?Vete a tu pa¨ªs!
En principio, el derecho a la ciudadan¨ªa depende de la nacionalidad que se tenga, por nacimiento o mediante un procedimiento normativo que tenga cada pa¨ªs. Para el caso de Espa?a, se adquiere por residencia legal permanente durante diez a?os o por acuerdos bilaterales entre estados, que es el caso de varios pa¨ªses de Am¨¦rica Latina.
En el contexto de las migraciones, para quienes hemos tenido que traspasar fronteras, no solo geogr¨¢ficas sino tambi¨¦n pol¨ªticas, culturales y sociales, vamos construyendo un nuevo tipo de ciudadan¨ªa que no depende solo del reconocimiento jur¨ªdico. Traspasar fronteras no quiere decir que deje mi identidad, mis derechos y deberes en el pa¨ªs que me obliga a salir (ya sea por razones econ¨®micas o pol¨ªticas). Yo voy con mi ciudadan¨ªa a donde establezco mi residencia permanente y por eso me la vivo.
Me encantan los parques de mi barrio y un d¨ªa paseando observe una escena desagradable. Un grupo de dos ni?os y una ni?a jugaban, uno de ellos dio quejas al hombre que estaba acompa?¨¢ndoles, quien dio un trato a la ni?a de una manera muy brusca y yo ah¨ª. Me quede mir¨¢ndole y le dije "?Qu¨¦ hace? ?No la maltrate!" Al escuchar mi voz me dijo: "?Vete a tu pa¨ªs! Ven¨ªs a quitarnos nuestros trabajos". Yo no entre a responderle porque considero que con personas que viven en un mundo peque?ito, no vale la pena discutir, y menos con un energ¨²meno.
La mayor¨ªa de personas migrantes que hoy vivimos en Espa?a llevamos a?os de residencia y es aqu¨ª donde hemos instalado nuestro hogar, trabajo, consumo... Pagamos impuestos indirectos y directos, disfrutamos y cuidamos el espacio p¨²blico, interactuamos con la vecindad, y resistimos al impacto de la crisis multidimensional en la que estamos. Aqu¨ª re-construimos un nuevo hogar, nuevas pertenencias y lazos de afecto en el d¨ªa a d¨ªa.
Nos indignan las pol¨ªticas y los discursos que siempre est¨¢n marcando la diferencia y las pol¨ªticas migratorias, discriminan, convirtiendo el ejercicio de la ciudadan¨ªa en una carrera de obst¨¢culos, que vulneran el derecho a la igualdad. Cuidado con esos discursosque buscan la estigmatizaci¨®n y la criminalizaci¨®n de las personas inmigrantes, recuerden quienes han realizado los trabajos que no gustaban a los nacionales de origen, acrecentando las riquezas del pa¨ªs. Valoren quienes han cuidado a sus hijos, hijas y abuelas, abuelos y han asumido en mucha ocasiones una ubicaci¨®n laboral precarizada. No olviden que quienes hemos tenido la oportunidad de convivir el d¨ªa a d¨ªa desde la interculturalidad, nos hemos enriquecido mutuamente. Desde la perspectiva de derechos humanos, yo me creo mi ciudadan¨ªa y por eso la ejerzo en el lugar donde vivo, independientemente que se me reconozca. Las grandes ciudades, como Madrid por ejemplo, se caracterizan por su diversidad y movilidad humana, Saskia Sassenexpresa que la ciudadan¨ªa debe asentarse en la condici¨®n de residencia. D¨¢ndole importancia a la comunidad de vecinos, la ciudadan¨ªa municipal, que nos permite acercarnos al otro, la otra para comprender y experimentar la convivencia diaria .
Cuando hemos traspasado las fronteras impuestas, hemos logrado reconstruir nuestros proyectos de vida, hemos desplegado nuestras capacidades y recreado nuestras vidas aportando en los espacios cercanos desde lo personal y lo comunitario, tejiendo redes que por nuestra condici¨®n de migrantes se trasnacionalizan y nos permiten ejercer la ciudadan¨ªa en este pa¨ªs con una nueva mirada, una ciudadan¨ªa universal con-viviendo en Espa?a. Nos duele que con las pol¨ªticas de austeridad se recorten derechos e implementen leyes discriminatorias, afectando con especial virulencia a las mujeres inmigrantes y sus familias.
Nos duele que con las pol¨ªticas de austeridad se recorten derechos e implementen leyes discriminatorias, afectando con especial virulencia a las mujeres inmigrantes y sus familias.
Les invitamos a ver el comunicado?SER MIGRANTE ES UN DERECHO LA HOSPITALIDAD, UN DEBER!
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