No existe una sola capital en
toda ?frica que no tenga una calle, un colegio, una estatua o un parque que
lleve el nombre de Nelson Mandela. Ni una sola. Madiba (el nombre de su clan con el que tambi¨¦n se le llamaba) y su lucha contra el
apartheid han sido inspiraci¨®n y aliento para millones de personas en todo el
mundo, pero sobre todo para los africanos. Nadie duda de que estamos ante un
ser humano incre¨ªble, irrepetible, universal y de contar y cantar sus alabanzas
se encargan estos d¨ªas pr¨¢cticamente todos los medios de comunicaci¨®n del
mundo. Pero hay una cosa que tampoco podemos olvidar y es que Nelson Mandela es humano, profundamente humano. Como todos nosotros, tuvo miedo, rob¨® y minti¨® y
hasta en una ocasi¨®n crey¨® que el ¨²nico camino posible de su lucha eran el
terrorismo y la violencia. Hace veinte a?os, Madiba dijo ¡°no quiero ser
presentado de forma que se omitan los puntos negros de mi vida¡±. Puntos negros
que le engrandecen a¨²n m¨¢s.
Nelson Mandela, de la etnia
Xhosa, no se llamaba Nelson. En realidad, su nombre es Rolihlahla
Dalibhunga Mandela y fue una misionera brit¨¢nica, su profesora, quien lo
rebautiz¨® como Nelson. Nacido el 18 de julio de 1918 en la aldea de Mvezo, gran
parte de su infancia la pas¨® en Qunu. El propio Madiba recordaba siempre con
especial nostalgia los a?os de su ni?ez, la seguridad y amor que le
transmitieron sus cuatro ¡°madres¡±, todas esposas de su padre, las colinas de
roca por las que se deslizaba como si fueran un tobog¨¢n (que el periodista Xavier Aldekoa tuvo ocasi¨®n de visitar) o la tranquilidad del
pastoreo de los animales de su familia. Sin embargo, la muerte de su padre, un
noble local, cuando ¨¦l ten¨ªa nueve a?os provoc¨® un decisivo cambio en su vida.
Desde entonces, el regente de los Tembu, el rey Jongintaba, se hizo cargo de su
educaci¨®n y el ni?o se traslad¨® a vivir al ¡°palacio¡± de Mqhekezweni.
Mandela (izquierda) junto a un amigo de la infancia. / Foto: Nelson Mandela Centre of Memory.
All¨ª todo cambi¨®. Aunque lejos de la
ostentaci¨®n y el lujo de un palacio al estilo occidental, la residencia del
regente tribal era, para el ni?o de nueve a?os que ven¨ªa de las chozas y la
vida pastoral de Qunu, el centro del mundo, el lugar por donde pasaban todas
los asuntos importantes de su comunidad. Lleg¨® con una camisa vieja, un
pantal¨®n recortado atado con una cuerda y un ba¨²l y, desde el principio, se
integr¨® en la familia real, llena de nuevos primos y hermanos. Y Jogintaba se convirti¨® en su nueva figura
paterna. De ¨¦l aprendi¨® el gusto por vestirse de manera elegante y su manera de
tomar decisiones: el rey reun¨ªa a sus consejeros en c¨ªrculo y s¨®lo tomaba la
palabra cuando ya ellos hab¨ªan hablado, tratando de calmar los ¨¢nimos y
alcanzar el consenso. Esto le impresion¨® y le marc¨® para siempre.
Sin embargo, a la edad de 23 a?os, Nelson
Mandela, ya un joven estudiante de Derecho, ¡°traicion¨®¡± a Jogintaba. Enterado de
que su padrino le hab¨ªa arreglado un matrimonio tribal, decidi¨® robarle varias
vacas, venderlas y con ese dinero fugarse a Alexandra, uno de los suburbios de
Johanesburgo. El enfado entre ambos, sin embargo, no dur¨® mucho. A los pocos
a?os ya se hab¨ªan reconciliado. Pero la decisi¨®n de Mandela le llev¨® hasta la
ciudad que se convertir¨ªa en su entrada directa en un nuevo mundo, el mundo del
compromiso pol¨ªtico y de la lucha contra la hegemon¨ªa blanca. Pronto ingres¨® en
el Congreso Nacional Africano y se cas¨® con su primera mujer, Evelyn Ntoko
Mase, una enfermera de 22 a?os con la que tuvo cuatro hijos.
