Mujeres latinoamericanas: m¨¢s cerca de la presidencia que del rectorado

La espera en el aeropuerto se hace larga y tediosa.

Voy a Chile, donde dentro de algunas horas, dos mujeres ser¨¢n retratadas en una imagen hist¨®rica: una le colocar¨¢ la banda presidencial a la otra. La primera, Isabel Allende, futura presidenta del Senado, hija de Salvador Allende, emblema de la democracia y del socialismo en Latinoam¨¦rica. La segunda, Michelle Bachelet, elegida por segunda vez presidenta de todos los chilenos y chilenas. Dos mujeres extraordinarias, entre otras cosas, por su compromiso y su lucha por la igualdad de g¨¦nero en el continente. Pienso en los enormes desaf¨ªos que se abren para el pa¨ªs y en la importancia que tendr¨¢ para la regi¨®n la posibilidad de que el nuevo gobierno lleve a cabo efectivamente algunas de las reformas y transformaciones sociales, econ¨®micas y educativas que se esperan de ¨¦l. En Chile, las desigualdades se han multiplicado y ser¨¢n esas dos mujeres, quiz¨¢s, las protagonistas de un cambio democr¨¢tico necesario e imprescindible. En pocas horas, los destinos del Cono Sur estar¨¢n, en buena medida, en manos de mujeres que han hecho de la pol¨ªtica una herramienta de construcci¨®n efectiva de la ciudadan¨ªa y la justicia social: Dilma, en Brasil; Cristina, en Argentina; y, qui¨¦n sabe, Constanza Moreira, en Uruguay, precandidata a suceder a Jos¨¦ Mujica en la presidencia de la rep¨²blica.

Doy vueltas y m¨¢s vueltas, tratando de distraerme, mientras espero el anuncio providencial de mi vuelo. Me detengo en el kiosco de diarios. Probablemente influenciado por mi alegr¨ªa feminista, observo la enorme presencia en los exhibidores de revistas dedicadas a temas ¡°de mujeres¡±. No suelo leer revistas femeninas, aunque me decido a comprar alguna que me distraiga de la monoton¨ªa aeroportuaria. La elecci¨®n es dif¨ªcil. Ohlal¨¢ promete ense?arle a las mujeres a amarse a s¨ª mismas. Tambi¨¦n, trae secretos sobre sexo y c¨®mo regalarle a ¨¦l ¡°un mensaje quenchi¡±. Cosmopolitan exige: ¡°Trendizate¡±, acci¨®n cuyo significado desconozco, pero supongo que refiere a la necesidad de ponerse al ritmo de las innovaciones y de la moda. La hojeo, pero nada dice sobre la tendencia a que las mujeres se involucren en la pol¨ªtica, sino la exigencia de que renueven su vestuario y apariencia. Sugiere dietas y aspira a interesar con una nota sobre ¡°6 escenas del cine ultraer¨®ticas para recrear con tu chico¡±. Intuyo que debe ser una revista para mujeres j¨®venes. Como tambi¨¦n debe serlo la hist¨®rica, Para Ti, donde se promete la realizaci¨®n del nirv¨¢nico deseo de ¡°adelgazar 10 kilos en 6 meses¡±, aunque, por las fotos, las candidatas deben ser mujeres con menos de 20 a?os y al borde de la anorexia. Adem¨¢s, cuenta qui¨¦nes fueron las ¨²ltimas mujeres ¡°que salieron del placard¡± (se refiere a mujeres famosas que asumieron la homosexualidad, volvi¨¦ndose as¨ª m¨¢s famosas).

El zapping bibliogr¨¢fico me deja inmensamente frustrado. Nada parece interesarme, hasta que me tropiezo con Sophia, una revista que ¡°despliega el alma¡±, con temas de espiritualidad, g¨¦nero, moda y cocina, aunque no necesariamente en ese orden. Observo que la denominaci¨®n ¡°g¨¦nero¡± es m¨¢s amplia en este caso que el concepto de ¡°tela o tejido¡±, al cual remite en las otras publicaciones. Su ¨²ltimo n¨²mero posee un dossier sobre ¡°?Qu¨¦ es el feminismo hoy?¡±. Decido comprarla.

