Entre estados fallidos y ¨¦tica putrefacta
Este texto es de nuestro colaborador habitual Alberto Eisman.
?C¨®mo se define un estado fallido? Los analistas que preparan este informe lo calculan aplicando 12 criterios, entre ellos presi¨®n demogr¨¢fica, refugiados, agravios a grupos, fugas de personas, desigualdad en el desarrollo, deslegitimaci¨®n del estado, servicios p¨²blicos y otros.
Este a?o, quien se lleva la palma en t¨¦rminos de ¡°mala gobernanza¡± son Somalia, R.D. Congo, Sudan, Chad y Zimbabue por mencionar algunos. No es extra?o o¨ªr el clamor de pa¨ªses y analistas que consideran informes as¨ª inexactos y en algunos casos humillantes, pues aplican unos baremos cuando menos pol¨¦micos al reflejar un concepto de mala gobernanza demasiado vago, dejando que la apariencia de ¡°normalidad estructural¡± pueda ocultar factores negativos insospechados.
Pongamos por ejemplo Somalia, el farolillo rojo del caos estatal. Es cierto que el estado en s¨ª es d¨¦bil y vulnerable y las estructuras administrativas son casi inexistentes, pero ?saben ustedes que los somal¨ªes son en algunos aspectos uno de los grupos humanos m¨¢s organizados que existen? Desde hace a?os tienen organizado un sistema de transferencias financieras tan sofisticado que har¨ªa palidecer a las grandes compa?¨ªas del ramo. Un somal¨ª en los Estados Unidos puede hacer una transferencia de varios miles de d¨®lares dentro de ?frica en cuesti¨®n de segundos y s¨®lo por medio de una llamada telef¨®nica, siguiendo un sistema basado en la confianza del cliente a trav¨¦s de una red de mensajes de textos y llamadas de m¨®viles. El estado es un desastre, pero la sociedad civil se ve que se las arregla para organizarse y ofrecer servicios.
Por otro lado ?qui¨¦nes son los estados no-fallidos? ?qu¨¦ pasa con un pa¨ªs aparentemente democr¨¢tico pero que no tiene reparo alguno en violar la intimidad, la libertad y la privacidad de sus individuos? Barriendo para casa, me pregunto si Espa?a es mejor que Uganda o Marruecos... Tomen por ejemplo dos titulares: ¡°La Junta [de Andaluc¨ªa] recurre la imputaci¨®n de sus altos cargos por el ERE¡± y ¡°El PP se opone a la comparecencia de Rajoy sobre B¨¢rcenas en el congreso¡±. No me digan estas dos situaciones ¨C el eterno ying y yang de la desverg¨¹enza ib¨¦rica ¨C no claman al cielo.
El problema no es la solidez de una estructura nacional, porque al fin y al cabo el modelo de estado moderno es el producto de un complejo proceso humano que en muchos casos ha tardado siglos en completarse ¡ ?y por qu¨¦ iban a ser Zimbabue o Somalia una excepci¨®n a esa regla? ?no podr¨ªa ser que algunos de estos estados fallidos lo sean precisamente porque interesa a los intereses geoestrat¨¦gidos de nuestro mundo que no avancen en su desarrollo estructural? El r¨ªo revuelto del Congo (R.D.) es literalmente un chollo para quienes negocian con el colt¨¢n, los diamantes u otros minerales. Conviene m¨¢s que el estado no controle, domine o ¨C ?Dios nos libre! ¨C fiscalize lo que pasa dentro de sus fronteras.
instalada con apariencia de legalidad y que est¨¢ alimentada por la desidia, el desencanto o la resignaci¨®n de aquellos que ¨C consciente o inconscientemente ¨C votaron a un hatajo de chorizos. Qu¨¦ quieren que les diga... hay momentos en los que preferir¨ªa estar en Somalia.
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