Durante sus a?os de abogado y activista en Johanesburgo.
Empezaba la d¨¦cada de los cuarenta y se
estaban sentando las bases del sistema de segregaci¨®n racial o apartheid de los
sudafricanos blancos contra el resto de pueblos y etnias, un sistema que oficializaba
una pol¨ªtica de discriminaci¨®n que los negros de este pa¨ªs llevaban mucho
tiempo sufriendo. As¨ª que durante casi veinte a?os, el joven abogado despleg¨®
una enorme actividad. Abri¨® un bufete en el que defend¨ªa a los negros de los
abusos del sistema y dentro del Congreso Nacional Africano promovi¨® la creaci¨®n
de la Liga de la Juventud, de la que pronto se convirti¨® en secretario general
y desde la que lanz¨® su ideario, inspirado en la lucha de la minor¨ªa india y
los mineros negros, de resistencia no violenta, desobediencia civil y huelgas
generales. Por todo ello, sufri¨® persecuci¨®n y c¨¢rcel.
Hasta que el 21 de marzo de 1960, la
polic¨ªa sudafricana abri¨® fuego contra una manifestaci¨®n que protestaba contra
el apartheid en Shaperville, una localidad situada en el Transvaal. Murieron 69
personas, muchas de ellas mujeres y ni?os, y unas 180 resultaron heridas. Todos
eran negros. El impacto de la masacre fue enorme. En los d¨ªas siguientes, el
Gobierno racista sudafricano declar¨® el estado de emergencia y detuvo a unas
12.000 personas, entre ellas el propio Mandela, en una ola de represi¨®n que se
extendi¨® por todo el pa¨ªs y que incluy¨® la ilegalizaci¨®n del Congreso Nacional
Africano. Un a?o y tres meses despu¨¦s, convencido de que la lucha armada era la
¨²nica v¨ªa para enfrentarse a la violencia del apartheid, Madiba se pone al
frente del movimiento Umkhoto we Sizwe (Lanza de la Naci¨®n), un grupo terrorista
que lanza ataques contra la Polic¨ªa e instalaciones del Gobierno.
Mandela, en el centro, durante su estancia en Argelia en 1962.
Mandela fue, por tanto, un l¨ªder
guerrillero. Y, como tal, recibi¨® entrenamiento militar en Argelia, pa¨ªs que en
aquellos primeros a?os de las independencias africanas acog¨ªa a todos los
movimientos de liberaci¨®n de los pa¨ªses a¨²n por descolonizar. El grupo armado
que lideraba protagoniz¨® m¨¢s de un centenar de atentados y ataques y hubo
v¨ªctimas mortales. ?Se refer¨ªa a esto Madiba cuando hablaba de puntos negros?
Es posible. Lo cierto es que a?os despu¨¦s decidi¨® renunciar a la violencia. Y,
una vez m¨¢s, lo hizo convencido. Como recuerda con genialidad el periodista y
escritor Richard Stengel, coautor junto al propio Mandela de El largo camino
hacia la libertad, estamos ante una persona muy pragm¨¢tica que no s¨®lo se dio
cuenta de que la lucha armada no era el camino, sino de que con ella nunca
obtendr¨ªa el respaldo de la comunidad internacional. Y rectific¨®, cambi¨® de
rumbo, se adapt¨® a las circunstancias.
