Ryan Gosling, la reinvenci¨®n de un gal¨¢n

Cuenta Ryan Gosling que si hoy est¨¢ aqu¨ª sentado dando entrevistas sobre una pel¨ªcula en la que no act¨²a es en buena parte gracias a Guillermo del Toro. Gosling llev¨® a casa del director mexicano el material que hab¨ªa filmado con su c¨¢mara en los barrios m¨¢s pobres de Detroit y le cont¨® que ten¨ªa una idea para un filme. ¡°Guillermo me dijo: ¡®Si no lo diriges t¨², lo dirijo yo¡¯. Me pareci¨® lo m¨¢s genial que pod¨ªa haberme dicho. Incluso si no era verdad, que seguramente no lo era, fue como el mago que te da tu armadura y tu espada y te env¨ªa a la aventura¡±.

Tres a?os despu¨¦s, Gosling promociona su primera pel¨ªcula como director una ma?ana de marzo en una habitaci¨®n de hotel de Beverly Hills. Abre la puerta, saluda y afirma que siente cierta presi¨®n para que la entrevista no vaya mal. ?De qu¨¦ manera podr¨ªa ir mal? ¡°Cr¨¦eme, puede ir mal¡±.

Esa aventura se llama Lost River y se estrena en Espa?a el 17 de abril. Una vez conocida la an¨¦cdota, hay que reconocer que tiene todo lo que le puede gustar a Del Toro: un paisaje amenazante, un secreto misterioso en el fondo de un lago, una familia que se defiende ante lo inevitable, un depredador que persigue a los protagonistas y un inframundo aberrante que est¨¢ a punto de engullirlos. Tanto es as¨ª que cuando uno ve en la pantalla las palabras ¡°escrito y dirigido por Ryan Gosling¡±, quiz¨¢ el gal¨¢n m¨¢s deseado de Hollywood en los ¨²ltimos tiempos, se pregunta qu¨¦ tiene este tipo en la cabeza y cu¨¢nto tiempo lleva eso ah¨ª queriendo salir.

Por zanjar la cuesti¨®n: en persona, Gosling es exactamente igual que en las pel¨ªculas. Cultiva el mismo aspecto del personaje de Drive, la misma barba d¨¦bil, el mismo flequillo corto peinado con los dedos, la mirada de t¨ªmido con gracia mientras habla, despacio y cool. En la comedia Crazy, Stupid, Love, cuando se quita la camiseta, Emma Stone exclama incr¨¦dula: ¡°?Parece que te han pasado por Photoshop!¡±. No hace falta que se la quite. En resumen, todo lo que tu novia dice de ¨¦l est¨¢ justificado. Fin del debate.

Ryan Gosling tiene 34 a?os y naci¨® en London (Canad¨¢), a dos horas en coche de Detroit, y esa es una caracter¨ªstica que explica parte de la pregunta inicial sobre las obsesiones que hay detr¨¢s de Lost River. Su madre los crio sola a ¨¦l y a su hermana, como la protagonista de la pel¨ªcula (Christina Hendricks, de Mad Men), en un barrio de clase media baja. ¡°Detroit es la ciudad que domina todo el ¨¢rea. Siempre tuve una idea rom¨¢ntica de c¨®mo ser¨ªa la vida all¨ª. Era el sitio donde naci¨® la Motown y la industria del motor, el sue?o americano. Tard¨¦ mucho tiempo en visitarla. No fui hasta que ten¨ªa 30 a?os, y cuando llegu¨¦ era muy diferente de lo que hab¨ªa imaginado¡±.

Tr¨¢iler de Lost River. / Warner / Betta Pictures / Youtube

El Detroit de la pel¨ªcula ha sido arrasado por la crisis financiera y las hipotecas subprime. Las casas son abandonadas una tras otra, la naturaleza se come las calles como si fueran ruinas en la selva. En alg¨²n momento parece el fin de la civilizaci¨®n, parece Mad Max. ¡°En esas ¨¢reas es as¨ª. Es una parte de Detroit. Hay otra reinvenci¨®n emocionante que est¨¢ sucediendo, pero en estas bolsas hay gente viviendo. Y para ellos es f¨¢cil sentirse a veces como los ¨²ltimos habitantes de la tierra¡±.