Ya en el avi¨®n, la leo ansioso. La nota principal es simple y anal¨ªticamente confusa. Tiene el m¨¦rito, digamos, de tratar de mostrar que el feminismo no es una opci¨®n reducida a ¡°machonas belicosas y poco femeninas¡±. Sin embargo, sin una ¨²nica menci¨®n a los movimientos de mujeres y a las luchas emancipatorias producidas y promovidas desde los diversos feminismos existentes, sostiene que ser feminista supone ¡°mirar hacia adentro y darnos cuenta que somos esp¨ªritus libres, que no tenemos que adaptarnos a situaciones que nos incomodan, sino entender que dentro de nosotras hay una necesidad de autonom¨ªa que clama por salir¡±. En suma, en la perspectiva de la revista Sophia, el feminismo es un movimiento espiritual que afirma que la mujer es tambi¨¦n un ser humano. Felizmente, indica que muchas mujeres son feministas, pero todav¨ªa no se han dado cuenta.

Superada la frustraci¨®n, trato de encontrarle el lado positivo a la nota. Me alegro con una muy buena cr¨®nica de la periodista argentina Valeria Sampedro. Leo y releo, pero cada vez me parece m¨¢s cuestionable el enfoque. ?Qu¨¦ desperdicio! Una vez que se aborda el tema del feminismo en una revista de actualidad dedicada a mujeres, se lo reduce a una caricatura despolitizada y trivial. Sin embargo, descubro que lo que m¨¢s me molesta no es eso. Observo que las autoras han consultado diversas especialistas sobre el tema: mujeres que dentro o fuera de la Argentina han reflexionado o investigado sobre el asunto, todas ellas muy competentes e informadas. Entre tanto, me llama la atenci¨®n que ninguna de ellas sea presentada como profesora o investigadora de una universidad p¨²blica nacional, espacio en el que ejercen su profesi¨®n muchas de las intelectuales que m¨¢s han estudiado el asunto, que escriben y publican excelentes trabajos sobre el tema, destacando a la investigaci¨®n sobre desigualdades de g¨¦nero como uno de los campos m¨¢s reconocidos internacionalmente del pensamiento social argentino. Un d¨¦ficit que, por cierto, no debe ser atribuido s¨®lo a una revista que superficialmente examina el feminismo y sus potencialidades.

Las mujeres en la academia, ?qui¨¦n las escucha?

En efecto, un relevamiento que he realizado recientemente, permite observar que, de 300 notas period¨ªsticas sobre diversos temas de actualidad que utilizan como fuente a profesionales del campo de la investigaci¨®n acad¨¦mica, menos del 15% de los consultados son mujeres.

Hoy, en muchos pa¨ªses de Am¨¦rica Latina, las mujeres han superado a los hombres en la matr¨ªcula universitaria; una expansi¨®n vertiginosa que se produjo durante las ¨²ltimas d¨¦cadas y ha sido analizada como una tendencia creciente a la feminizaci¨®n de la educaci¨®n superior. Asimismo, el n¨²mero de investigadoras cient¨ªficas ha crecido exponencialmente, del mismo modo que la publicaci¨®n de art¨ªculos cient¨ªficos escritos por mujeres y el desarrollo de programas de investigaci¨®n nacionales e internacionales coordinados por profesionales del sexo femenino. Deber¨ªa, sin lugar a dudas, aumentar a¨²n m¨¢s el n¨²mero de mujeres investigadoras, pero existen hoy excelentes y muy destacadas economistas, antrop¨®logas, soci¨®logas, polit¨®logas, especialistas en relaciones internacionales o laborales, en estudios culturales, jur¨ªdicos, urbanos o ecol¨®gicos, adem¨¢s de investigadoras de gran reconocimiento en el campo de la educaci¨®n y la salud. Entre tanto, cuando los medios de prensa consultan especialistas sobre los m¨¢s diversos temas y apelan a un cient¨ªfico, casi nunca consultan a una mujer.

El poco inter¨¦s que parece concitar la producci¨®n acad¨¦mica de las mujeres investigadoras no se reduce a las revistas de actualidad ni a los aportes que pueden hacerse desde el campo de las ciencias sociales. Un estudio reciente coordinado por Arturo Casadevall, del Albert Einstein College of Medicine de Nueva York, puso de relevancia que la participaci¨®n de mujeres en congresos de medicina era directamente proporcional a la presencia de investigadoras en los comit¨¦s cient¨ªficos promotores de dichos eventos: la representaci¨®n de mujeres investigadoras como ponentes parece depender de la intervenci¨®n de mujeres en la selecci¨®n y arbitraje de las ponencias seleccionadas. Los aportes de las mujeres cient¨ªficas no s¨®lo son poco interesantes en la prensa. Tambi¨¦n parecen ser poco interesantes para sus colegas del sexo masculino.