Condenado a cadena perpetua por
terrorismo, sabotaje y conspiraci¨®n para derrocar al Gobierno mediante
revoluci¨®n e invasi¨®n de fuerzas extranjeras, Madiba entr¨® en la prisi¨®n de
m¨¢xima seguridad de Robben Island cuando ya estaba casado con su segunda mujer,
Winnie Mandela. Y sufri¨® lo indecible, como lo hubiera hecho cualquier ser
humano, no solo por la falta de libertad y el maltrato, sino por la brutal
separaci¨®n de su familia y seres queridos. S¨®lo se le permit¨ªa ver a su mujer
una vez cada seis meses y todas sus comunicaciones por carta con ella eran
convenientemente filtradas y estaban expuestas a la censura. Se vio obligado a
hacer trabajos forzados, se puso enfermo, tuvo miedo a no volver a salir de
all¨ª nunca m¨¢s. Y ese miedo le hizo m¨¢s fuerte de lo que nunca pudo imaginar.
Prisi¨®n de Robben Island, Mandela junto a Walter Sisulu. / Foto: Getty Images.
Lo ha contado ¨¦l mismo en su
autobiograf¨ªa y en las entrevistas que concedi¨® despu¨¦s, ya como presidente de
Sud¨¢frica o en los ¨²ltimos a?os de su vida. Sus carceleros quisieron doblegar
su esp¨ªritu, pero fue justo al contrario. Su actitud, su fuerza interior, le
salvaron. Pas¨® de ser detestado a ser admirado por quienes le manten¨ªan
encerrado. Despose¨ªdo de todo, le quedaba la dignidad y esa nunca la perdi¨®. Se
rebel¨®, incluso en Robben Island, y se convirti¨® en el l¨ªder de los presos que
le acompa?aron hasta all¨ª. Y, con el tiempo, en el interlocutor necesario con
un Gobierno sudafricano asediado por la comunidad internacional y convencido ya
de que hab¨ªa que poner fin al apartheid. Fue en la c¨¢rcel donde Mandela se
convirti¨® en un s¨ªmbolo.
La ¨²ltima etapa de su vida es la
m¨¢s conocida. La salida de la c¨¢rcel, la negociaci¨®n, las elecciones, su llegada
a la Presidencia de Sud¨¢frica, el Premio Nobel de la Paz, su papel como l¨ªder
africano y mundial, sus mediaciones en conflictos internacionales¡ Superada su
relaci¨®n con la controvertida Winnie Mandela y casado en terceras nupcias con
Gra?a Machel, lleg¨® tambi¨¦n el d¨ªa en que Madiba, un hombre ya anciano, quiso
descansar. De esto hace casi una d¨¦cada. ¡°No me llamen, ya les llamo yo¡±,
asegur¨® p¨²blicamente, ¡°quiero jubilarme de la jubilaci¨®n¡±.
Imagen de Mandela del a?o 2009. / Foto: AFP
De ¨¦l se ha dicho mucho, y mucho m¨¢s oir¨¢n estos d¨ªas, pero de todas
las descripciones que he le¨ªdo sobre ¨¦l una de las que m¨¢s me ha impresionado
la firma el Dalai Lama: ¡°A menudo me encuentro con gente extraordinaria y
especial, l¨ªderes espirituales, realeza, premios Nobel, presidentes, iconos
mundiales. Casi siempre la reputaci¨®n que les precede es algo exagerada, creando
una atm¨®sfera de grandeza a su alrededor. Cada vez que me encuentro con ellos,
descubro que las personas no son tan grandes como su reputaci¨®n. Preparando mi
encuentro con Nelson Mandela, descubr¨ª que su reputaci¨®n era, de hecho, la m¨¢s
grande del mundo. No hay nadie m¨¢s grande que ¨¦l vivo en el Planeta en este
momento. Y solo en su caso encontr¨¦ que la persona era mayor que la
reputaci¨®n¡±. As¨ª es Mandela. Profundamente humano. Cuando quiera que llegue el momento, descanse en paz.
pueden ver mas fotos de lo que esta pasando en Pretoria en mi blog www.sofiaoe.wordpress.com
Por cierto, hermoso el art¨ªculo
Otra alma grande como Ghandy.
