"En espa?ol se dice huelga"

A unos pasos del Museo del Prado, el indicio m¨¢s cercano de la huelga general es un letrero que dice "As¨ª no" incrustado en la boca de Robert de Niro, impresa en un cartel publicitario. Al fondo, la plaza de Neptuno, el punto de reuni¨®n madrile?o de los manifestantes a favor de la huelga general.

Ah¨ª, a las cinco de la tarde, s¨®lo las pancartas y la multitud de panfletos esparcidos por la calle dejaban entrever que hoy era el 29-S. Para Anne y Roger, turistas de Connecticut (EE UU), la situaci¨®n es anecd¨®tica. "Nos avisaron desde ayer y cancelamos un viaje a ?vila, pero en Madrid no hemos tenido problema para llegar", explica Anne, justo antes de comprar su entrada para la exposici¨®n de Renoir.

?Les ha causado molestias? "No muchas", comenta sonriente. "Es interesante, aprendimos espa?ol. ?Ya sabemos que strike aqu¨ª se dice huelga!". ?Y les ha llamado la atenci¨®n? Roger responde. "Un poco, s¨ª. Es dif¨ªcil imaginar que algo as¨ª ocurrir¨ªa en Estados Unidos". Su explicaci¨®n suena m¨¢s una descripci¨®n de diferencias culturales que a una queja sobre su propio pa¨ªs, tambi¨¦n golpeado por la crisis.

"El museo s¨ª est¨¢ abierto", responde uno de los polic¨ªas apostados a la entrada. "Todo ha sido normal". El Prado no se ha resentido por la huelga ni en visitantes ni en trabajadores, describe su compa?ero. M¨¢s adelante, en el museo Thyssen, una familia de colombianos hac¨ªa fila para la exposici¨®n del fot¨®grafo Mario Testino. "No sab¨ªamos si estar¨ªa abierto, vinimos a la aventura", explica Bertha, que acompa?a a su esposo y a sus dos hijos. "No nos ha causado muchos problemas", afirma.

En el barrio cercano de Huertas, uno de los sitios concurridos por los extranjeros, la gran mayor¨ªa de los comercios y bares estaban abiertos. Angela y Carina, estudiantes italianas en la Universidad Complutense, explicaban que la ¨²nica diferencia que hab¨ªan notado era que "los estancos est¨¢n cerrados", aunque aseguraron apoyar la huelga. "Es un derecho que tienen todos", afirma Carina. "La situaci¨®n es muy dif¨ªcil y todos lo hemos resentido, aunque creo que la huelga se pudo haber hecho antes", dice Sneha Mistri, bailarina y core¨®grafa brit¨¢nica asentada en Madrid. Trabajadora aut¨®noma, bromea, "eso s¨ª, ?yo a qui¨¦n le hago huelga?".