Una sirena sin miedo a la c¨¢rcel
El compromiso con el medio ambiente de la actriz Daryl Hannah no conoce l¨ªmites Nos lo cuenta en la gala ben¨¦fica Starlite, organizada por Antonio Banderas en Marbella
Daryl Hannah es un ¨¢ngel. Qu¨¦ si no podr¨ªa pensarse de esa aparici¨®n que emerge bajo el sol del mediterr¨¢neo, reflejado en sus cabellos dorados y ojos aguamarina, espigada, casi et¨¦rea, para la que el tiempo casi (solo casi) parece no haber transcurrido desde aquellos a?os ochenta de 1, 2, 3¡ Splash o Magnolias de acero. Aunque para ser un ¨¢ngel no basta solo con la apariencia. Hacen falta acciones angelicales. Como parte de su cruzada por un mundo m¨¢s justo, la actriz estadounidense (Chicago, 1960) particip¨® el pasado s¨¢bado en la gala marbell¨ª Starlite, una reuni¨®n anual y estival de famosos con una misi¨®n: recaudar dinero para ni?os necesitados. All¨ª, rodeada de celebrities y reencontrada con sus compa?eros de reparto en el filme de 1995 Two much ¨Cnuestro Antonio Banderas y su Melanie Gri?ffith¨C,? recibi¨® el Premio Humanitario Starlite 2012 por su labor de defensa del medio ambiente. ¡°Conozco Starlite a trav¨¦s de Antonio [Banderas] y, realmente, ?c¨®mo podr¨ªa no apoyar la causa?¡±, arranca a la vez que sorbe un humeante capuchino para ¡°despejarse¡± antes de la fiesta, que comenzar¨ªa en unas horas. ¡°Dicen que hay una receta de la felicidad en este mundo, y una parte muy importante es prestar un servicio a tu comunidad¡±.
¡°A nadie le gusta ir a prisi¨®n. Ni tampoco que le esposen, pero creo que a veces es necesario para lanzar un mensaje¡±
Lo que dice no es por decir. Sabe de lo que habla. Hace unos a?os, en 2006, pas¨® varias horas en la c¨¢rcel por hacer una sentada y encadenarse a un nogal en defensa de una granja org¨¢nica en el sur de Los ?ngeles. En 2009 volvi¨® a ser arrestada por protestar contra la remoci¨®n de la cima de los Apalaches para extraer carb¨®n, y en 2011, por manifestarse frente a la Casa Blanca por un oleoducto. ¡°A nadie le gusta ir a prisi¨®n¡±, se r¨ªe, ¡°ni tampoco que le esposen, pero creo que a veces es necesario para lanzar un mensaje¡±. La prensa, dice, le ha colgado el sambenito de ecologista. Pero ella se siente m¨¢s que eso. ¡°Creo que todo est¨¢ interconectado. Por eso llamo a mi web de informaci¨®n DHlovelife (Daryl Hannah ama la vida), porque si realmente amas la vida, quieres que prospere. Tenemos que ser conscientes de las ramificaciones de nuestros actos¡±, sostiene, siempre preocupada de que su interlocutora entienda todas las palabras que pronuncia en ingl¨¦s. ¡°Yo s¨¦ hablar un poco de espa?ol. Nunca lo he estudiado, pero de alg¨²n modo lo he cogido¡±, comentaba antes, de camino a la sala del hotel de Puerto Ban¨²s donde tuvo lugar la entrevista. ¡°Si no conoces alguna palabra, d¨ªmela en espa?ol¡±.
Daryl Hannah es un demonio. En Kill Bill hizo de s¨¢dica asesina a sueldo; en Blade Runner se transform¨® en una desalmada replicante; en Wall Street fue la novia de un corredor de Bolsa sin escr¨²pulos. ¡°?Qui¨¦n quiere hacer lo mismo todos los d¨ªas?¡±, salta de la silla con las cejas levantadas. Hace apenas dos meses ha finalizado su interpretaci¨®n de una madura jugadora de baloncesto cuyo equipo, que tambi¨¦n cuenta entre sus filas con Melanie Griffith y Brooke Shields, decide retar a los campeones nacionales de secundaria. Y en septiembre pondr¨¢ rumbo a Londres para grabar una cinta inspirada en una novela gr¨¢fica. ¡°La gente me toma por una ingenua, pero yo me veo m¨¢s como una actriz de car¨¢cter. No es que sea un personaje. Soy una actriz¡±, se r¨ªe.
