EE UU revis¨® la seguridad de las nucleares espa?olas ante un ataque
Washington aval¨® la protecci¨®n de los reactores despu¨¦s de que un representante visitara Cofrentes.- Los cables muestran inquietud por el robo de uranio en la planta de Enusa en Salamanca
Expertos de Estados Unidos han visitado los ¨²ltimos a?os centrales nucleares espa?olas para revisar su seguridad ante un posible atentado terrorista. Los cables obtenidos por Wikileaks muestran c¨®mo miembros del Gobierno y del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) tratan el tema con la Embajada de Washington en Madrid. Carlos Torres, consejero para no proliferaci¨®n del Ministerio de Exteriores, se reuni¨® el 10 de febrero pasado con responsables de la embajada (cable 249640). Este les explica que "Exteriores e Interior siguen revisando la seguridad f¨ªsica de las instalaciones nucleares" y les detalla que "recientemente" hab¨ªa recordado con responsables de Interior la campa?a que ETA llev¨® a cabo entre 1977 y 1982 contra la nuclear de Lemoiz, cuya construcci¨®n qued¨® a medias. "Torres describi¨® la campa?a de ETA como 'bastante exitosa", se?ala el cable confidencial enviado a Washington, ya que "los terroristas consiguieron llegar bastante lejos dentro de la instalaci¨®n".
El cable prosigue: "[Torres] describi¨® las medidas de seguridad f¨ªsica actuales como 'buenas' pero sugiri¨® que todas tienen una debilidad: con su configuraci¨®n actual, no protegen contra alg¨²n trabajador [un insider] con permisos que quiera organizar un ataque desde dentro de la instalaci¨®n". Siempre seg¨²n el cable, "El Gobierno de Espa?a est¨¢ cada vez m¨¢s preocupado sobre c¨®mo defenderse de esta posibilidad, aunque Torres no indic¨® que Espa?a tenga informaci¨®n concreta de que ETA o radicales isl¨¢micos planeen un ataque as¨ª".
La amenaza del terrorismo
El 29 de enero pasado, la embajada envi¨® un cable secreto a Washington titulado: "Espa?a se mueve para proteger el material y las instalaciones nucleares". El despacho explica que el Ejecutivo espa?ol endurece las condiciones de seguridad de las nucleares "consciente de la amenaza que el terrorismo supone para su industria nuclear" y para evitar "la avalancha de publicidad negativa por accidentes recientes en sus instalaciones nucleares". La fuga de part¨ªculas radiactivas en la nuclear de Asc¨®, la erosi¨®n de una tuber¨ªa en Vandell¨°s II, ambas en Tarragona, y el robo de pastillas de uranio en la f¨¢brica de Juzbado (Salamanca) en 2007 han disparado las alarmas sobre la industria espa?ola. Los ocho reactores nucleares producen un 22% de la electricidad de Espa?a.
El cable afirma que despu¨¦s del 11-M, Espa?a "redobl¨® sus esfuerzos para asegurar sus instalaciones nucleares ante un ataque" y destaca que en 2004 aprob¨® un plan de respuesta ante un eventual incidente nuclear al que asign¨® 1.682 guardias civiles. Seg¨²n la embajada, "el CNI realiz¨® un informe en 2006 en el que indic¨® que el golpe m¨¢s devastador que los yihadistas podr¨ªan asestar a Espa?a ser¨ªa atacar una de las centrales nucleares".
EE UU parece bastante satisfecho con la seguridad de las centrales espa?olas y resalta que el CSN pidi¨® a la Agencia Internacional de la Energ¨ªa At¨®mica (AIEA) una evaluaci¨®n sobre todas sus pol¨ªticas de las que sali¨® con un "excelente". La cr¨ªtica a Espa?a fue la falta de un ¨²nico almac¨¦n nuclear. La embajada destaca que el Ministerio del Interior se encarga de la protecci¨®n exterior de las centrales y que en el interior hay contratados ex polic¨ªas y ex militares, seg¨²n les revel¨® el ex consejero del CSN Juli Barcel¨®. Este resumi¨® que las medidas de seguridad antes del 11-S ya eran "buenas" pero que su implantaci¨®n "se hab¨ªa relajado".
