La exni?era que maneja el volante de Volkswagen
Dicen que de la sonrisa de Ursula Pi?ch depende la suerte de un prototipo Esta es la historia de c¨®mo la institutriz de los hijos del patriarca del autom¨®vil se convirti¨® en su esposa Y, poco a poco, en la mujer m¨¢s poderosa del mundo del motor
Ursula Pi?ch tiene 56 a?os, es due?a de una sonrisa contagiosa y alegre y, seg¨²n cuentan las personas que pertenecen a su c¨ªrculo ¨ªntimo, tiene el poder de vetar los nuevos modelos que produce Volkswagen o Audi. Uschi, como le llama su esposo, el patriarca de VW, Ferdinand Pi?ch, tambi¨¦n adora los coches exclusivos, una debilidad que se puede comprobar en su garaje privado, donde hay un Ferrari 353, un Bentley GTC, un Bugatti Veyron, un Audi R8... 12 joyas de cuatro ruedas que lucen placas con las iniciales UP-1 hasta UP-12.
En Wolfsburg y Braunschweig nadie se asombra cuando recibe un nuevo modelo de Audi que a¨²n no est¨¢ a la venta. Su veredicto final es determinante para que el prototipo ingrese a la cadena de montaje. Pero Ursula Pi?ch estremeci¨® al exquisito mundo de la industria automovil¨ªstica alemana cuando su esposo la propuso, en abril de 2012, para ocupar un sill¨®n en el consejo de vigilancia de VW. El peri¨®dico conservador Die Welt se pregunt¨®: ¡°?Est¨¢ la se?ora Pi?ch capacitada para el cargo? ?Ser¨¢ capaz una mujer que fue presentada a la junta de accionistas como una institutriz de adoptar las decisiones necesarias para un consorcio que da trabajo a 500.000 personas y que est¨¢ en camino de convertirse en el l¨ªder de la industria automovil¨ªstica mundial?¡±. Respuesta del propio Ferdinand Pi?ch: ¡°Mi mujer har¨¢ el trabajo mucho mejor que yo¡±.
El sector volver¨¢ a conmocionarse cuando, en mayo pr¨®ximo, la esposa de Ferdinand Pi?ch entre en el exclusivo gremio de control de Audi. ¡°Ursula Pi?ch representa, con su peritaje y experiencia empresarial de d¨¦cadas en la industria automovil¨ªstica, un enriquecimiento en el consejo de vigilancia de Audi¡±, admite el consejero delegado, Rupert Stadler.
No es todo. En un futuro no muy lejano se convertir¨¢ en la mujer m¨¢s poderosa del mundo automovil¨ªstico, cuando se haga realidad el ¨²ltimo deseo de su esposo, anunciado en 2010. Ese a?o, Ferdinand Pi?ch dio a conocer que su multimillonaria herencia industrial quedar¨ªa en manos de su esposa, Ursula. El patriarca posee el 7% de las acciones de Porsche y el 10% del holding Porsche, que a la vez es el accionista mayoritario de Porsche y VW. Para evitar que sus 12 hijos dilapiden la fortuna acumulada a lo largo de su vida y puedan poner en riesgo el futuro del grupo, Pi?ch cre¨® dos fundaciones austriacas ¡ªFerdinand Karl Alpha y Ferdinand Karl Beta¡ª, que administrar¨¢n una fortuna calculada en unos 5.000 millones de euros y el paquete de acciones, dos poderosas fortalezas para asegurar el imperio. El control de ambas fundaciones quedar¨¢ en manos de Ursula, siempre y cuando ella no vuelva a casarse.
Es muy h¨¢bil para valorar nuevos coches, en otra ¨®ptica que la de los ingenieros
Un poder extraordinario para una mujer que inici¨® su carrera en las vacaciones de Navidad de 1982 como una amante secreta que hab¨ªa llegado de Austria. La actual se?ora Pi?ch naci¨® y creci¨® como Ursula Plasser, hija de un funcionario de aduanas en Braunau, un pueblo tristemente famoso por ser tambi¨¦n el lugar de nacimiento de Hitler.