Hace unos d¨ªas nos sorprend¨ªamos con la noticia de que, durante las ¨²ltimas d¨¦cadas, entre los m¨¢s de 6 mil responsables de otorgar los premios Oscar en la Academia de Artes y Ciencias Cinematogr¨¢ficas de los Estados Unidos, 94% eran blancos, 76% hombres y su edad promedio 63 a?os. Como quiera que sea, m¨¢s sorprendente deber¨ªa ser que la composici¨®n de los comit¨¦s o consejos de muchas asociaciones cient¨ªficas (casi siempre progresistas y de izquierdas) sean tan parecidos a esa composici¨®n y tan poco receptivos a los avances en materia de igualdad de g¨¦nero. Machismo al fin, aunque con menos glamour y encanto que en Hollywood.

Las desigualdades de g¨¦nero en las universidades: entre la sinceridad y el ocultamiento

Llego a Chile, donde dentro de pocas horas dos mujeres asumir¨¢n el mando del pa¨ªs. Un pa¨ªs donde parece ser m¨¢s f¨¢cil que una mujer llegue a la presidencia de la rep¨²blica que al rectorado de una importante universidad. La Universidad de Chile, la m¨¢s prestigiosa, productiva y reconocida dentro y fuera del pa¨ªs, nunca ha tenido una mujer rectora, en 170 a?os de existencia.

Justamente, en ocasi¨®n del D¨ªa Internacional de la Mujer, se ha presentado el excelente informe, Del biombo a la c¨¢tedra. Igualdad de oportunidades de g¨¦nero en la Universidad de Chile, realizado por la Oficina de Igualdad de G¨¦nero del Rectorado de dicha instituci¨®n. Vale destacar el coraje y la decisi¨®n pol¨ªtica del Rector V¨ªctor P¨¦rez Vera al exponer c¨®mo, m¨¢s all¨¢ de los avances en materia de equidad, persisten en la Universidad de Chile grandes desigualdades en las oportunidades de participaci¨®n, promoci¨®n y remuneraci¨®n entre los profesionales del sexo masculino y femenino que all¨ª se desempe?an. El informe pone de relevancia las desigualdades existentes en la composici¨®n de los ¨®rganos de gobierno universitario, del estudiantado, en los equipos de investigaci¨®n, as¨ª como sus efectos en los procesos de evaluaci¨®n acad¨¦micos. Adem¨¢s del importante an¨¢lisis sobre las complejas percepciones acerca de la desigualdad de g¨¦nero en la Universidad de Chile, el documento aporta datos muy relevantes sobre las brechas salariales internas entre hombres y mujeres. La situaci¨®n es alarmante.

En Chile, como en muchos pa¨ªses latinoamericanos, las remuneraciones universitarias se componen de sumas fijas y variables. As¨ª las cosas:

• Entre los vicerrectores de la misma Universidad, las mujeres ganan 33% menos que los hombres. Las decanas ganan 10% menos que los decanos.

• Entre los docentes, m¨¢s de la mitad de las mujeres se encuentran en los dos quintiles inferiores en materia de remuneraci¨®n, mientras que s¨®lo un tercio de los hombres reciben las remuneraciones m¨¢s bajas. Por el contrario, 26,5% de los hombres reciben las remuneraciones m¨¢s altas, mientras que s¨®lo 8,2% de las mujeres disponen de esta oportunidad.

• Entre los docentes con dedicaci¨®n exclusiva, 64,6% son hombres y 35,4% mujeres.

• En promedio, las remuneraciones de los docentes de sexo masculino son m¨¢s de USD 1.100 superiores a las remuneraciones de las docentes de sexo femenino.

• Trabajadores y trabajadoras de la misma universidad, con igual jerarqu¨ªa, rango y responsabilidad ganan salarios diferentes. Las mujeres, naturalmente, ganan casi siempre menos.

Quiz¨¢s uno de los pocos rasgos que diferencia a la Universidad de Chile de buena parte de las universidades latinoamericanas, es que haya asumido la valent¨ªa de hacer p¨²blicas estas inequidades. No es poca cosa.

En este mismo espacio, hemos destacado que de las 200 mayores universidades latinoamericanas, s¨®lo 16% poseen rectoras mujeres. (Desigualdades de g¨¦nero, hipocres¨ªas de g¨¦nero).

Tambi¨¦n alertamos sobre c¨®mo los actuales sistemas de remuneraci¨®n basados en el m¨¦rito y la carrera acad¨¦mica, omiten considerar las especificidades o, en algunos casos, dificultades que tienen las mujeres (j¨®venes o no) para responder a los requisitos exigidos, lo que acarrea una enorme injusticia en las formas de distribuci¨®n de los beneficios salariales y profesionales definidos por las instituciones universitarias. No hay que ser un feminista radical para reconocer que la estructura profundamente competitiva de la carrera docente y de investigaci¨®n, penaliza a las mujeres que poseen hijos o disponen de menores condiciones de movilidad o circulaci¨®n internacional en virtud de sus necesidades b¨¢sicas de atenci¨®n familiar. Un ¡°d¨¦ficit¡± que comienza en el inicio de la carrera profesional universitaria y genera desigualdades que persisten o se profundizan en el transcurso de la misma.

