Zapatero prepara a la c¨²pula del PSOE para un fracaso del pacto social

Nunca los actores sociales y pol¨ªticos estuvieron tan dispuestos a la negociaci¨®n, pero no es suficiente. Esta aseveraci¨®n de un miembro del Gobierno cercano a las conversaciones con sindicatos y empresarios sobre pensiones, reforma laboral y pol¨ªticas activas de empleo, como aspectos m¨¢s importantes, sirve para definir el estado de las conversaciones. "El acuerdo global es muy dif¨ªcil; habr¨¢ pactos parciales y, por tanto, desacuerdos, pero no ruptura", definen en la c¨²pula del PSOE. Estas impresiones van algo m¨¢s all¨¢ de lo expresado ayer por el presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, tanto en la reuni¨®n de la ma?ana en La Moncloa, con la c¨²pula del Gobierno y del partido; como en la de la ejecutiva federal. Los miembros de la direcci¨®n salieron preparados para afrontar la ausencia de pacto pero con la firmeza absoluta de defender las reformas que el Gobierno aprobar¨¢ haya o no acuerdo con sindicatos y patronal.

Para lograr el acuerdo, anoche, a las nueve arranc¨® un nuevo intento de limar asperezas. Los l¨ªderes sindicales, Ignacio Fern¨¢ndez Toxo (CCOO) y C¨¢ndido M¨¦ndez (UGT) se ve¨ªan con el ministro de Trabajo, Valeriano G¨®mez, y, probablemente, con el vicepresidente primero, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, se prolong¨® hasta entrada la madrugada. No se lleg¨® a conclusi¨®n alguna. As¨ª que hoy el PSOE probablemente tendr¨¢ que afrontar la votaci¨®n de las recomendaciones del Pacto de Toledo sin el aval del pacto social que buscaba. Lo probable es que los contactos -bien en reuniones, bien en conversaciones- prosigan hasta que el viernes el Gobierno presente su anteproyecto de ley con la reforma de pensiones. Hoy, de hecho, contin¨²an las negociaciones, informan fuentes de la negociaci¨®n.

Sobre los asuntos en los que persisten las diferencias los dirigentes socialistas no informaron en ninguna de las reuniones que el PSOE celebr¨® ayer. Ni en la ejecutiva ni en la que se desarroll¨® por la tarde con los secretarios provinciales y locales, prolongaci¨®n de la del s¨¢bado con los barones territoriales. En la primera, el presidente del Gobierno se?al¨® que el acuerdo "era muy, muy dif¨ªcil" y lo repiti¨® con insistencia. Lo mismo hizo el secretario de Organizaci¨®n, Marcelino Iglesias, en un af¨¢n de no lanzar las campanas al vuelo ni crear falsas expectativas. No hay acuerdo, pero nadie se levanta de la mesa, como lo demuestra el hecho de que los socialistas no paran de lanzar alabanzas a los sindicatos. "Su actitud es de absoluta responsabilidad", insist¨ªa Iglesias.

Desacuerdo en la reforma de las pensiones

Pero, ?d¨®nde est¨¢ el nudo gordiano del desacuerdo? En todos los temas hay diferencias, tambi¨¦n en todos hay partes de acuerdo, se?alan quienes conocen la negociaci¨®n que ha continuado hasta pasadas las dos de la madrugada de hoy.

Pero en el tema en el que hay m¨¢s distancia y cunde el pesimismo es en la reforma de las pensiones. Y he aqu¨ª el problema capital para alcanzar el anhelado pacto social, casi obligado para ambas partes. En los dem¨¢s puntos, negociaci¨®n colectiva y pol¨ªticas activas de empleo, los negociadores se muestran optimistas.

En pensiones, Gobierno y sindicatos se han movido poco de sus posiciones iniciales. Todas las fuentes consultadas ven "muy dif¨ªcil" ?casi imposible? el pacto. El Ejecutivo todav¨ªa no se ha apeado oficialmente de exigir 41 a?os cotizados para poder jubilarse a los 65 a?os, aunque anoche en una entrevista en Veo7 Zapatero mostr¨® cierta flexibilidad. Habl¨® de carreras largas "en torno a 40 a?os". Este es un elemento central de oposici¨®n para los sindicatos, que defienden que se cotice durante 35 a?os, como hasta ahora.

M¨¢s proximidad hay en buscar f¨®rmulas paliativas para los colectivos m¨¢s perjudicados por la reforma: j¨®venes y mujeres, con carreras de cotizaci¨®n m¨¢s cortas. Para las mujeres, los sindicatos exigieron el s¨¢bado que se les sumara dos a?os de cotizaci¨®n por cada hijo. De entrada, el Gobierno, apuntan fuentes de la negociaci¨®n, rechaza la propuesta si es generalizada, pero est¨¢ dispuesto a estudiarla si se refiere a las mujeres con carreras de cotizaci¨®n que se queden en los umbrales de cumplir los requisitos.

Pero el desacuerdo no detendr¨¢ el af¨¢n reformista del Gobierno. As¨ª lo mostraron tanto Zapatero como Iglesias y, en la reuni¨®n de la tarde, el vicesecretario general, Jos¨¦ Blanco, y el ministro de Trabajo, Valeriano G¨®mez, mostraron una determinaci¨®n absoluta en la necesidad de las reformas. As¨ª, todo el partido tiene argumentos para defenderlas. Y de eso se trataba.

El apoyo a todas las reformas, incluida la subida de la edad legal de retiro a los 67 a?os, no excluye que ayer los secretarios provinciales y locales como el s¨¢bado os barones territoriales pidieran al Gobierno y a sus dirigentes que hicieran el m¨¢ximo esfuerzo por alcanzar un acuerdo. Todos ellos piensan en las elecciones auton¨®micas y municipales del pr¨®ximo mes de mayo. "El mismo inter¨¦s tenemos nosotros, no lo dud¨¦is", aseguran que les dijo ayer Blanco. En estas reuniones internas se termina con comentarios m¨¢s que elogiosos hacia la figura del ministro de Trabajo, Valeriano G¨®mez.