alla a fines de los 70`s y principio de los 80 asisti a varias ?demos? pidiendo la libertad de Mandela,marchando hacia la embajada de sudafrica en Londres, eramos muy pocos...,despues vino la gran campa?a de enviar postales a Mandela , pensabamos que se enviarian muy pocas, estabamos profundamente equivocados, recibio cientos de miles de postales, por primera vez el regimen criminal de pretoria tomo en serio las protestas mundiales, que cada dia eran mas y mas. La sra Tatcher lo llamaba un terrorista y despues se acredito ella con su liberacion !!! diciendo que al levantar las sanciones economicas a pretoria eso ayudaria a la liberacion de Mandela (!) hoy como ayer, el mundo al rev¨¦s..Gracias Mandela por ser esa peque?a luz de esperanza que todo no esta perdido y que vale la pena luchar por lo que nos pertenece desde que nacemos, ser libres.
Gracias Mandela.
Llamar a Mandela "terrorista", como se hace en este art¨ªculo. Decir que es de eso de lo que se puede arrepentir el propio Madiba, me parece terrible. Cualquiera que conozca la historia de Mandela, que haya leido su autobiograf¨ªa al menos, sabr¨¢ que los motivos para dar el paso a la lucha armada fueron valorados y meditados cuidadosamente por ¨¦l y sus compa?eros/as. ?l nunca se consider¨® terrorista. Yo nunca lo considerar¨ªa terrorista. Bien o mal, estemos o no de acuerdo con el recurso a la violencia, hay que tomar en cuenta las condiciones extremas en las que se tom¨® esa decisi¨®n. Mandela fue quiz¨¢s un guerrillero, un luchador, un l¨ªder de fuerzas armadas revolucionarias...pero "terrorista" ?? as¨ª lo llamaba el aparheid, de eso se le acus¨® y de eso se defendi¨® siempre Madiba!En resumen, tras leer este art¨ªculo veo dos posibles conclusiones. O bien el autor apoya a todos aquellos (aparheid, pero tambi¨¦n los tories en GB, los republcianos en EEUU, etc.) que lo consideraban un "peligro", un terrorista. O bien es que no tienen ni idea de escribir y han perdido toda la compostura period¨ªsitca (que se basa, sobre todo, en un uso cuidadoso y responsable del lenguaje). Vaya, que da verg¨¹enza leer este art¨ªculo.
buenas tardes.lastima que no hay calle en la capital marroqui llevando el nombre de nelson mandela
Para la escandalizada Yaiza: Claro que fue un terrorista, se ajusta perfectamente a la definici¨®n. Lo que ¨¦l diga, y a¨²n m¨¢s lo que t¨² digas, tiene poca importancia a estos efectos. No pretendamos crear un hombre santo, un personaje imposible. ?l hizo bien muchas cosas, otras no tanto. Thatcher ten¨ªa raz¨®n, como en casi todo.
Seguro que eres de las que piensa que Otegi es el escucesor de Mandela, ja, ja. La pena es que el primer no se va a pudrir 27 a?os en prisi¨®n, por desgracia.
Ah, ?viva Rhodesia!
Un peque?o recordatorio de aquellos que tuvieron la inmensa fuerza de ser moderados para perdonar y no alimentar lo que Luther King llam¨® "la cadena del odio" De ellos debemos tomar ejemplo:http://www.venimosdelejos.com/2012/02/el-perdon.html
@Ian Smith... "Thatcher ten¨ªa raz¨®n, como en casi todo" ... jajajaja, otro facha hablando de su heroina, jajajaja.
Para Ian Smith: En lo ¨²nico que llev¨® Margaret Thatcher raz¨®n, y lo ¨²nico que hizo bien en su vida es morirse. Y hasta para eso tard¨® lo suyo.
Y quienes hicieron la Revolucion Francesa eran terroristas? los que lucharon contra el yugo de Roma eran terroristas? la resistencia francesa eran terroristas? los esclavos negros en EEUU fueron terroristas? y asi ad infinitum....todo el k lucha contra el poder establecido es un terrorista?? no cometen los gov occidentales actos de terrorismo conocidos como da?os colaterales? yo no apoyo ni esos da?os colaterales ni el asesinato de inocentes por grupos anti poder establecido... El lenguaje es hipocrita en ambas direcciones....Mandela es un hombre que rectific¨® e hizo de su pais un lugar un poco mejor....Otegui? comparacion exagerada...pero la historia tambien debera reconocerle su influencia en el cambio de rumbo actual...a pesar de la represion del poder dominante...k vive de votos mientras alienta odios
Amigos, me abruma su ingenio, su afilada prosa, etc¨¦tera. Las gracietas de "El Intermedio" est¨¢n haciendo mucho da?o, seg¨²n veo.