A los 25 a?os, cuando era la directora de una guarder¨ªa, la joven, con ganas de conocer el mundo, acept¨® un trabajo como gobernanta en el hogar de Ferdinand Pi?ch, en aquella ¨¦poca padre de nueve hijos y miembro de la junta ejecutiva de Audi. Para obtener el trabajo, hab¨ªa asegurado ser independiente y capaz de desplazarse en situaciones extremas.
Ferdinand Pi?ch, por cuyas venas circula gasolina en lugar de sangre, quer¨ªa conocer las habilidades de la nueva institutriz al frente del volante de un todoterreno. ¡°El coche era un Volkswagen Iltis, un veh¨ªculo dif¨ªcil de conducir. En una pendiente de 17 grados la obligu¨¦ a detenerse y volver a arrancar¡±, recuerda Pi?ch en su biograf¨ªa. ¡°Dos veces ahog¨® el motor, y yo sonre¨ª, pero tuve un extra?o presentimiento¡±. Ursula recuerda la prueba de otra forma. ¡°?l sonre¨ªa y yo me dije: ¡®?Qu¨¦ t¨ªo m¨¢s est¨²pido!¡±.
El ¡°extra?o presentimiento¡± de Pi?ch se transform¨® en poco tiempo en pasi¨®n, y la jovial Ursula termin¨® convirti¨¦ndose, en septiembre de 1984, en la esposa del adusto ingeniero austriaco, nieto del legendario Ferdinand Porsche. ¡°?C¨®mo te puedes casar con mi padre cuando eres una persona tan humana y alegre?¡±, le dijo una de sus hijastras.
En los ¨²ltimos 29 a?os, ?rsula Pi?ch no ha perdido su buen humor. En cambio, la exni?era se transform¨® en la confidente y consejera del hombre m¨¢s poderoso de la industria del autom¨®vil alemana y desarroll¨® un raro instinto para mediar en las tormentosas relaciones que ha mantenido su esposo con la familia Porsche.
Cuando Ferdinand Pi?ch se convirti¨® en el poderoso jefe de Volkswagen, en 1993, Ursula dej¨® de ser la esposa discreta y empez¨® a sobresalir en el mundo de los motores. La planta ejecutiva de VW conoci¨® de cerca sus habilidades y tambi¨¦n el alto nivel de influencia que ella ejerc¨ªa sobre su esposo. M¨¢s importante a¨²n, descubrieron en ella una rara habilidad para apreciar y valorar los nuevos modelos, pero desde una ¨®ptica diferente de la que tienen los ingenieros.
Los elogios se hicieron p¨²blicos cuando Ursula fue elegida en el gremio de control de VW en abril del a?o pasado. ¡°Es una mujer competente y que piensa como empresaria¡±, admiti¨® Martin Winterkorn, actual presidente de VW. ¡°La se?ora Pi?ch es una empresaria con un alto nivel de competencia social¡±, a?adi¨® Bernd Osterloh, el presidente del comit¨¦ de empresa de VW.
¡°La se?ora reconoce a los adulones a primera vista, pero tambi¨¦n tiene una enorme autoridad, que ejerce sin que nadie se sienta maltratado¡±, admiti¨® un ejecutivo de Audi a EL PA?S. ¡°Cuando una persona como ella ejerce su autoridad con el m¨ªnimo de gestos y palabras, significa que tiene mucho poder, pero tambi¨¦n es conciliadora e integradora¡±, a?adi¨®.
Ursula Pi?ch tambi¨¦n posee otra cualidad que solo conoce su esposo. El patriarca, que admiti¨® en su biograf¨ªa que sufri¨® de legastenia (dificultad para la lectura y escritura) cuando era ni?o, le pide a su esposa que le lea textos largos. Ella lo hace con placer, pero tambi¨¦n se permite seleccionar lo que es importante. Una capacidad que le ayud¨® a convertirse en la matriarca de VW.
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