La pel¨ªcula lleva al espectador a un mundo que recuerda mucho a David Lynch, y especialmente a Blue Velvet. Sin duda, es una de las pel¨ªculas de su infancia, pero Gosling se defiende de la comparaci¨®n. ¡°Pusimos mucho esfuerzo en no parecer una pel¨ªcula de David Lynch¡±. Gosling recupera el teatro macabro de finales del siglo XIX y principios del XX a trav¨¦s de una sala de fiestas, basada en teatros reales de Par¨ªs donde se hac¨ªan espect¨¢culos de asesinatos y mutilaciones. ¡°Los clubes de Lynch no son reales, son lugares en alg¨²n punto de tu subconsciente. Nosotros quer¨ªamos que fuera un lugar real, donde hay dinero, un backstage y una explicaci¨®n real detr¨¢s del absurdo¡±.

?l insiste en que nunca quiso hacer algo macabro. Este es un relato sobre la familia y su capacidad para salir juntos de la adversidad. Dice sobre Detroit y la historia: ¡°Me recordaban a pel¨ªculas con las que hab¨ªa crecido, como El secreto de Nimh, que iba de una familia que se mudaba porque ven¨ªa una plaga, o Los amos de la noche, de Walter Hill, que es una pesadilla en un Nueva York lleno de bandas¡±. Asegura que su relato no es diferente de Los Goonies. ¡°Es una familia que ve su vida amenazada¡±.

La familia es un concepto que, a partir de la pel¨ªcula, se va filtrando poco a poco en la conversaci¨®n. Gosling acaba de estrenar vida con el nacimiento de su primera hija, el pasado septiembre. ¡°No te quiero aburrir¡­ pero cuando yo era ni?o, mi t¨ªo vino a vivir a casa. Entonces decidi¨® que se iba a convertir en imitador de Elvis. Esto cambi¨® nuestras vidas por un a?o.

¡°Hollywood se parece mucho al instituto: si quieres ir a tu rollo, lo pagas. es parte del juego¡±, asegura el int¨¦rprete

Ten¨ªamos a Elvis en casa. Mis t¨ªos y mis t¨ªas se convirtieron en guardaespaldas y coristas, y mi t¨ªo lleg¨® a montar un espect¨¢culo al final de a?o. Despu¨¦s de aquello no volvi¨® a hacerlo. Todo volvi¨® a la normalidad. Fue muy triste, porque la vida hab¨ªa sido muy emocionante durante ese tiempo. Llegu¨¦ a conocer a mi familia de una forma en la que nunca lo hab¨ªa hecho y nunca volv¨ª a conocerlos as¨ª. Fue construyendo algo juntos, por rid¨ªculo que fuera, como de verdad llegamos a conocernos unos a otros. Creo que he utilizado eso como modelo en mi vida: trabajar con mis amigos y mi familia, con gente que me importa, para poder pasar tiempo juntos, haciendo algo juntos¡±.

En Lost River, la esposa de Gosling en la vida real, la actriz Eva Mendes, hace un inquietante papel secundario. Adem¨¢s, se ha rodeado de buena parte del equipo de producci¨®n de Drive y Cruce de caminos. ¡°Creo que al trabajar con amigos y familia te retas de una manera distinta a cuando lo haces con desconocidos. Me da la impresi¨®n de que he perdido mucho el tiempo. Cuando trabajas con alguien nuevo, te pasas toda la pel¨ªcula intentando superar la cortes¨ªa, siendo educado. Cuando trabajas con gente que conoces, te retan de verdad, es dif¨ªcil aparentar delante de ellos. Cuanto m¨¢s busco eso, m¨¢s intensa es mi vida creativa, no se queda estancada porque est¨¢s trabajando con gente a la que les gustas por lo que has hecho antes¡±.