S¨ª, muri¨®... despu¨¦s de haber ganado tres elecciones consecutivas (y en 1992 volvieron a ganar los "tories"), derrotado a la dictadura argentina, reflotado la econom¨ªa brit¨¢nica, coadyuvado a la ca¨ªda del comunismo, vencido a los sindicatos, obligado al laborismo a modernizarse, etc¨¦tera. "Not bad, not bad at all". Los resentidos y perdedores han tenido que celebrar su muerte... En vida s¨®lo pudieron lamentarse de sus propios fracasos y huir del debate con la Dama de Hierro.
S¨®lo achaco a Thatcher el no haber apoyado a Rhodesia en su lucha contra el terrorismo marxista, pero la P¨¦rfida Albi¨®n ten¨ªa que ser ingrata con su antigua colonia.
este hombre es que merecia una homenagen en Espa?a y no la dictadora da inglesa como quier la botella
Revoluci¨®n Francesa: no terrorismo, Terror s¨ª. Aprenda a distinguir.
Resistencia francesa: Si la hubo, fue contra un invasor extranjero y durante una situaci¨®n de guerra. No terrorismo.
Esclavos negros: ?? Lo de "Django Unchained" no se puede considerar terrorismo, s¨®lo una venganza personal. La esclavitud fue abolida por un presidente republicano, con oposici¨®n de los dem¨®cratas. Cost¨® una guerra, pero nada de terrorismo.
Terrorismo: Sembrar el terror entre la poblaci¨®n con fines pol¨ªticos, matando inocentes a prop¨®sito. Los "gudaris" vascos, por ejemplo, pegando tiros por la espalda, poniendo coches bombas en hipermercados, secuestrando a empresarios de ¨¦xito... Eso que ahora se llaman vulneraciones de derechos por ciertos p¨ªos se?ores y pol¨ªticos racistas, por no decir cr¨ªmenes aberrantes, pura y simplemente.
Gracias a gobiernos occidentales, por lo dem¨¢s, puede usted hoy escribir tantos disparates libremente. No crea que se lo debe a otras fuerzas.
Por tanto, la cuesti¨®n est¨¢ bastante acotada, al contrario de lo que usted cree.
A Otegi s¨®lo espero que se le reconozcan unos cuantos a?os m¨¢s de c¨¢rcel. Igual que a algunos se le reconocen m¨¦ritos, a otros se les reconoce una merecida estancia entre rejas.
Desde Quito, en el Centro del Mundo, y muy lejos de Pretoria: Un Gracias al Gran Nelson Mandela.
leyendo con mucho inter¨¦s este art¨ªculo sobre Madiba me deja la alegr¨ªa de saber de que su importancia y ejemplo de ser humano va m¨¢s all¨¢ de lo predecible o alcanzable por millones de seres humanos. Torpe, ignorante y servil me resulto el calificativo de Terrorista adjudicado por el escritor a una organizaci¨®n guerrillera que lucho contra un sistema establecido que se mantuvo en el poder a base de una pol¨ªtica racista y terrorista llamada el Apartheid. Quiz¨¢ tu rectificaci¨®n de tal calificativo te permita ganarte una disculpa de los lectores.
Gracias Lola Huete por tu art¨ªculo sobre Nelson Mandela.Gracias Nelson Mandela por tu ejemplo y generosidad de vida. Aleluya Nelson Mandela!
Y a m¨ª que me parece que sus matices, y sus sombras, y sus contradicciones lo hacen m¨¢s grande (si cabe) todav¨ªa.
