?C¨®mo es mejor lavar los platos: a mano o a m¨¢quina?
El lavavajillas permite ahorrar agua, pero su fabricaci¨®n supone un gasto energ¨¦tico. Rescatamos esta lecci¨®n sencilla por el D¨ªa de la Tierra
Organiza una cena en casa y la pila de platos que inunda la cocina desaparece en cuanto la mete en el lavavajillas. Pulsa el programa ECO y piensa: "Es mucho m¨¢s ecol¨®gico que lavarlos a mano¡±. Pero, ?est¨¢ en lo cierto? Si busca en Internet ¡°lavar a mano o con lavavajillas¡±, comprobar¨¢ que hay multitud de entradas apuntando en las dos direcciones. Varias hacen referencia a un estudio realizado por el Canal de Isabel II, en colaboraci¨®n con BSH Electrodom¨¦sticos Espa?a, que conclu¨ªa que lavar a m¨¢quina es m¨¢s ecol¨®gico que hacerlo a mano.
Para llegar a esta conclusi¨®n, los t¨¦cnicos analizaron una muestra de 155 viviendas de la Comunidad de Madrid entre enero y junio de 2008, en las que monitorizaron de forma continua el consumo de agua durante cuatro meses. La ocupaci¨®n media de las casas fue de 3,34 personas. En los dos primeros meses, los participantes ten¨ªan que lavar los platos solo a mano, y despu¨¦s, tras instalarles un lavavajillas, deb¨ªan lavar los platos siempre con ¨¦l.
Los lavavajillas utilizados eran de la clase AAA, de las marcas de BSH Electrodom¨¦sticos, con un consumo de 12 litros de agua y 1,05 kilovatios por hora de energ¨ªa en el programa ECO 50 ?C. Las mediciones realizadas durante el per¨ªodo de lavado a mano concluyeron que el consumo de agua en el fregadero fue, como media, de 88,8 litros diarios, de los que 52 correspondieron a agua caliente. Este represent¨®, aproximadamente, el 26% del gasto h¨ªdrico total de la vivienda.
Una vez instalados los lavavajillas, el consumo de agua en el fregadero de los hogares analizados se redujo a 54,2 litros diarios, que representan el 15,9% del total, siendo 24,6 litros diarios de agua caliente, seg¨²n el estudio.
Los resultados revelaron, por tanto, que lavar los platos a m¨¢quina represent¨® un ahorro del 9% del consumo total de las viviendas analizadas, lo que supuso, por t¨¦rmino medio, gastar 30,6 litros menos al d¨ªa (27,4 de agua caliente). Esta reserva variaba mucho dependiendo del n¨²mero de habitantes de las viviendas, siendo muy alta en casas en las que viv¨ªan tres o m¨¢s personas y m¨ªnima en viviendas ocupadas por una sola persona.
La laboriosa fabricaci¨®n del lavavajillas
¡°Para nosotros, la respuesta es clara. Desde el punto de vista ecol¨®gico es mejor lavar los platos a m¨¢quina que a mano¡±, asegura Ileana Izverniceanu, portavoz de la Organizaci¨®n de Consumidores y Usuarios (OCU).
¡°El proceso de recirculaci¨®n del agua en la cuba del lavavajillas en los diferentes ciclos hace que el consumo sea menor que si esta se hace a mano con el grifo abierto¡±, a?ade. En cuanto al punto de vista energ¨¦tico, Izverniceanu afirma que se logra mayor eficiencia si se concentra el lavado y se usa a plena carga. Sin embargo, otras fuentes apuntan a que no se tiene en cuenta el gasto energ¨¦tico y de recursos que supone fabricar un lavavajillas y que tambi¨¦n engordan la huella ecol¨®gica del ser humano (indicador de c¨®mo esquilmamos los recursos del planeta). ¡°Cuando ¨²nicamente se estudia la actividad espec¨ªfica de lavar los platos, el lavavajillas suele resultar m¨¢s eficiente en cuanto a consumo de agua, pero muchos estudios no contemplan el camino que ha recorrido esa m¨¢quina hasta llegar a nuestras cocinas, y el que recorrer¨¢ cuando decidamos sustituirla¡±, puntualizan desde Ecologistas en Acci¨®n.
Hay que tener en cuenta que en el ciclo de vida del lavavajillas se utilizan diferentes materiales, que forman parte de un proceso industrial con consumo de recursos, como son el agua y la electricidad, a los que hay que sumar los costes del transporte. "Adem¨¢s, cuando la m¨¢quina se rompa, la gesti¨®n de los residuos que genere tambi¨¦n ser¨¢ muy problem¨¢tica a nivel ambiental y mundial¡±, advierten desde la organizaci¨®n ecologista.?Diferentes estudios han demostrado c¨®mo los residuos el¨¦ctricos muchas veces no llegan a los vertederos correspondientes, algo que se agrava con los desechos electr¨®nicos, que pueden terminar sus d¨ªas en monta?as de desperdicios, en ?frica o Asia, sin ning¨²n tipo de control.
En su opini¨®n, es preferible lavar los platos a mano con un detergente ecol¨®gico (se reduce al m¨¢ximo la contaminaci¨®n de los recursos h¨ªdricos que circulan por nuestras ca?er¨ªas) y abriendo el grifo ¨²nicamente cuando es preciso. Con este fin, la Uni¨®n Europea ha creado la etiqueta Ecolabel, que identifica aquellos productos que han reducido su impacto ambiental a lo largo de su ciclo de vida. En este buscador aparecen los lavaplatos m¨¢s respetuosos con el medio ambiente, seg¨²n cada pa¨ªs.
No obstante, para casos en los que el uso del lavavajillas resulta casi imprescindible -como en bares, restaurantes o comedores-, desde Ecologistas en Acci¨®n aconsejan adquirir el aparato atendiendo a sus niveles de consumo, al lugar en el que fueron fabricados (para aplicar el criterio de cercan¨ªa) y apostar por m¨¢quinas fuertes y duraderas, repar¨¢ndolas cuando se estropeen en lugar de comprar una nueva, para evitar, en la medida de lo posible, la obsolescencia tecnol¨®gica.
Desde la OCU, la recomendaci¨®n es clara: ¡°Utilizar el lavavajillas a plena carga y en el programa ECO, que, aunque es m¨¢s largo, permite un ahorro mayor de agua y energ¨ªa¡±. Seg¨²n sus c¨¢lculos, en la opci¨®n verde se gasta un 16% menos de agua y un 20% menos de electricidad que en el programa normal. Aunque el aparato tarde en lavar los platos casi una hora m¨¢s, lo hace a menor temperatura, lo que consume menos energ¨ªa.
Este art¨ªculo fue originalmente publicado en diciembre de 2014. Lo rescatamos hoy para celebrar el D¨ªa de la Tierra.
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