La lucha por la igualdad de g¨¦nero es una dimensi¨®n fundamental de la lucha por la democracia, de la promoci¨®n de la justicia social y del ejercicio de una ciudadan¨ªa efectiva. En Am¨¦rica Latina, la pol¨ªtica, ese espacio patriarcal, colonizado por intereses y pr¨¢cticas olig¨¢rquicas y machistas, parece estar m¨¢s dispuesto a aceptar la igualdad entre hombres y mujeres, que nuestras universidades. La luchas por la igualdad de g¨¦nero deben superar las declaraciones de buena voluntad y la falsa efervescencia de discursos igualitaristas que apenas consiguen alejarse de los tenebrosos laberintos de la hipocres¨ªa.

Desde Santiago de Chile

Lecturas para despu¨¦s del 8 de marzo...

El D¨ªa Internacional de la Mujer genera una efervecencia de debates, la circulaci¨®n de textos y noticias que se desvanecen a medida que nos alejamos del 8 de marzo. Sugiero aqu¨ª algunas lecturas que est¨¢n disponibles en acceso abierto y gratuito. Se trata de textos publicados por el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO) en el marco de sus programas de promoci¨®n de la investigaci¨®n. CLACSO posee una extensa producci¨®n sobre desigualdades y discriminaci¨®n de g¨¦nero, particularmente promovida por su Grupo de Trabajo sobre Feminismo, coordinado en los ¨²ltimos a?os por las prestigiosas investigadoras: Alba Carosio, Magdalena Valdivieso, Raquel Drovetta, Magdalena Sagot y Alicia Gir¨®n. Los textos est¨¢n disponibles en la Biblioteca Virtual de CLACSO:

• ¡°Crisis financiera y trabajo femenino: tendencias emergentes y experiencias pasadas¡±. Jayati Gosh en Cr¨ªtica y Emancipaci¨®n N? 10 - Diciembre 2013. (leer) 

• Familias pobres y desigualdades de g¨¦nero en salud. Reina Fleitas Ruiz - Junio 2013. (leer) 

• Pobreza, desigualdad y salud en Am¨¦rica Latina. Laura Tavares Ribeiro Soares. [Compiladora] - Junio 2013. (leer) 

• ¡°Mujeres, pintura y pol¨ªtica¡±. Elena Poniatowska en Cr¨ªtica y Emancipaci¨®n N?9 - Mayo 2013. (leer) 

• ¡°Mujeres, religio?n y poli?tica: organizaciones y activismo poli?tico de mujeres evange?licas en la Argentina Contempora?nea (2000-2010)¡±. Ana Laura Azparren, Anali?a Quinta?ns, Roci?o Melo, Santiago Cunial y Roci?o Soler ¨C Mayo 2013. (leer) 

• ¡°Feminicidio y poli?ticas de la memoria. Exhalaciones sobre la abyeccio?n de la violencia contra las mujeres¡±. Karina Bidaseca en Hegemon¨ªa cultural y pol¨ªticas de la diferencia (Compiladores: Alejandro Grimson y Karina Andrea Bidaseca) - Mayo 2013. (leer) 

• ¡°Multiplicar la(s) diferencia(s): ge?nero, poli?tica, representacio?n y deconstruccio?n¡±. Nelly Richard en Hegemon¨ªa cultural y pol¨ªticas de la diferencia (Compiladores: Alejandro Grimson y Karina Andrea Bidaseca) - Mayo 2013. (leer)

• ¡°Dina?mica del devenir de la subjetividad femenina feminista¡±. Esperanza Paredes Herna?ndez en Subjetividades pol¨ªticas: desaf¨ªos y debates latinoamericanos (Compiladores: Pablo A. Vommaro, Claudia Piedrahita Echand¨ªa y ?lvaro D¨ªaz G¨®mez) - Febrero 2013. (leer)

• Mulheres que imigram atrav¨¦s da academia: articulando g¨ºnero, ra?a e feminismo na produ??o de conhecimento - Documento de Trabajo #28 - Thais ? Fran?a ¨C Enero 2013. (leer)
  

• De fr¨ªos y calores maternales: apuntes de un replanteamiento de la investigaci¨®n. Documentos de Trabajo #20. Vanesa Giraldo Gartner ¨C Noviembre 2012. (leer) 