Lo que Gosling llama su vida creativa est¨¢ lejos de quedarse estancada. Acaba de terminar de rodar con Terrence Malick, a quien, por cierto, agradece que le dejara tocar bastante la c¨¢mara durante el rodaje, lo que le ayud¨® en su pel¨ªcula. El estatus de Gosling en estos tiempos en Hollywood es el de una estrella imparable, alguien a quien todo el mundo querr¨ªa en su pel¨ªcula. Hay pocos con la doble virtud de derretir por igual a espectadoras y a cr¨ªticos. Es una especie de Paul Newman de finales de los cincuenta, cuando, a la misma edad que Gosling y bien entrenado en la televisi¨®n, igual que ¨¦l, pas¨® de golpe a hacer dos taquillazos al a?o. Newman esper¨® hasta los 43 para dirigir una pel¨ªcula, y tambi¨¦n lo hizo con su mujer.

Su poder de atracci¨®n qued¨® inesperadamente al descubierto durante el esc¨¢ndalo provocado por el ataque inform¨¢tico masivo contra Sony Pictures. El robo y la posterior publicaci¨®n de los correos electr¨®nicos privados de la jefa de los estudios, Amy Pascal, una de las personas m¨¢s poderosas de la industria hasta ese momento, revelaba las ganas de ?hacer algo con el actor. Pascal sopesa tenerle en la biograf¨ªa de Steve Jobs o en Sinister Six, la pel¨ªcula de villanos de Marvel que el estudio planea para 2016. En los e-mails, la agente de Gosling supuestamente deja claro el inter¨¦s del actor por salir en la secuela de Cazafantasmas.

De la conversaci¨®n, uno deduce que Gosling es una de esas personas que llevan consigo su infancia como una bandera. La infancia que Gosling proyecta en Lost River es la de la lucha de su familia y ¨¦l mismo por salir adelante. Pero hay otra infancia, que empieza en 1992, en Montreal, en una habitaci¨®n delante de una c¨¢mara de v¨ªdeo. Era el casting para una nueva temporada de El club de Mickey Mouse, en el canal Disney. El hombre que le grababa se llamaba Matt Casella. Mucho antes de Internet y los m¨®viles, Casella entrevist¨® a 17.000 ni?os por todo Estados Unidos y Canad¨¢ y eligi¨®, entre otros, a estos cuatro: Ryan Gosling, Justin Timberlake, Christina Aguilera y Britney Spears. Hoy d¨ªa, aquello se sigue considerando uno de los mejores castings que se hayan hecho jam¨¢s en cualquier medio.

¡°Cuando encontr¨¦ a Ryan en Montreal, a los 12 a?os, ten¨ªa sobre todo una imaginaci¨®n sin l¨ªmites¡±, rememora Casella a trav¨¦s de un correo electr¨®nico. ¡°Ryan era tan divertido y especial que lo tuve horas en la sala de audici¨®n. Todav¨ªa conservo la cinta. Interpret¨® varias canciones, bail¨® movimientos de hip-hop a su manera, hizo imitaciones de Peter Sellers en La pantera rosa y el chiste de ¡®?su perro muerde?¡¯ (de La pantera rosa ataca de nuevo). Pens¨¦: ¡®?C¨®mo conoce esto? ?Qui¨¦n le ha ense?ado ese material?¡¯. Era incre¨ªble y alucinante. Tambi¨¦n hizo de Wayne y Garth en El mundo de Wayne. Se inventaba personajes y hablaba en franc¨¦s. Cont¨® chistes, uno de ellos con acento escoc¨¦s. Le hice leer mon¨®logos y escenas. Estaba a 4.000 kil¨®metros de mi oficina en los estudios Disney en Burbank (California) y ese d¨ªa supe que hab¨ªa descubierto a alguien muy especial¡±.