Y que ¨¦l aceptara sus errrores, marca la diferencia de talla entre su persona y la de los que os indignais porque que se citen, o porque se emplee una palabra, para definir alguno de sus actos.
La diferencia de talla dentre uno de los gigantes cuyos hombros nos sostienen, y los enanos que ni alzandose sobre esos hombros consiguen ver m¨¢s all¨¢.
La l¨¢stima, la inmensa l¨¢stima, es que el gigante se nos muere, y los enanos no han aprendido nada ¨¦l, y su legado, me temo se perder¨¢.
Parece que supo defender los derechos humanos desde el compromiso personal, cuando tuvo la oportunidad de hacer mutis y vivir c¨®modamente.Es un m¨¦rito al valor en defensa de los derechos civiles que se le tendr¨ªa que reconocer en vida.P¨²blicamente como ejemplo y gu¨ªa para las gentes, las instituciones y los gobiernos.
Nelson Mandela fue y ser¨¢ siendo uno de los m¨¢ximos personajes de la Humanidad. Su contribuci¨®n fue pelear contra un flagelo que a¨²n en un siglo XXI seguimos sufri¨¦ndolo. Madiba es un h¨¦roe que peleo sin duda alguna contra el Apartheid, el cual era apoyado por pa¨ªses Occidentales como EE.UU, esos mismos que hoy supuestamente le brindan homenaje. Hoy d¨ªa muchos lo quieren y recuerdan, pero precedente a su muerte era mal visto por muchos. MADIBA siempre ser¨¢ MADIBA y nunca podr¨¢ borrarse su legado. VIVA MANDELA. VIVA ?FRICA.
pueden ver mas fotos de lo que esta pasando en Pretoria en mi blog www.sofiaoe.wordpress.com
Por cierto, hermoso el art¨ªculo
Otra alma grande como Ghandy.
alla a fines de los 70`s y principio de los 80 asisti a varias ?demos? pidiendo la libertad de Mandela,marchando hacia la embajada de sudafrica en Londres, eramos muy pocos...,despues vino la gran campa?a de enviar postales a Mandela , pensabamos que se enviarian muy pocas, estabamos profundamente equivocados, recibio cientos de miles de postales, por primera vez el regimen criminal de pretoria tomo en serio las protestas mundiales, que cada dia eran mas y mas. La sra Tatcher lo llamaba un terrorista y despues se acredito ella con su liberacion !!! diciendo que al levantar las sanciones economicas a pretoria eso ayudaria a la liberacion de Mandela (!) hoy como ayer, el mundo al rev¨¦s..Gracias Mandela por ser esa peque?a luz de esperanza que todo no esta perdido y que vale la pena luchar por lo que nos pertenece desde que nacemos, ser libres.
Gracias Mandela.
Llamar a Mandela "terrorista", como se hace en este art¨ªculo. Decir que es de eso de lo que se puede arrepentir el propio Madiba, me parece terrible. Cualquiera que conozca la historia de Mandela, que haya leido su autobiograf¨ªa al menos, sabr¨¢ que los motivos para dar el paso a la lucha armada fueron valorados y meditados cuidadosamente por ¨¦l y sus compa?eros/as. ?l nunca se consider¨® terrorista. Yo nunca lo considerar¨ªa terrorista. Bien o mal, estemos o no de acuerdo con el recurso a la violencia, hay que tomar en cuenta las condiciones extremas en las que se tom¨® esa decisi¨®n. Mandela fue quiz¨¢s un guerrillero, un luchador, un l¨ªder de fuerzas armadas revolucionarias...pero "terrorista" ?? as¨ª lo llamaba el aparheid, de eso se le acus¨® y de eso se defendi¨® siempre Madiba!En resumen, tras leer este art¨ªculo veo dos posibles conclusiones. O bien el autor apoya a todos aquellos (aparheid, pero tambi¨¦n los tories en GB, los republcianos en EEUU, etc.) que lo consideraban un "peligro", un terrorista. O bien es que no tienen ni idea de escribir y han perdido toda la compostura period¨ªsitca (que se basa, sobre todo, en un uso cuidadoso y responsable del lenguaje). Vaya, que da verg¨¹enza leer este art¨ªculo.
buenas tardes.lastima que no hay calle en la capital marroqui llevando el nombre de nelson mandela
Para la escandalizada Yaiza: Claro que fue un terrorista, se ajusta perfectamente a la definici¨®n. Lo que ¨¦l diga, y a¨²n m¨¢s lo que t¨² digas, tiene poca importancia a estos efectos. No pretendamos crear un hombre santo, un personaje imposible. ?l hizo bien muchas cosas, otras no tanto. Thatcher ten¨ªa raz¨®n, como en casi todo.
