El Supremo y la Audiencia se enfrentan a cuenta de la liberaci¨®n del jefe del 11-M

La Audiencia Nacional y el Tribunal Supremo siguen enfrascados en una trifulca a cuenta de la excarcelaci¨®n de Allekema Lamari, uno de los autores del 11-M que se suicid¨® en Legan¨¦s. Por un lado, el Supremo reconoce que envi¨® a destiempo a la Audiencia la notificaci¨®n de la sentencia por la que condenaba en firme al terrorista, que fue puesto en libertad al cumplir cinco a?os de prisi¨®n preventiva, d¨ªas antes de que llegara esa sentencia. Por otro lado, acusa a la Audiencia de haber dejado libre a Lamari tras cumplir la mitad de la pena mayor a que hab¨ªa sido condenado, en vez de hacerlo cuando cumpliera la mitad de la pena total que le hab¨ªa sido impuesta, que era de 14. Por su parte, la Audiencia tambi¨¦n investigar¨¢ las circunstancias de su liberaci¨®n.

El Supremo, en una nota difundida hoy, estima que Lamari fue puesto en libertad dos a?os antes de que cumpliera la mitad de la condena que la Audiencia Nacional le hab¨ªa impuesto, que fue inicialmente de 14 a?os. En junio de 2001, la Audiencia le consider¨® culpable de un delito de pertenencia a banda armada, por el que le conden¨® a 10 a?os de prisi¨®n, y de dos delitos terroristas por los que le conden¨® a 2 a?os por cada uno. En total, 14 a?os. No obstante, la sentencia no era firme, ya que el abogado de Lamari anunci¨® recurso. En estos casos, la ley de Enjuiciamiento Criminal establece que la prisi¨®n preventiva puede prorrogarse hasta "la mitad de la pena efectivamente impuesta" si se ha celebrado ya juicio contra el acusado, como as¨ª hab¨ªa sucedido. Por tanto, faltaban a¨²n dos a?os para la libertad de Lamari, que hab¨ªa sido condenado a 14 a?os.

El quid de la cuesti¨®n es de ¨ªndole interpretativa. Efectivamente, el l¨ªmite m¨¢ximo de prisi¨®n preventiva es la mitad de la condena impuesta en primera instancia -en el caso de Lamari, 7 de los 14 a?os a que fue condenado-. Pero la jurisprudencia no aclara si debe tomarse en consideraci¨®n el total de la condena o la mayor de las penas impuestas. En el caso de Lamari, la Audiencia tom¨® la segunda opci¨®n, es decir, que se estableci¨® como l¨ªmite m¨¢ximo de la prisi¨®n preventiva la mitad de la condena mayor, los 10 a?os por pertenencia a banda armada, por lo que deb¨ªa salir a los cinco -el 29 de junio de 2002. Por su parte, el Supremo entiende que deb¨ªa haberse computado el total de la condena y no s¨®lo la mayor de las penas, por lo que deb¨ªa salir tras siete a?os -el 29 de junio de 2004. Seg¨²n fuentes jur¨ªdicas, se han dado ejemplos de ambas opciones.

En cualquier caso, el Supremo dict¨® sentencia firme -rebajando la condena de 14 a 9 a?os- cuando Lamari a¨²n estaba en la c¨¢rcel, el 7 de junio de 2002: La Audiencia fij¨® la fecha de su excarcelaci¨®n el 29 de junio, "salvo que recaiga sentencia del Supremo resolviendo el recurso". Pero esta sentencia no se notific¨® a la Audiencia hasta despu¨¦s de la puesta en libertad del reo, bien entrado el mes de julio, en un fallo del que se responsabiliza el Supremo. Ya no hab¨ªa remedio, porque Lamari hab¨ªa escapado, pese a que se dict¨® orden de b¨²squeda. Pese a ello, asegura que el c¨¢lculo de la prisi¨®n preventiva debi¨® hacerse sobre el total de la condena y no sobre la mayor de ellas.

Son estas circunstancias las que la Audiencia quiere esclarecer. Por ello, el presidente de la Audiencia Nacional, Carlos D¨ªvar, ha encargado al presidente de la Sala de lo Penal de esta sede judicial, Javier G¨®mez Berm¨²dez, que redacte "a la mayor brevedad" un informe en el que se aclaren las circunstancias por las que el terrorista fue excarcelado al cumplir cinco a?os de prisi¨®n preventiva. El informe, previsiblemente, estar¨¢ listo ma?ana, despu¨¦s de que Berm¨²dez recabe las declaraciones de los magistrados que ordenaron la libertad de Lamari al estimar que se hab¨ªa cumplido el plazo m¨¢ximo de prisi¨®n preventiva.