¡°Durante las segundas pruebas, pregunt¨¦ a los chicos cu¨¢l era su pel¨ªcula favorita. Por ejemplo, Justin Timberlake dijo que era Top Gun, otros dijeron La bella y la bestia. Entonces le pregunto a Ryan, y su pel¨ªcula favorita era de tres horas, ten¨ªa subt¨ªtulos y hab¨ªa ganado el Oscar. Era Bailando con lobos. Eso fue definitivo. Supe en ese momento que este era un chico de lo m¨¢s especial, que ten¨ªa un gusto fuera de lo normal y un talento natural como yo no hab¨ªa visto. Conoc¨ª a su madre, Donna, que era encantadora; no era una madre de actor y pod¨ªa con todo. Lo apoy¨® al 100% para que esto sucediera¡±. Casella escribi¨® personalmente la recomendaci¨®n al Gobierno de Estados Unidos para que le diera un permiso de trabajo a Gosling, que era canadiense y no estaba sindicado. ¡°Estoy muy orgulloso de ser el hombre que descubri¨® a Ryan Gosling¡±.

Al principio de Lost River, un vecino le dice al adolescente protagonista: ¡°Vete de aqu¨ª mientras puedas. Ve al Sur y no pares hasta que veas palmeras¡±. ?Quiz¨¢ otra pincelada autobiogr¨¢fica? Despu¨¦s del Club Mickey, Gosling decidi¨® que no iba a ser el actor que quer¨ªa en Canad¨¢, que las pel¨ªculas se hac¨ªan en sitios con palmeras. ¡°En retrospectiva, una de las cosas de las que estoy m¨¢s satisfecho es de haberme mudado a Los ?ngeles para actuar cuando ten¨ªa 16 a?os. No esper¨¦ a tener 21. Estoy contento de haberlo hecho porque a los 21 igual habr¨ªa tenido m¨¢s miedo. A los 16, lo natural es no preocuparte por tu seguridad ni por nada, te sientes invencible¡±.

¡°Cuando encontr¨¦ a Ryan, a los 12 a?os, ten¨ªa una imaginaci¨®n sin l¨ªmites¡±, dice el director de ¡®casting¡¯ que lo fich¨® para ¡®El club de mickey¡¯

Ah¨ª empez¨® su segunda carrera en televisi¨®n. A los 21 a?os consigui¨® su primer protagonista en El creyente, una pel¨ªcula sobre un joven jud¨ªo que se vuelve neonazi y que se sosten¨ªa con su actuaci¨®n. El papel de h¨¦roe rom¨¢ntico lleg¨® en 2004 con El diario de Noa. En 2006 cautiv¨® a los cr¨ªticos con un profesor de instituto drogadicto en Half Nelson. El mejor guapo atormentado de la d¨¦cada hab¨ªa nacido. Despu¨¦s, un tour de force emocional en Blue Valentine y el ¨¦xito mundial de Los idus de marzo, gracias a George Clooney, quien asegur¨® haber pensado en Gosling desde el principio. ¡°Yo era actor a la misma edad que ¨¦l¡±, dice Clooney en las cr¨®nicas del estreno de aquella pel¨ªcula, ¡°y no sab¨ªa hacer nada de lo que ¨¦l hace. Llevaba un peinado hortera y estaba en una comedia barata¡±. La pel¨ªcula de Clooney se estren¨® en 2011, el a?o en que no se pod¨ªa ir al cine sin ver a Ryan Gosling. Ese a?o estren¨® adem¨¢s Crazy, Stupid, Love, donde bordaba el personaje de depredador de discoteca, y Drive, el colmo del cachas rom¨¢ntico y el papel por el que ser¨¢ recordado muchos a?os.

A estas alturas, Gosling ha hecho tantas veces de guapo atormentado, o de guapo a secas, que parece casi un g¨¦nero en s¨ª mismo. ¡°Una pe?l¨ªcu?la de Ryan Gosling¡± empieza a convertirse en una marca. Cuando uno tiene ese estatus y quiere empezar una carrera como director, ¡°hay formas m¨¢s seguras de hacerlo¡± que Lost River. Gosling no desconoce la ?f¨®rmula: ¡°Generalmente, si eres un actor, sales en el filme que diriges, y haces una pel¨ªcula que se parezca a otra con la que has tenido ¨¦xito. Ese es el modelo prudente. No lo juzgo, es inteligente. Yo no decid¨ª de pronto que quer¨ªa dirigir. Tuve una experiencia en Detroit que quer¨ªa compartir, y el motivo para dirigirla era poder compartirla. Fue algo que me vino de forma natural y no dej¨¦ que el miedo dictara mis emociones¡±. Y si a los cr¨ªticos les cae mal, ¡°tienes que encajar el golpe en la mand¨ªbula y seguir adelante¡±.