Seguro que eres de las que piensa que Otegi es el escucesor de Mandela, ja, ja. La pena es que el primer no se va a pudrir 27 a?os en prisi¨®n, por desgracia.
Ah, ?viva Rhodesia!
Un peque?o recordatorio de aquellos que tuvieron la inmensa fuerza de ser moderados para perdonar y no alimentar lo que Luther King llam¨® "la cadena del odio" De ellos debemos tomar ejemplo:http://www.venimosdelejos.com/2012/02/el-perdon.html
@Ian Smith... "Thatcher ten¨ªa raz¨®n, como en casi todo" ... jajajaja, otro facha hablando de su heroina, jajajaja.
Para Ian Smith: En lo ¨²nico que llev¨® Margaret Thatcher raz¨®n, y lo ¨²nico que hizo bien en su vida es morirse. Y hasta para eso tard¨® lo suyo.
Y quienes hicieron la Revolucion Francesa eran terroristas? los que lucharon contra el yugo de Roma eran terroristas? la resistencia francesa eran terroristas? los esclavos negros en EEUU fueron terroristas? y asi ad infinitum....todo el k lucha contra el poder establecido es un terrorista?? no cometen los gov occidentales actos de terrorismo conocidos como da?os colaterales? yo no apoyo ni esos da?os colaterales ni el asesinato de inocentes por grupos anti poder establecido... El lenguaje es hipocrita en ambas direcciones....Mandela es un hombre que rectific¨® e hizo de su pais un lugar un poco mejor....Otegui? comparacion exagerada...pero la historia tambien debera reconocerle su influencia en el cambio de rumbo actual...a pesar de la represion del poder dominante...k vive de votos mientras alienta odios
Amigos, me abruma su ingenio, su afilada prosa, etc¨¦tera. Las gracietas de "El Intermedio" est¨¢n haciendo mucho da?o, seg¨²n veo.
S¨ª, muri¨®... despu¨¦s de haber ganado tres elecciones consecutivas (y en 1992 volvieron a ganar los "tories"), derrotado a la dictadura argentina, reflotado la econom¨ªa brit¨¢nica, coadyuvado a la ca¨ªda del comunismo, vencido a los sindicatos, obligado al laborismo a modernizarse, etc¨¦tera. "Not bad, not bad at all". Los resentidos y perdedores han tenido que celebrar su muerte... En vida s¨®lo pudieron lamentarse de sus propios fracasos y huir del debate con la Dama de Hierro.
S¨®lo achaco a Thatcher el no haber apoyado a Rhodesia en su lucha contra el terrorismo marxista, pero la P¨¦rfida Albi¨®n ten¨ªa que ser ingrata con su antigua colonia.
este hombre es que merecia una homenagen en Espa?a y no la dictadora da inglesa como quier la botella
Revoluci¨®n Francesa: no terrorismo, Terror s¨ª. Aprenda a distinguir.
Resistencia francesa: Si la hubo, fue contra un invasor extranjero y durante una situaci¨®n de guerra. No terrorismo.
Esclavos negros: ?? Lo de "Django Unchained" no se puede considerar terrorismo, s¨®lo una venganza personal. La esclavitud fue abolida por un presidente republicano, con oposici¨®n de los dem¨®cratas. Cost¨® una guerra, pero nada de terrorismo.
