Lara ?lvarez: ¡°No imagin¨¦ un susto como ese¡±

La compa?era de profesi¨®n, la chica de los deportes en televisi¨®n, ahora tiene representante y cualquier contacto con ella debe ser tramitado por el departamento de comunicaci¨®n de Telecinco, la cadena que la ha fichado para presentar junto a Jorge Javier V¨¢zquez su pr¨®ximo gran proyecto, el reality Supervivientes. Pero cuando por fin se accede a la conversaci¨®n con Lara ?lvarez (Gij¨®n, 1986), lo primero que hace es disculparse por el estr¨¦s de los d¨ªas previos al estreno del programa, un ¡°no parar de entrevistas y sesiones de fotos¡±, a la vez que confirma que es m¨¢s que una presentadora: ¡°Cuando hice el mundial de motociclismo tambi¨¦n tuvimos una promoci¨®n muy potente, pero en cuanto a solicitudes de periodistas nunca hab¨ªa vivido algo as¨ª¡±.

El inter¨¦s por la joven se ha desbocado a ra¨ªz de su relaci¨®n desde hace pocos meses con Fernando Alonso, y a la actualidad que ha rodeado al piloto desde su accidente en el circuito de Montmel¨® hace menos de un mes y a dos semanas de comenzar la temporada de competici¨®n. Lara, que estuvo junto a su novio en los peores momentos, cambia el tono al hablar del percance. Es consciente de los peligros de conducir un F¨®rmula 1, ¡°pero no puedes imaginar un susto como ese. S¨¦ que es un deportista de ¨¦lite y claro que hay riesgos, pero no piensas que algo as¨ª va a suceder¡±. Con voz triste zanja un asunto que resucita los peores recuerdos: ¡°Prefiero no hablar de ello¡±.

La pareja acaba de volver a Espa?a despu¨¦s de pasar unos d¨ªas de descanso en Dub¨¢i, pero Lara no va a tener mucho m¨¢s tiempo de disfrutar de Fernando totalmente recuperado. El 1 de abril se marcha a Honduras, escenario del concurso donde la asturiana permanecer¨¢ tres meses. ¡°Tengo v¨¦rtigo, pero much¨ªsima ilusi¨®n. Siempre quise hacer entretenimiento, y despu¨¦s de tantos a?os dedic¨¢ndome a la informaci¨®n por fin me ha llegado la oportunidad¡±. Un trimestre lejos de su familia ¡ªaunque espera que su madre pueda ir a visitarla un par de veces¡ª y tambi¨¦n de Alonso. Se r¨ªe ante la pregunta de si ha pedido consejo sobre c¨®mo evitar que su relaci¨®n se enfr¨ªe por la distancia. ¡°Cuando dos personas se quieren y son felices, la distancia no importa. Nos toca separarnos, pero me han ofrecido un programa de prime time que van a ver millones de personas, con un equipo del que me hablan maravillas, cogiendo el testigo de una profesional incre¨ªble como Raquel S¨¢nchez-Silva¡­ ?C¨®mo iba a rechazarlo?¡±.

No es la primera vez que Lara ?lvarez decide seguir apostando por su carrera pese a tener un novio rico y famoso. Mantuvo una relaci¨®n intermitente con el jugador del Real Madrid Sergio Ramos durante dos a?os que termin¨® en 2012, justo cuando el futbolista se march¨® a Polonia para jugar la Eurocopa y ella comenzaba a despuntar en televisi¨®n con la retransmisi¨®n de las motos. Entonces la joven descubri¨® lo que significa convertirse en un personaje de la prensa social. Una realidad que ha vuelto a ra¨ªz de su relaci¨®n con Alonso y que ella vive con normalidad. ¡°La vida de cada uno es la vida de cada uno. Al final todos tenemos una vida. Ellos son compa?eros y hacen su trabajo¡±, dice sobre los fot¨®grafos que persiguen sus pasos.

Lara quiere seguir ejerciendo de periodista. Se licenci¨® en Ciencias de la Informaci¨®n y desde que acab¨® la facultad no ha parado de trabajar para hacerse un hueco en el mundo de la televisi¨®n. No tiene miedo a ser conocida como la ¡°novia de¡± por tener compa?eros sentimentales tan medi¨¢ticos. ¡°Todo es cuesti¨®n de trabajo, si haces un buen trabajo se te conocer¨¢ por eso. Eso es lo que queda al final¡±. Y a?ade: ¡°Me voy tres meses a un para¨ªso, a pasar todo el d¨ªa en chanclas, disfrutando de paisajes y playas. Echar¨¦ de menos a los m¨ªos, pero a nadie le amarga un dulce¡±. Eso s¨ª, estar¨¢ en contacto permanente con Fernando Alonso y pendiente en su retorno a las pistas en el pr¨®ximo Gran Premio de Malasia. ¡°En Honduras tendr¨¦ televisi¨®n y tel¨¦fono m¨®vil. Soy la presentadora, no una superviviente¡±.