investigadores quieren ir donde se hacen muchas cosas¡±. Mantenerse en el top espa?ol la alegra, aunque ya lo preve¨ªa porque en el ranking de Shangh¨¢i por ¨¢reas de conocimiento Granada sali¨® bien parada este a?o. ¡°La competencia es cada vez mayor. Es casi imposible subir y luego mantenerte es muy complicado¡±, reconoce. Para Aranda, Harvard es otra liga con la que no hay que compararse: 3.800 millones de presupuesto y 22.000 alumnos frente a los 400 millones de la Universidad Barcelona y 63.000 estudiantes.

¡°No es solo una cuesti¨®n de financiaci¨®n, en Espa?a hay muchas trabas burocr¨¢ticas, durante a?os se han parado las becas al talento joven ¨Dque no nos enga?emos, son quienes trabajan m¨¢s en los laboratorios¨D aunque eso ahora se ha solucionado y los departamentos tienen que entender que con los programas de atracci¨®n de talento hay que garantizar la estabilidad de estos investigadores, y eso no supone quitar el sitio a los que ya est¨¢n sino que es una fortaleza¡±.

La Universidad del Pa¨ªs Vasco (301-400) acaba de contratar a dos nobeles en F¨ªsica ¨Del franc¨¦s Albert Fert y el estadounidense George F. Smoot¨D para que trabajen en su campus de cosmolog¨ªa de San Sebasti¨¢n. Reclutarlos afianza a la UPV-EHU en los rankings pues sus logros y el premio Nobel computan mucho y son un polo de atracci¨®n de muchos fondos internacionales, pero esta pol¨ªtica est¨¢ al alcance de pocos bolsillos en Espa?a.

Rivero lamenta que Shangh¨¢i penaliza a las universidades orientadas a las ciencias sociales o las humanidades, porque se publica en menos revistas indexadas ¨Dlas que computan para Shangh¨¢i¡ª. ¡°Si no tienes Medicina o F¨ªsica tienes que picar mucha piedra. En nuestro caso el 60% son estudios de letras¡±. Ese es el gran handicap de la Universidad Carlos III de Madrid, de gran reputaci¨®n internacional, pero a la que castiga ser joven ¨Dno tiene pasado glorioso¨D, su tama?o peque?o ¨Dno quiere crecer pese a la demanda estudiantil¨D, y estar muy centrada en el ¨¢rea de ciencias sociales.

Todo lo contrario que la Complutense, muy grande, con pasado y fuerte en ciencias. Sus aulas han acogido a tres profesores que han sido premio Nobel y a cuatro alumnos y ello suma. Miguel ?ngel Sastre, su vicerrector de Calidad, reconoce este colch¨®n de m¨¦ritos. ¡°Como tenemos un tama?o considerable no hay altibajos en la producci¨®n cient¨ªfica, como puede ocurrir en una universidad peque?a¡±.

Sastre cree que a medio plazo el campus se ver¨¢ beneficiado en los rankings de su alianza Una Europa, que hermana a la Complutense con universidades de gran tradici¨®n como la Sorbona, Bolonia y Lovaina en proyectos de investigaci¨®n comunes, t¨ªtulos compartidos y trasiego de alumnos y plantilla. Una mezcolanza que deber¨ªa reportar ganancias cient¨ªficas. En este momento la Complutense ultima dentro de este consorcio un grado en Estudios Europeos que se coordina desde Lovaina y que obliga a hacer encajar las legislaciones de cada pa¨ªs con la belga.

Veinticuatro universidades espa?olas participan en estos consorcios promovidos por el presidente Emmanuel Macron, quien en un solemne discurso en la Sorbona apunt¨® en 2018: ¡°Debemos crear universidades europeas, redes de universidades que permitan estudiar en el extranjero y asistir a clase en al menos dos idiomas¡±. Habr¨¢ que esperar m¨¢s de un lustro para ver si la apuesta de Bruselas se traduce en una mejora de Europa en Shangh¨¢i. El resto de pa¨ªses no andar¨¢ quieto, conscientes de que en manos de la ciencia y la t¨¦cnica est¨¢ su futuro.

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