Terrorismo: Sembrar el terror entre la poblaci¨®n con fines pol¨ªticos, matando inocentes a prop¨®sito. Los "gudaris" vascos, por ejemplo, pegando tiros por la espalda, poniendo coches bombas en hipermercados, secuestrando a empresarios de ¨¦xito... Eso que ahora se llaman vulneraciones de derechos por ciertos p¨ªos se?ores y pol¨ªticos racistas, por no decir cr¨ªmenes aberrantes, pura y simplemente.
Gracias a gobiernos occidentales, por lo dem¨¢s, puede usted hoy escribir tantos disparates libremente. No crea que se lo debe a otras fuerzas.
Por tanto, la cuesti¨®n est¨¢ bastante acotada, al contrario de lo que usted cree.
A Otegi s¨®lo espero que se le reconozcan unos cuantos a?os m¨¢s de c¨¢rcel. Igual que a algunos se le reconocen m¨¦ritos, a otros se les reconoce una merecida estancia entre rejas.
Desde Quito, en el Centro del Mundo, y muy lejos de Pretoria: Un Gracias al Gran Nelson Mandela.
leyendo con mucho inter¨¦s este art¨ªculo sobre Madiba me deja la alegr¨ªa de saber de que su importancia y ejemplo de ser humano va m¨¢s all¨¢ de lo predecible o alcanzable por millones de seres humanos. Torpe, ignorante y servil me resulto el calificativo de Terrorista adjudicado por el escritor a una organizaci¨®n guerrillera que lucho contra un sistema establecido que se mantuvo en el poder a base de una pol¨ªtica racista y terrorista llamada el Apartheid. Quiz¨¢ tu rectificaci¨®n de tal calificativo te permita ganarte una disculpa de los lectores.
Gracias Lola Huete por tu art¨ªculo sobre Nelson Mandela.Gracias Nelson Mandela por tu ejemplo y generosidad de vida. Aleluya Nelson Mandela!
Y a m¨ª que me parece que sus matices, y sus sombras, y sus contradicciones lo hacen m¨¢s grande (si cabe) todav¨ªa.
Y que ¨¦l aceptara sus errrores, marca la diferencia de talla entre su persona y la de los que os indignais porque que se citen, o porque se emplee una palabra, para definir alguno de sus actos.
La diferencia de talla dentre uno de los gigantes cuyos hombros nos sostienen, y los enanos que ni alzandose sobre esos hombros consiguen ver m¨¢s all¨¢.
La l¨¢stima, la inmensa l¨¢stima, es que el gigante se nos muere, y los enanos no han aprendido nada ¨¦l, y su legado, me temo se perder¨¢.
Parece que supo defender los derechos humanos desde el compromiso personal, cuando tuvo la oportunidad de hacer mutis y vivir c¨®modamente.Es un m¨¦rito al valor en defensa de los derechos civiles que se le tendr¨ªa que reconocer en vida.P¨²blicamente como ejemplo y gu¨ªa para las gentes, las instituciones y los gobiernos.
Nelson Mandela fue y ser¨¢ siendo uno de los m¨¢ximos personajes de la Humanidad. Su contribuci¨®n fue pelear contra un flagelo que a¨²n en un siglo XXI seguimos sufri¨¦ndolo. Madiba es un h¨¦roe que peleo sin duda alguna contra el Apartheid, el cual era apoyado por pa¨ªses Occidentales como EE.UU, esos mismos que hoy supuestamente le brindan homenaje. Hoy d¨ªa muchos lo quieren y recuerdan, pero precedente a su muerte era mal visto por muchos. MADIBA siempre ser¨¢ MADIBA y nunca podr¨¢ borrarse su legado. VIVA MANDELA. VIVA ?FRICA.
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Colaborador de EL PA?S en ?frica occidental, reside en Senegal desde 2011. Ha cubierto la guerra de Mal¨ª, las epidemias de ¨¦bola en Guinea, Sierra Leona, Liberia y Congo, el terrorismo en el Sahel y las rutas migratorias africanas. Sus ¨²ltimos libros son 'Los Invisibles de Kolda' (Pen¨ªnsula, 2009) y 'El r¨ªo que desaf¨ªa al desierto' (Azulia, 2019).