Hasta que el notario os separe

Frente a los que se preguntan para qu¨¦ sirve un notario, dado que hay pa¨ªses que funcionan bien sin ellos, el Gobierno proyecta adjudicarles nuevas competencias. Dice el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, que con esas nuevas tareas no se trata de compensar las p¨¦rdidas del sector, una vez hundida la burbuja inmobiliaria. Pero lo cierto es que otorgarles la potestad de casar, descasar y realizar tr¨¢mites ahora reservados a los juzgados responde tambi¨¦n a una demanda de los propios notarios.

Sea como fuere, notarios y registradores tendr¨¢n dentro de unos meses nuevos cometidos que, de paso, liberar¨¢n un tanto a los jueces, aut¨¦ntica finalidad oficial de esta novedad que entrar¨¢ en vigor cuando el Parlamento apruebe la Ley de Jurisdicci¨®n Voluntaria a la que el Consejo de Ministros dio luz verde el pasado jueves.

Puede que algunos de los tr¨¢mites que en el pr¨®ximo futuro puedan solventar los notarios y registradores les supongan una inyecci¨®n extra de ingresos, como los expedientes de car¨¢cter sucesorio, las subastas voluntarias o los nombramientos de auditores para el examen de cuentas de las empresas...

Pero las bodas son un negocio en claro declive, como lo demuestra el hecho de que uno de cada tres nacidos en Espa?a hoy en d¨ªa lo haga ya fuera del matrimonio; y ello a pesar de que casarse por lo civil a veces no cuesta un duro, a diferencia de lo que es habitual cuando se pide que la ceremonia la oficie un sacerdote.

Los contrayentes podr¨¢n elegir: el Ayuntamiento, el cura o el notario. El Gobierno ten¨ªa la opci¨®n de apostar por otra f¨®rmula de despejar los juzgados sin da?ar el bolsillo de los contribuyentes, pero ya se sabe que no es f¨¢cil que sus decisiones vayan en otra l¨ªnea. Los notarios no trabajan gratis y cobrar¨¢n 95 euros por boda. No hay que descartar que algunos ofrezcan extras con los que aumentar sus emolumentos y, de paso, dar mayor brillo al evento, como habilitar salones especiales o desplazarse hasta donde los novios deseen. Lo novedoso ser¨¢ por tanto verles competir con curas y concejales por celebrar un rito en el que muchos tiran de verdad la casa por la ventana.