La elecci¨®n de los mejores

Estar entre los diez estudiantes que han obtenido mejor nota en la selectividad es un gran m¨¦rito con recompensa asegurada. La primera, tener acceso directo a la carrera elegida. Los diez han obtenido una calificaci¨®n superior a la que exige la facultad con la nota de corte m¨¢s alta: la de Medicina de la Complutense de Madrid, que pide un 12,5 sobre 14. ?Y qu¨¦ eligen los alumnos m¨¢s brillantes de Espa?a de la ¨²ltima selectividad? La mayor¨ªa de ellos carreras cient¨ªficas o t¨¦cnicas: cuatro quieren cursar estudios relacionadas con Biomedicina, tres se decantan por un doble grado t¨¦cnico ¡ªpor ejemplo F¨ªsica y Matem¨¢ticas¡ª, dos cursar¨¢n Traducci¨®n e Interpretaci¨®n y uno Derecho. As¨ª pues, m¨¢s ciencias que letras.

Pese a que todos ellos podr¨ªan optar por cualquiera de los 2.500 grados que ofrecen las 79 universidades espa?olas, la mayor¨ªa estudiar¨¢ en la que est¨¢ m¨¢s cerca de casa. Los mejores no eligen, pues, las facultades m¨¢s prestigiosas, sino las m¨¢s pr¨®ximas, lo que corrobora otro fen¨®meno: la escasa movilidad estudiantil. Sin becas suficientes, no es posible algo que los expertos consideran muy positivo, tanto para el estudiante como para la universidad.

De momento, obtener una nota tan alta les eximir¨¢ de pagar la matr¨ªcula, que tras la subida de los ¨²ltimos a?os ¡ªhasta un 66%¡ª supone un cierto ahorro. Es este un premio merecido que nadie cuestiona pero que provoca sentimientos ambivalentes en los gestores universitarios. Por un lado, cualquier campus que se precie quiere atraer a los mejores estudiantes, porque eso aumenta el nivel y le da prestigio. Pero cuanto m¨¢s talento atrae, m¨¢s dinero pierde, porque el coste de la matr¨ªcula que no pagan los alumnos brillantes no lo sufraga Educaci¨®n, sino cada universidad.

Tener buenas notas les abrir¨¢ sin duda muchas puertas acad¨¦micas y cabe esperar que, al final del trayecto, encuentren trabajo sin dificultades. Otra cosa es que est¨¦ bien pagado. Seg¨²n un estudio realizado en Catalu?a, el 22,2% de los universitarios que acabaron la carrera hace cuatro a?os cobran menos de 15.000 euros brutos anuales, cuando en 2011 eran el 12,4%. No es dif¨ªcil encontrar en buenos laboratorios salarios mileuristas. Hay terreno que recorrer en este aspecto.