"La dolce vita' no era una gran pel¨ªcula, existe por la secuencia de la Fontana de Trevi"
Anita Ekberg, que el jueves cumplir¨¢ 80 a?os, recuerda su carrera en una entrevista
El jueves cumplir¨¢ 80 a?os. Y 51 han pasado desde aquel ba?o en la Fontana de Trevi y aquel "?Marcello!" que grabaron la imagen y el nombre de Anita Ekberg en la mente de todo cin¨¦filo. Lejos de esa dolce vita, la diva sueca, cuyo nombre completo es Kerstin Anita Marianne Ekberg, descansa hoy en una cl¨ªnica de Nemi, cerca de Roma. Y all¨ª se ha dejado entrevistar por el diario italiano Il Corriere della Sera. "Me siento un poco sola, pero no tengo remordimientos", asegura la actriz.
"He amado, he llorado, he estado loca de felicidad. He ganado y he perdido. No tengo ni marido ni hijos", rememora la int¨¦rprete. La silla de ruedas desde la que contesta a las preguntas del diario italiano, legado de la ruptura de ambos f¨¦mures, marca la distancia con la joven despampanante que se paseaba por la fuente romana. "Ahora los m¨¦dicos est¨¢n intentando hacer que ande de nuevo. A Fellini le encantaba c¨®mo caminaba", recuerda Ekberg.
De hecho, lo hac¨ªa bastante mejor que Mastroianni, ese Marcello al que invitaba a ba?arse con ella: "Durante el rodaje di varias vueltas por la fuente y nunca me tropec¨¦. ?l en cambio ten¨ªa fr¨ªo y se vaci¨® una botella de whisky. Se cay¨® tres veces y tres veces tuvieron que secarle. Al final le pusieron unas botas de pescar debajo de los pantalones".
La secuencia famosa
Fue la secuencia que la llev¨® a la fama y que, seg¨²n ella, hizo inolvidable una pel¨ªcula que no lo era. "No era un gran filme, existe por esa escena. Y all¨ª est¨¢bamos Marcello y yo. Bueno, m¨¢s yo que ¨¦l. Era bell¨ªsima, lo s¨¦", cuenta. Tanto que el director Dino Risi, el empresario Gianni Agnelli y el cantante Frank Sinatra, entre otros, intentaron seducir a la Miss Suecia de 1951.
Ahora la actriz pasa la mayor¨ªa del tiempo sola. Y le resulta dif¨ªcil encontrar actividades entretenidas: "Los d¨ªas son infinitos. La televisi¨®n es mon¨®tona al igual que los noticiarios, siempre hablando del guarro de vuestro premier [le dice al periodista en alusi¨®n a Berlusconi]. ?Por qu¨¦ le hab¨¦is votado tantos a?os?". Eso s¨ª, la acompa?an las monjas de la cl¨ªnica, las mismas que el jueves han organizado un almuerzo en su honor. Por un d¨ªa, 51 a?os despu¨¦s, volver¨¢ a ser protagonista.
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