"Ojal¨¢ que se pudra bajo tierra y que se lo coman las v¨ªboras"

La abogada Mar¨ªa Dolores Mart¨ªn Pozo, acusada de ordenar el asesinato de su exmarido en 2007 en Ciempozuelos, ha intentado demostrar durante las dos horas de interrogatorio en la primera sesi¨®n del juicio contra ella y otros dos acusados que la muerte de su ex c¨®nyuge se debi¨® a un crimen encargado por los compa?eros de juego de rol de la v¨ªctima. Sin embargo, las conversaciones escuchadas en la sala 0 de la Audiencia Provincial entre la letrada y alguno de los encausados han demostrado que ella se alegr¨® de su muerte. "Ojal¨¢ que se pudra bajo tierra y que se lo coman las v¨ªboras", se ha escuchado en la vista oral.

El juicio, que ha empezado con una hora de retraso, se ha iniciado por orden del magistrado presidente de la secci¨®n 15, con la lectura de los escritos de acusaci¨®n y de las defensas de los tres encausados. El fiscal solicita hasta 41 a?os para la letrada, 39 para el intermediario de ¨¦sta con el autor de los disparos , Eloy S¨¢nchez Barba y 45 para el sicario que mat¨® a Jos¨¦ Manuel Salgado Pimentel, cuando regresaba de su trabajo y en el garaje de su domicilio.

El Ministerio fiscal ha empleado cerca de una hora en interrogar a la letrada que ha mantenido que tiene "sentimientos opuestos" respecto a su ex marido: "A veces le odio y otras veces no". Esta declaraci¨®n contrasta con las conversaciones que mantuvo por el m¨®vil en el que lleg¨® a calificarle de "hijo de puta" y para el que dese¨® que Dios lo tuviera en sus infiernos. "Ha sido malo durante la vida y sigue si¨¦ndolo ya una vez muerto", se ha escuchado durante el juicio. El representante del ministerio p¨²blico preguntaba primero a la acusada y despu¨¦s le rebat¨ªa todas sus afirmaciones con las grabaciones de las conversaciones de su tel¨¦fono m¨®vil.

La abogada, que ha mantenido un tono nervioso y hasta de reto con el Ministerio fiscal, ha asegurado en todo momento que no conoc¨ªa ni mantuvo una reuni¨®n con el sicario Carles Michael Guarin, que tambi¨¦n se sienta en el banquillo de los acusados junto con Eloy S¨¢nchez Barba. Su estado de excitaci¨®n era tal que muchas veces ha impedido al fiscal efectuar las preguntas y las ha llegado a contestar mucho antes de que la terminara. Ha rechazado que este ¨²ltimo fuera el encargado de ponerles en contacto y achaca la confesi¨®n de S¨¢nchez Barba a miedo a terceras personas, en especial a su socio Gabriel, quien supuestamente estaba detr¨¢s del crimen, seg¨²n su versi¨®n.

La acusada no ha recordaba porque hablaron la tarde del 14 de marzo de 2007, una hora despu¨¦s de que muriera asesinado en su garaje el exmarido e inform¨¢tico. Ha asegurado que cada d¨ªa hablaba varias veces con su amigo Eloy y que desconoc¨ªa cu¨¢l fue contenido de esas llamadas. Despu¨¦s quedaron a cenar por la zona de Sanchinarro.

El juicio continuar¨¢ ma?ana en la Audiencia Provincial con las declaraciones de Eloy S¨¢nchez y de Charles Michael Guar¨ªn Cercos.