• Feminismo y cambio social en Am¨¦rica Latina y el Caribe. Alba Carosio. (Coordinadora) ¨C Septiembre 2012. (leer) 

• ¡°Activos y estructura de oportunidades. Jo?venes y mujeres: Las desventuras de las estrategias de insercio?n laboral de los grupos vulnerables en el Uruguay¡±. Ver¨®nica Barrera en El mundo del Trabajo en Am¨¦rica Latina - Septiembre 2012. (leer)  

• ¡°Ge?nero y participacio?n poli?tica: los desafi?os de la organizacio?n de las mujeres dentro de los movimientos piqueteros en Argentina¡±. Florencia Partenio en Las deudas abiertas en Am¨¦rica Latina ¨C Enero 2012. (leer)  

• ¡°La poli?tica nacional de equidad de ge?nero del Frente Amplio. ?una nueva institucionalidad en el estado uruguayo?¡±. Alejandra Iervolino Carrio? en Las deudas abiertas en Am¨¦rica Latina ¨C Enero 2012. (leer) 

• A face feminina da pobreza em meio ¨¤ riqueza do agroneg¨®cio. Trabalho e pobreza das mulheres em territ¨®rios do agroneg¨®cio no Brasil. Christiane Senhorinha Soares Campos ¨C Noviembre 2011. (leer)

• Mujeres migrantes. Trayectoria laboral y perspectiva de desarrollo humano. Gloria Camacho Z. ¨C Septiembre 2010. (leer)

• Los riesgos de la producci¨®n de conocimiento con sesgo de g¨¦nero. Hacia una agenda pol¨ªtica feminista. Documentos de Trabajo #1. Raquel Irene Drovetta ¨C Agosto 2010. (leer)

• Crisis econ¨®mica: una perspectiva feminista desde Am¨¦rica Latina. Alicia Gir¨®n (Coordinadora) ¨C Mayo 2010. (leer)

• Jefatura femenina de hogar, pobreza urbana y exclusi¨®n social. Una perspectiva desde la subjetividad en el contexto cubano. Mar¨ªa del Carmen Zabala Arg¨¹elles ¨C Febrero 2010. (leer) 

• Cuerpo(s), subjetividad(es) y conflicto(s). Hacia una sociolog¨ªa de los cuerpos y las emociones desde Latinoam¨¦rica. Carlos Figari y Adri¨¢n Scribano (Compiladores) ¨C Agosto 2009. (leer) 

• G¨¦nero y globalizaci¨®n. Alicia Gir¨®n (Coordinadora) ¨C Agosto 2009. (leer) 

• Er¨®ticas de la disidencia en Am¨¦rica Latina. Brasil, Siglos XVII al XX. Carlos Figari ¨C Junio 2009. (leer) 

• Empobrecimiento y desigualdades de g¨¦nero en el imaginario de las mujeres nicarag¨¹enses. Aura Violeta Aldana Saraccini (Autora) ¨C Diciembre 2008. (leer) 

• La liberalizaci¨®n econ¨®mica en Paraguay y su efecto sobre las mujeres. Ver¨®nica Serafini Geoghegan ¨C Diciembre 2008. (leer)

Algunos textos hist¨®ricos de referencia: 

• Voces femeninas y construcci¨®n de identidad. Marcia Rivera (Compiladora) ¨C Marzo 1995. (leer) 

• Mujer, trabajo y ciudadan¨ªa. Marcia Rivera (Compiladora) ¨C Marzo 1995. (leer) 

• Tiempo y espacio: las luchas sociales de las mujeres latinoamericanas. Mar¨ªa del Carmen Feijo¨® (Compiladora) ¨C Marzo 1993. (leer) 

• Mujer y sociedad en Am¨¦rica Latina. Mar¨ªa del Carmen Feijo¨® (Compiladora) ¨C Abril 1991. (leer)

Entrevistas en CLACSO.TV: 

• Jayati Ghosh (India): "95% of Indian workforce is not working in formal employment"

• Dora Barrancos (Argentina): "La sexualidad disidente es m¨¢s ostensible"

• Donna Guy (Estados Unidos): "Evita, usted debe saber qu¨¦ problema tengo" 

• Magdalena Valdivieso Ide (Venezuela): "Desarrollar un pensamiento cr¨ªtico feminista en el cu¨¢l se reconozcan todas"

• Conferencia: "Mujeres, participaci¨®n y ciudadan¨ªa" - Magdalena Valdivieso (Venezuela), Alba Carosio (Venezuela), Elisa Guaran¨¢ de Castro (Brasil) y Elena Poniatowska (M¨¦xico)