¡®CIStitis¡¯ aguda

Estoy que no orino. Y no es ninguna ordinariez gratuita, meapilas, que ya os veo venir poni¨¦ndome a caer de un poni. Estoy hablando de una problem¨¢tica fisiol¨®gica que no se la deseo a nadie. Se ve que, con esto de pasar de dormir a pelo a hibernar bajo edred¨®n n¨®rdico, he agarrado una infecci¨®n de ¨®rdago por la v¨ªa que est¨¢is pensando. Cistitis, ha sentenciado el ur¨®logo cuando le he explicado los s¨ªntomas: disuria, poliuria y hematuria, ahora vais y lo busc¨¢is en la RAE, para que luego malmet¨¢is con que si no cuido el vocabulario. S¨ª, el ur¨®logo, he dicho. Toda la vida pensando que el especialista en esas latitudes era el ginec¨®logo y resulta que la vejiga la lleva el m¨¦dico de la pr¨®stata. As¨ª estaba la consulta, abarrotada de carcamales, mi p¨²blico objetivo. Porque no ten¨ªa el horno para bollos, que si no, ligo seguro. Pero a lo que iba, que sue?o sola. Lo m¨ªo es de orinar y no echar gota, o de echarla toda junta del susto. Talmente como Dolores de Cospedal con el ascenso de Podemos.

A¨²lla la capataza del PP que est¨¢ superpreocupada porque las huestes de los c¨ªrculos son peligros¨ªsimas para la democracia. Inflamaci¨®n severa del CIS, o sea cistitis aguda, es lo que tiene Dolores desde que el bar¨®metro del ?dem le cambi¨® a Pablo Iglesias el sambenito de friki que le puso Arriola por el de presidenciable. Bueno, Dolores, y el resto de pr¨®ceres del arco parlamentario. Cist¨ªticos severos, andan, los pobres. No hay m¨¢s que verles los rictus. Ese querer y no poder. Ese escozor interno. Ese pinchazo de faca en el mism¨ªsimo amor propio. Ese pavor a enfrentarse a la hora de la verdad verdadera. Y todo, por el ataque de una bacteria. La E. coli, concretamente, la causante de la cistitis cl¨ªnica, ahora vais y la busc¨¢is en Google, para que ve¨¢is que no me invento nada. La ¡°E¡± no me pregunt¨¦is de d¨®nde viene. Pero lo de ¡°coli¡± se refiere clar¨ªsimamente al de la coleta. As¨ª que ah¨ª lo ten¨¦is, incr¨¦dulos. Blanco y en botella. Tenemos a toda la clase pol¨ªtica descompuestita perdida por los g¨¦rmenes que ella misma ha favorecido con su falta de higiene ¨ªntima.

Tanto, que sus respectivos ¨®rganos de partido han puesto en pie de guerra a lo m¨¢s agresivo de sus anticuerpos con la estrategia de que la mejor defensa es un ataque indiscriminado. Y ah¨ª tienes a los padres y madres de la patria defendiendo el fuerte como si les fuera el esca?o en ello. ¡°Una encuesta es una encuesta¡±, ha pontificado S¨¢enz de Santamar¨ªa. ¡°Lo peligroso es decir que otros partidos son peligrosos¡±, ha contratacado C¨¦sar Luena, portavoz del PSOE de Pedro S¨¢nchez. Un debate de altura, vive C¨¢novas y Sagasta. Mientras, Cayo Lara y Rosa D¨ªez hacen que con ellos no va la cosa. Lo malo es que, cuando en una relaci¨®n entran seg¨²n qu¨¦ cuerpos extra?os, eso no lo arregla ni una bronca, ni un viaje rom¨¢ntico, ni todas las promesas del mundo, por muy electorales que sean. As¨ª que, o espabilan, o la cistitis del de la coleta se los lleva por delante.

Dir¨¦is que, con la excusa de mi problem¨¢tica, me he escaqueado de hablar de lo de Mas Quisiera, lo de Pantoja Presidiaria, lo de Monago On The Road y lo de Cristina Reimputada. Las quejas, a jefatura. Y me abro, que tengo que hacer unos vahos donde yo te diga.