10 trucos antihambre: c¨®mo dejar de picar entre horas

La televisi¨®n engorda a todos menos a Carrie Bradshaw y sus amigas. Las cuatro chicas de Sexo en Nueva York se pasan seis temporadas zampando sin que les asome un michel¨ªn. Uno de sus mayores aliados para calmar el est¨®mago son los aclamados cupcakes de la popular pasteler¨ªa neoyorquina Magnolia Bakery. Pero en la vida real, el celuloide de la gran pantalla se convierte en celulitis. Y aparte de engordar, picar entre horas tampoco es saludable. Pues a menudo, los tentempi¨¦s de este mal h¨¢bito son alimentos ricos en grasas saturadas, az¨²cares y otros c¨®mplices que abundan en las m¨¢quinas expendedoras.

¡°Muchas veces, el picoteo est¨¢ m¨¢s relacionado con un mal manejo del estr¨¦s, por ejemplo, que con el hambre¡±, cometa Irene Bret¨®n, de la Sociedad Espa?ola de Endocrinolog¨ªa y Nutrici¨®n, quien asegura que damos una respuesta ¡°inapropiada¡± a nuestros est¨ªmulos. Si te suenan las tripas a deshora, la tambi¨¦n m¨¦dica del Hospital General Universitario Gregorio Mara?¨®n recomienda estructurar y planificar comidas en lugar de tomar lo que sea, de pie y sin darse cuenta. ¡°No pasa nada por merendar o cenar temprano, pero ll¨¢malo de esa manera¡±, recalca Bret¨®n.

Se acerca el verano y perder peso se convierte en una obsesi¨®n para muchos. Bret¨®n recomienda evitar dietas restrictivas, sobre todo a aquellas personas con tendencia a picar entre comidas. ¡°Para perder peso, debemos intentar desplazar las calor¨ªas al principio del d¨ªa¡±, asesora esta experta en endocrinolog¨ªa y nutrici¨®n. Cuando llegamos a casa despu¨¦s de superar un d¨ªa duro de trabajo es mucho m¨¢s frecuente caer en la tentaci¨®n de abrir la nevera. Mejor descansar, beber agua en lugar de refrescos y ¡°diferenciar la sed del hambre¡±. Las consecuencias del picoteo son muchas. Este tipo de conductas inapropiadas son frecuentes en dietas no saludables. Si las llevamos al extremo, incluso pueden conllevar trastornos en la conducta alimentaria. ¡°Debemos controlar un aspecto tan importante de la vida como es la alimentaci¨®n¡±, concluye Bret¨®n.

Por su parte, la neurociencia ha identificado diversos neurotransmisores implicados en la adicci¨®n: la dopamina juega ¡°un papel principal¡± cuando se adquiere una dependencia, recuerdan cient¨ªficos del Centro de Investigaci¨®n y de Educaci¨®n de la Adicci¨®n de la Universidad de Texas (Estados Unidos). Este neurotransmisor hace de las suyas en adicciones capitales, pero ni de lejos se comporta igual con la comida. ¡°El cerebro no responde a los alimentos de la misma forma que lo hace con las drogas adictivas, como la hero¨ªna y la coca¨ªna¡±, concluy¨® el pasado septiembre un estudio del consorcio europeo NeuroFAST.

A nivel m¨¦dico, la adicci¨®n debe cumplir una serie de requisitos que dejan huella en el cerebro. La principal residencia neuronal de una adicci¨®n se halla en el n¨²cleo accumbens, una zona del cerebro muy primitiva donde tambi¨¦n se refugian el placer y el dolor. Las sustancias adictivas activan el sistema de recompensa, pero los alimentos por s¨ª mismos no presentan estas caracter¨ªsticas. ¡°La adicci¨®n a comer es un fen¨®meno conductual¡±, subraya Carlos Di¨¦guez, investigador del Centro de Investigaci¨®n Biom¨¦dica en Red de la Fisiopatolog¨ªa de la Obesidad y la Nutrici¨®n (CIBERobn). As¨ª, no puede decir usted que es un yonqui de la comida. Nuestro comportamiento moldea las neuronas como si estuvieran hechas de pl¨¢stico. El aprendizaje de determinadas conductas activa y desactiva el sistema de recompensa. ¡°Las personas desarrollan impulsividad a la comida empujados por sentimientos positivos que el cerebro asocia a este acto¡±, afirma la investigaci¨®n de NeuroFAST. Se trata, pues, de poner un poco de orden en un comportamiento desmara?ado. Estas son las claves que nos dan los expertos. Y si no quiere renunciar a picar entre horas, siga al menos el consejo que no da Mireia Carbonell, nutricionista y tecn¨®loga de los alimentos: "Coma entre horas de forma saludable, sin recurrir a lo primero que encuentre en la nevera, que acostumbran a ser alimentos cal¨®ricos, ricos en az¨²cares y grasas¡±.