La legaci¨®n relata c¨®mo en 2002 ecologistas de Greenpeace ascendieron a la c¨²pula de la nuclear de Zorita (Guadalajara, ya cerrada) y desplegaron una pancarta antinuclear. Despu¨¦s de aquello, el CSN recomend¨® que las el¨¦ctricas rodearan con un doble vallado las centrales. En 2007, adem¨¢s, Greenpeace lleg¨® por el r¨ªo hasta la nuclear de Almaraz (C¨¢ceres) y otro la sobrevol¨® con un paramotor, tras lo cual pusieron alambre de espino en el tejado del edificio. Adem¨¢s, revela el enfado del CSN con el incidente de Juzbado.
El responsable de la campa?a nuclear de Greenpeace, Carlos Bravo, explica que tras la protesta en Almaraz el CSN les advirti¨® muy seriamente de que no lo repitieran: "Nos advirtieron con que peligraba nuestra seguridad". El Congreso tramita actualmente un proyecto de Ley de Protecci¨®n de Infraestructuras Cr¨ªticas que incluye las nucleares.
El responsable de la embajada relata una conversaci¨®n que tuvo con un directivo de la Agencia de Seguridad Nuclear estadounidenses (NRC), que el a?o anterior hab¨ªa visitado la nuclear de Cofrentes (Valencia). La NRC detall¨® que en Cofrentes hay "sistemas de detecci¨®n en el vallado que incluyen c¨¢maras de v¨ªdeo, sensores de detecci¨®n de movimiento y vigilancia infrarroja".
Fuentes del sector explican que el trato entre el CSN y la NRC es muy frecuente, ya que nucleares espa?olas se construyeron con tecnolog¨ªa de EE UU, por lo que se les aplica la normativa de pa¨ªs de origen y tiene que haber un contacto continuo sobre las actualizaciones.
El directivo defini¨® el sistema de protecci¨®n como "muy similar a los de las instalaciones en Estados Unidos". Adem¨¢s, detall¨® la existencia de un sistema "bastante impresionante": una c¨¢mara que graba los bajos de cualquier veh¨ªculo que entra en la nuclear y compara la imagen con las anteriores del mismo coche por si ha habido alg¨²n cambio.
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Un futuro nuclear abierto
El Gobierno mostr¨® ante la Embajada de EE UU en Madrid su preocupaci¨®n por el futuro de la industria nuclear espa?ola. El 8 de enero de 2009, Carlos Torres, del Ministerio de Exteriores, se reuni¨® con responsables estadounidenses y les expres¨® su preocupaci¨®n por "la revisi¨®n del tratado de no proliferaci¨®n nuclear", ya que "dividir¨ªa a los pa¨ªses entre los que pod¨ªan enriquecer uranio y los que no".
Y puso como ejemplo la relaci¨®n con Francia en la empresa conjunta de enriquecimiento de uranio ¡ªel combustible para las centrales¡ª. Seg¨²n Torres, Francia quiere encarecer la participaci¨®n en el proyecto que le sustituir¨¢, lo que podr¨ªa obligar al Gobierno a buscar otros socios.
Seg¨²n un cable secreto (n¨²mero 186.657), Torres pidi¨® mantener el tratado de forma que "permita a Espa?a participar en un consorcio nuclear o proseguir el enriquecimiento de uranio en alg¨²n momento", algo que Espa?a nunca ha realizado. La embajada concluye el cable con un comentario en el que contrapone las palabras de Torres con la repetida pol¨ªtica de Zapatero de cerrar las nucleares, y lo atribuye a que "puede ser parte de un esfuerzo entre bastidores para mantener abiertas las opciones energ¨¦ticas", aunque admite que no tiene informaci¨®n de que haya cambiado la decisi¨®n pol¨ªtica antinuclear.
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