Algunas rubias aut¨¦nticas
A Aguirre, con el sofoc¨®n de la retirada, se le pas¨® el turno en la pelu y sali¨® a raya descubierta. Paulina, otra morena de nacimiento, ha puesto a caer de un burro a su ex sin ni siquiera nombrarlo
Ya que estamos en confianza, voy a contar mi secreto: estoy comidita de piojos. Llevaba unos d¨ªas con prurito, pero le¨ª en Internet que eso era falta de potasio y me puse a pl¨¢tano estricto antes de empezar el lunes sin falta la dieta de la pi?a, que no veas el pandero que he echado con la horchata de almendras de Campello. Como que me encontr¨¦ el otro d¨ªa a un pez gordo del curro en el ascensor y me solt¨® que subir andando es buen¨ªsimo para los gl¨²teos. ?l, que va de Tony Manero y est¨¢ para mojar pan, pero una hogaza entera, que aqu¨ª ensanchamos todos. Pero a lo que iba, que me pierdo: los par¨¢sitos. Voy ayer a te?irme despu¨¦s de semanas en lista de espera y me dice Juanlu, mi peluquero estrella, que ni potasio ni hostias, que lo que tengo es un nido de liendres que r¨ªete t¨² de las ovejas de su pueblo. ?l, que va de cosmopolita por la vida. Total, que ha vetado mi presencia en un radio de cinco kil¨®metros de su templo, y aqu¨ª estoy, en plena rentr¨¦e, con unas ra¨ªces de siete cent¨ªmetros.
Algunas rubias de hecho, pocas, damos el pego, pero tenemos nuestras servidumbres. Mira si no a Esperanza Aguirre el d¨ªa de su dimisi¨®n presuntamente definitiva. Ll¨¢mame p¨¦cora, pero mientras todos estaban pendientes de si echaba o no la lagrimita, a m¨ª se me iban los ojos al pelo. Se ve que a la lideresa, con el sofoc¨®n de la retirada, se le pas¨® el turno en la pelu y sali¨® a raya descubierta a decirle a Rajoy ah¨ª te quedas. Eso es un cortafuegos como est¨¢ mandado y no los que quiere Soraya que talen gratis los parados. Hablando de casta?as oscuras casi negras, daba pena de ver a Ignacio Gonz¨¢lez con el marronazo por el liderazgo que le ha dejado la jefa en herencia. No ha dicho el pobre ni esta boca es m¨ªa y ya est¨¢n Dolores de Cospedal y Ana Botella, otras dos que tal se tintan, seg¨¢ndole la hierba bajo los castellanos de borlas.
Y es que hay algunas que ni perdonan, ni olvidan. ¡°Del amor al odio hay un paso¡±, declara, enigm¨¢tica, Paulina Rubio en la portada de Vanity Fair, versi¨®n espa?ola. Imagino que se refiere a su ex y padre de su hijo, Nicol¨¢s Vallejo-N¨¢jera, vulgo Colate, al que pone a caer de un burro en p¨¢ginas interiores sin ni siquiera nombrarlo, que para eso ella es una diva latina multimillonaria y ¨¦l, un ni?o medio bien madrile?o. Por cierto, digo que es Paulina porque lo pone as¨ª de grande en el t¨ªtulo, que si no, no das cr¨¦dito. Tienes que ver a la mexicana, otra morena de nacimiento ¨Chay pruebas gr¨¢ficas¨Cretratada en plan vamp rub¨ªsima platino con un aire entre Christina Aguilera, Anita Ekberg y Cristina T¨¢rrega que quita el hipo del susto: el sue?o del Photoshop produce monstruos.
No quiero terminar estas l¨ªneas sin hacerme eco de una primicia planetaria: Shakira est¨¢ pre?ada, por si no te hab¨ªas enterado. Y ahora te dejo, que tengo la cabeza mala. De qu¨¦ iba a pensar yo a estas alturas que iba a acabar piojosa. Y menos este mes, que le tocan los cr¨ªos a su padre con la custodia compartida. Seguro que me los ha pegado en pilates una estirada del Opus que tiene a sus siete criaturas en uno de esos colegios segregados de los que Wert quiere subvencionar con fondos p¨²blicos. Ahora, yo me declaro insumisa. La que lo hace, lo paga.
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