La madre de los ni?os estrangulados en Murcia confiesa el doble asesinato
Seg¨²n su declaraci¨®n, actu¨® bajo el efecto del alcohol y las drogas.- Los ara?azos en su rostro han hecho sospechar a la polic¨ªa.- Ser¨¢ juzgada por un jurado popular
Francisca G.N., la madre de los dos ni?os asesinados la madrugada del pasado s¨¢bado en su domicilio de Santomera (Murcia), ha confesado el doble crimen. Seg¨²n ha informado la Delegaci¨®n del Gobierno en Murcia, Francisca ha asegurado que actu¨® bajo los efectos del alcohol y las drogas.
La parricida confesa, de 33 a?os, ha afirmado que fueron dichas sustancias las que le produjeron un trastorno traum¨¢tico que la llev¨® a matar a sangre fr¨ªa, con el cable del cargador de un tel¨¦fono m¨®vil, a los dos peque?os, Francisco Miguel y Adri¨¢n Leroy, de seis y cuatro a?os, respectivamente.
Adem¨¢s, a instancias del ministerio fiscal o de la defensa, se prev¨¦ que se realizce un informe psiqui¨¢trico, ya que varios miembros de su familia sufren de alg¨²n trastorno mental. En este sentido, varios vecinos han confirmado que la detenida sufr¨ªa depresiones.
La presunta autora de los cr¨ªmenes ha pasado a disposici¨®n judicial y ha sido recibida a las puertas de los juzgados por una decena de vecinas de Santomera con gritos de "asesina, asesina", a favor de la m¨¢xima pena, al tiempo que ped¨ªan a los jueces que "no tengan clemencia" con ella.
Seg¨²n fuentes de la Fiscal¨ªa de Murcia, Francisca Gonz¨¢lez ser¨¢ juzgada por un jurado popular. La acusada presta declaraci¨®n esta tarde en el Juzgado N¨²mero 5 de Murcia y pasar¨¢ la noche en la prisi¨®n de Sangonera ingresada en la enfermer¨ªa. Esta medida se ha adoptado para impedir que Francisca Gonz¨¢lez se produzca lesiones o pueda ser agredida por otras reclusas, eventualidad ante la que se han reforzado las medidas de seguridad en el centro.
Contradicciones
La detenci¨®n de Paquita, como la conoc¨ªa todo el mundo, se produjo tras las intensas y continuadas investigaciones que desde el momento en que se tuvo conocimiento de las dos muertes se realizaron por parte de los agentes de las unidades de Polic¨ªa Judicial e Informaci¨®n de la Guardia Civil.
Los agentes pudieron establecer una serie de indicios que desmontaban y y contradec¨ªan la coartada presentada por la detenida en su primera declaraci¨®n, que hizo en calidad de testigo. Seg¨²n este primer testimonio, Paquita habr¨ªa sido paralizada con un spray por unos individuos que entraron a robar en la casa.
Al parecer los ara?azos que presentaba en la cara la sospechosa tambi¨¦n fueron determinantes para su arresto. El Instituto Anat¨®mico Forense de Murcia ha remitido al de Madrid restos de epidermis encontradas en las u?as de uno de los ni?os muertos, por si coincidiera con las huellas dejadas en la cara de la madre.
Otro de los datos que han ayudado a la investigaci¨®n ha sido la determinaci¨®n de la hora de la muerte de los dos ni?os, que por el estado de los cad¨¢veres, se produjo varias horas antes de que ella diera la voz de alarma, sobre las siete de la ma?ana del s¨¢bado.
Despu¨¦s, tras ser arrestada, en una segunda declaraci¨®n ante letrado designado de oficio, Francisca N.G. termin¨® por confesar su culpabilidad.
Gran aplomo
El arresto de Paquita se produjo pocos minutos despu¨¦s de enterrar a sus hijos en el cementerio de la localidad. La arrestada fue trasladada inmediatamente a la Comandancia de la Guardia Civil de Murcia para prestar declaraci¨®n.
Hasta los momentos inmediatos previos a su arresto, Paquita mantuvo un gran aplomo: durante la madrugada del s¨¢bado y la ma?ana del domingo permaneci¨® frente a la capilla ardiente de sus dos hijos, recibiendo las condolencias de amigos y vecinos.
Despu¨¦s, y apoyada en su esposo y otros familiares directos, acompa?¨® a la comitiva f¨²nebre hasta el cementerio. Mientras daban sepultura a sus dos hijos menores, se lamentaba y pronunciaba entre gemidos los nombres de los dos peque?os.
Tenencia il¨ªcita de armas
La Delegaci¨®n del Gobierno ha informado, adem¨¢s, de que Jos¨¦ R.N., de 37 a?os, padre de los dos ni?os asesinados en Santomera, fue detenido y puesto m¨¢s tarde en libertad por un presunto delito de tenencia il¨ªcita de armas.
Las mismas fuentes han explicado que la detenci¨®n se produjo ayer "por un hecho ajeno al mencionado homicidio". Al parecer, se localiz¨® un rev¨®lver Phyton 357 Magnun con seis cartuchos Winchester escondido bajo uno de los asientos del coche de su propiedad que estaba aparcado en el pol¨ªgono industrial de Lorqu¨ª.
A la hora de poner en libertad al padre de los ni?os asesinados el juez ha tenido en cuenta especialmente las circunstancias dram¨¢ticas del caso y el hecho de que la entrega de la citada arma se realiz¨® de forma espont¨¢nea y voluntaria.
"No tiene por qu¨¦ ser una enferma mental"
Ante el horrible crimen de Santomera, el vicepresidente de la Sociedad Espa?ola para el Estudio de los Trastornos de la Personalidad (SEETP), Antonio P¨¦rez Urdaniz ha asegurado que a una persona que mata, ya sea a sus hijos o a otra persona, "no se la tiene por qu¨¦ presuponer enferma mental".
P¨¦rez Urdaniz ha explicado que en estos casos, "hay especialistas que enseguida psiquiatrizan lo que se puede explicar con el sentido com¨²n". En su opini¨®n, "por el mero hecho de matar a quien sea, no hay que pensar que una persona es una enferma mental" ya que puede ser "simplemente una mala persona".
Asimismo, ha indicado que un enfermo mental suele ser m¨¢s agresivo contra s¨ª mismo que contra los dem¨¢s. Por otra parte, ha indicado que "no hay que utilizar los argumentos psiqui¨¢tricos para justificar un comportamiento de este tipo" ya que "un trastorno de la personalidad no le da a nadie licencia para matar ni para nada".
En cuanto al caso en concreto del asesinato de Murcia, ha asegurado que ha de ser un experto el que "analice la personalidad de la madre y determine si es una enferma o no".
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