Lo dice porque hasta ahora Gosling ha sido bendecido por la cr¨ªtica quiz¨¢ como ning¨²n otro actor de su generaci¨®n. Desde Half Nelson le han llovido los elogios en todo lo que ha hecho como int¨¦rprete. Pero mientras un actor tiene el privilegio de ser juzgado solo por su trabajo, independientemente de la calidad de la pel¨ªcula, un director es responsable de todo. Las cr¨ªticas de Lost River fueron duras en Cannes, pero en un ambiente m¨¢s independiente y americano, como el festival South By Southwest de Austin (Texas) este mes de marzo, el atrevimiento de Gosling ha sido aplaudido. No se puede negar que la pel¨ªcula contiene una atm¨®sfera que se pega al espectador y no se olvida f¨¢cilmente. Cabe preguntarse c¨®mo se prepara un actor mimado por la cr¨ªtica desde hace una d¨¦cada para un juicio como este. ¡°Creo que el instituto te prepara para esto. En serio. No es distinto. En el instituto, si quieres ir a tu rollo, lo pagas. De alguna forma eso te prepara para la vida, porque Hollywood es muy parecido. Desgraciadamente, es parte del juego¡±.

Gosling sali¨® de Canad¨¢ para irse al Sur y no par¨® hasta que vio palmeras. En esta ocasi¨®n se podr¨ªa decir que ha viajado al Norte y no ha parado hasta ver monstruos. ¡°Estoy contento de haber hecho la pel¨ªcula ahora ¨Cla empec¨¦ con 31 a?os¨C y no dentro de 10 a?os. Porque entonces puede que hubiera tenido m¨¢s miedo. Mirando atr¨¢s, estoy contento de haber hecho cosas que me han empujado al escenario antes de poder dudar¡±.

La carrera de la estrella Ryan Gosling no va a variar un ¨¢pice por la carrera del director independiente Ryan Gosling. ?Veremos de nuevo al actor que conoc¨ªamos? ¡°Desde luego. Y de alguna manera esto me ha hecho apreciar la actuaci¨®n de una forma nueva. He hecho esto desde que ten¨ªa 12 a?os, le he dado mi vida a las pel¨ªculas. Y creo que es importante preguntarte por qu¨¦. Si tienes una empresa, ser¨ªa bueno que supieras hacer todos los trabajos de esa empresa, para que entiendas qu¨¦ le est¨¢s pidiendo a la gente y qu¨¦ se te pide a ti. Solo desde fuera, el cambiar de gorra se ve como algo m¨¢s dram¨¢tico de lo que es. Incluso en Hollywood la gente se sorprende cuando un actor quiere dirigir¡±.

Con este cambio de gorra moment¨¢neo, a los 34 a?os, Ryan Gosling muestra al p¨²blico una faceta completamente nueva de su personaje p¨²blico. El macizo tierno que ha reinventado el concepto de gal¨¢n de Hollywood en lo que va de d¨¦cada convive a partir de ahora con un artista atormentado, marido y padre, que conecta con un p¨²blico indie a trav¨¦s de sus obsesiones privadas. ¡°No quiero que parezca que intento por distanciarme de una idea de m¨ª¡±, dice. ¡°No tom¨¦ esta decisi¨®n por esa raz¨®n. Me siento muy afortunado de las oportunidades que he tenido. Disfrut¨¦ haciendo esas cosas y son parte de mi personalidad. Pero tambi¨¦n s¨¦ hacer esto. La gente que disfruta de mi otro trabajo a lo mejor no disfruta con este. Pero no es excluyente, est¨¢n en el mismo lugar¡±.