De su trabajo con los m¨¢s grandes directores, de Robert Altman a Woody Allen, de Ron Howard a Quentin Tarantino, se queda, ante todo, con las experiencias vividas. ¡°Es genial colaborar con alguien que ama lo que hace y que adem¨¢s es bueno¡±, dice entre risas. Rodar con el director de Kill Bill, quien la rescat¨® para las portadas tras m¨¢s de una d¨¦cada de filmes que diluyeron su fama, fue todo menos ca¨®tico. A pesar de lo que uno pudiera imaginarse. ¡°Tarantino es el cineasta por antonomasia. Es fant¨¢stico, y disfruta much¨ªsimo con el proceso¡±. Su paso por Holly?wood, sin embargo, no le ha forjado muchas amistades duraderas: solo Griffith se hace valedera de sus alabanzas. ¡°Nuestros caminos se cruzan a menudo. Es una persona muy agradable y c¨¢lida, algo que no puedo decir de muchas mujeres que trabajan en mi industria, que no apoyan a otras mujeres, sino que son competitivas¡±. De sus relaciones m¨¢s ¨ªntimas, entre las que a lo largo de los a?os han trascendido la que mantuvo con el cantante Jackson Browne y con el hijo del presidente Kennedy, John John, cuenta poco. ¡°Nunca me he casado, pero he tenido relaciones muy largas y estables, que es casi lo mismo¡±.
"Melanie Griffith es una persona muy agradable y c¨¢lida, algo que no puedo decir de muchas mujeres que trabajan en mi industria, que no apoyan a otras mujeres, sino que son competitivas¡±
Daryl Hannah es, al fin y al cabo, una persona normal. Un d¨ªa fue una ni?a que so?aba con los mundos m¨¢gicos que emanaban de la pantalla de su televisor. Y muy pronto vio c¨®mo sus fantas¨ªas se realizaban. ¡°Empec¨¦ a trabajar a los 11 a?os, aunque no fue hasta los 17 cuando me met¨ª en ello de lleno¡±, recuerda. Aquejada de insomnio, la joven Daryl ve¨ªa pel¨ªculas para pasar la noche. ¡°Y empec¨¦ a leer sobre Errol Flynn, Judy Garland y todos los actores que ve¨ªa¡±. Un libro sobre Garland hablaba de c¨®mo esta ten¨ªa un agente y acud¨ªa a audiciones. ¡°Me puse a llamar por la cabina del colegio a todos los agentes que aparec¨ªan en el list¨ªn y despu¨¦s de clase me cog¨ªa un autob¨²s para ir a verlos¡±. A sus padres, claro, no les hizo ni pizca de gracia. ¡°Mi madre me hizo prometerle que solo lo har¨ªa de vez en cuando, y sin cont¨¢rselo a nadie¡±.
Aunque los a?os han corrido inexorablemente, Hannah mantiene parte de ese candor infantil. Con su mejor amiga, ha inventado cuatro juegos de mesa, y est¨¢ trabajando en otro online. ¡°Nos encantan, porque re¨²nen a la gente f¨ªsicamente¡±, sonr¨ªe. Esa misma amiga fue quien le llev¨® de ruta por varios pa¨ªses a bordo de un autom¨®vil de lujo como participante del estramb¨®tico rally anual Gumball 3000. ¡°Solo lo hice una vez, porque ella quer¨ªa recaudar dinero para concienciar sobre el c¨¢ncer de mama entre las j¨®venes¡±, apunta. ¡°Y, por supuesto, no usamos petr¨®leo, as¨ª que ten¨ªamos que ir buscando el combustible por todos los pa¨ªses¡±. Cuando regresa a su casa, en las Monta?as Rocosas, cuida de los muchos animales de granja con los que convive. Si no, se dedica a ¡°educarse y compartir informaci¨®n¡± sobre las causas en las que se implica. Ella no es tan superficial como para perder el tiempo en trivialidades. ¡°Mi ¨²nico comportamiento fr¨ªvolo consiste en, por ejemplo, hacer lo que hice ayer: ir a la playa y rodar en el fango y en la arena. Nada de discotecas ni cosas de esas¡±.
STARLITE, CLUB DE MODA
Este verano, la cantera de Nag¨¹eles, a las afueras de Marbella, ha transformado radicalmente su uso. De ser un lugar de donde extraer piedra, ha pasado a ser un espacio que pretende sacar oro a base de bailes, copas y tapas. En este enclave en plena Sierra Blanca se celebr¨® el s¨¢bado pasado la gala ben¨¦fica Starlite, a la que acudi¨® Hannah, y se erige el Starlite Lounge, un local de 1.700 metros cuadrados abierto en ¨¦poca estival que acoje 'dj's' de renombre y espect¨¢culos de 'burlesque', cabar¨¦ y 'drag queens'. Adem¨¢s, tapas y c¨®cteles creados por el superchef Paco Roncero. Hace 30 a?os, Alfonso Hohenlohe, Julio Iglesias y Pl¨¢cido Domingo quisieron convertir este entorno natural en un auditorio. Hoy, aquella visi¨®n se ha realizado: adem¨¢s de albergar el Lounge, tiene lugar all¨ª el Festival Starlite. Entre el 13 de julio y el 14 de agosto se han visto o se ver¨¢n caer por la cantera estrellas como Tony Bennet, Christopher Cross o el propio Iglesias.
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