Medicamentos falsos, la ¨²ltima pandemia
Casi la mitad de los habitantes del planeta viven en peligro por el consumo de medicinas adulteradas Estas son las revelaciones de la revista cient¨ªfica The American Journal of Tropical Medicine and Hygiene
M¨¢s de 4.000 millones de personas ¡ªaproximadamente la mitad de la poblaci¨®n mundial¡ª viven en pa¨ªses donde las medicinas no son eficaces debido a su falsificaci¨®n o a una fabricaci¨®n de inferior calidad. Esta pandemia de medicinas falsas o adulteradas condena sin el tratamiento adecuado a enfermos que padecen serias enfermedades. Algunos estudios calculan que la proliferaci¨®n de medicamentos falsificados supone un negocio criminal que alcanza ganancias de hasta 75.000 millones de d¨®lares al a?o.
Para dar a conocer el alcance de este grave problema mundial y su repercusi¨®n en la salud p¨²blica, la revista cient¨ªfica The American Journal of Tropical Medicine and Hygiene (AJTMH), ha presentado este lunes un suplemento especial titulado La Pandemia global de los medicamentos falsificados: Novedades en el laboratorio y sobre el terreno y perspectivas pol¨ªticas (The Global Pandemic of Falsified Medicines: Laboratory and Field Innovations and Policy Perspectives), en el que se recogen diecisiete trabajos sobre medicamentos falsos y adulterados, firmados por investigadores y especialistas en la materia.
La presentaci¨®n del suplemento se llev¨® a cabo en el transcurso de una rueda de prensa celebrada en la Chapel Hill¡¯s Gillings School of Global Public Health, de la universidad de Carolina del Norte, Estados Unidos. El suplemento recoge los resultados de los trabajos de campo realizados en distintos pa¨ªses de ?frica y Asia y las t¨¦cnicas m¨¢s innovadoras para la detecci¨®n de medicinas falsificadas. Esta publicaci¨®n pretende tambi¨¦n abrir un debate sobre la creaci¨®n de un tratado internacional para el control de medicamentos, similar a las medidas de control del consumo del tabaco, como un modelo para combatir esta pandemia.
En la ¨²ltima d¨¦cada, muchos estudios han resaltado el impacto negativo que producen estos medicamentos de poca calidad. La fabricaci¨®n y distribuci¨®n de este tipo de f¨¢rmacos incrementa la mortalidad y la morbilidad de personas con enfermedades, destruye la confianza de la poblaci¨®n en el sistema de salud y es muy probable que contribuya a la aparici¨®n de resistencias, lo que amenaza los esfuerzos de control y eliminaci¨®n de enfermedades infecciosas como la malaria. Estas resistencias se producen, entre otros motivos, al aplicar a los microorganismos dosis de principio activo por debajo del ¨ªndice terap¨¦utico.
Qu¨¦ es un medicamento falso
¡°Aunque se han hecho muchos intentos, todav¨ªa no se ha llegado a un consenso global sobre las definiciones de las medicinas falsas o las de calidad inferior¡±, afirma el profesor Paul Newton, director de la Lao-Oxford-Mahosot-Wellcome Trust-Research Unit (LOMWRU) de Vientiane (Laos), responsable del Grupo de Calidad de Medicamentos antimal¨¢ricos de WWARN y uno de los m¨¢ximos especialistas en la materia.
La Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS), por su parte, los define con el rebuscado acr¨®nimo en ingl¨¦s de SSFFC (Substandard/spurious/falsely-labelled/falsified/counterfeit medicines). Este t¨¦rmino recoge tanto las medicinas cuyas etiquetas contienen errores porque son producidas con intenci¨®n de enga?o (spurious/falsely-labelled/falsified/counterfeit) como aquellas que se producen por errores y negligencia en la fabricaci¨®n (substandard). La salud p¨²blica deber¨ªa ser la primera consideraci¨®n para definir estos medicamentos falsificados, dejando a un lado los matices relativos a la propiedad intelectual. La definici¨®n es importante puesto que el origen y la soluci¨®n de las medicinas falsificadas o los f¨¢rmacos de calidad inferior son diferentes. Mientras que la falsificaci¨®n es un negocio criminal perseguido por instituciones como Interpol o los ¨®rganos policiales de cada pa¨ªs, las medicinas de calidad inferior se producen por la falta de los controles de calidad necesarios en la fabricaci¨®n de los medicamentos, controles que son competencia de los organismos de regulaci¨®n de medicamentos.
El principal problema para poder controlar eficazmente la calidad en la fabricaci¨®n de los medicamentos reside en el coste de la puesta en marcha de la infraestructura de laboratorios necesaria y de la constituci¨®n de los organismos de regulaci¨®n para la monitorizaci¨®n de la calidad de las medicinas. La OMS estima que el 30 por ciento de las agencias del medicamento en todo el mundo no tienen capacidad funcional. Muchos pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo no tienen suficientes recursos financieros o humanos para llevar a cabo los estrictos controles de calidad necesarios. Precisamente, uno de los ¨²ltimos trabajos que hemos llevado a cabo con WWARN ha sido la revisi¨®n de las gu¨ªas y protocolos de muestreo de medicamentos falsos de la OMS.
Investigaci¨®n en Laos
Uno de los 17 trabajos incluidos en este suplemento recoge un estudio, del que soy autora y en cuyo dise?o y coordinaci¨®n cient¨ªfica he participado, sobre el cambio de la prevalencia de medicamentos falsos contra la malaria en Laos en la ¨²ltima d¨¦cada. El trabajo se realiz¨® bajo la direcci¨®n del Grupo de Calidad de Medicamentos antimal¨¢ricos de la WorldWide Antimalarial Resistance Network (WWARN), de la Universidad de Oxford, Reino Unido y la Lao-Oxford-Mahosot-Wellcome Trust-Research Unit (LOMWRU) de Vientiane, Laos.
El grupo investigador confirm¨® que, gracias a la puesta en marcha de diversas estrategias para combatir la amenaza de los medicamentos falsos desde 2003, se ha registrado una disminuci¨®n significativa en la venta y distribuci¨®n de estos f¨¢rmacos tan perjudiciales Laos.
Una encuesta sobre los medicamentos antimal¨¢ricos realizada en 2003 encontr¨® que el 84% del Artesunato muestreado ¨Cun antipal¨²dico frecuentemente usado en aquel momento¨C no conten¨ªa el principio activo adecuado. La misma encuesta, repetida en 2012, constat¨® que todos los f¨¢rmacos antimal¨¢ricos examinados conten¨ªan el principio activo correcto. Un triunfo en la batalla de este pa¨ªs asi¨¢tico contra las medicinas falsas contra la malaria.
Adem¨¢s, en este periodo de nueve a?os se han producido en Laos numerosos cambios que han permitido que muchas personas que viven en las regiones m¨¢s aisladas del pa¨ªs tengan un mejor acceso a los servicios de salud y a tratamientos de malaria m¨¢s seguros. Las estrategias de control de los medicamentos, el desarrollo de sistemas para garantizar la calidad de los mismos, junto con un mayor conocimiento y educaci¨®n sobre los medicamentos adulterados, han jugado un papel fundamental en la disminuci¨®n del comercio de estas medicinas tan da?inas.
A pesar de todo, aunque todas las muestras analizadas en 2012 no presentaban evidencia de falsificaci¨®n, m¨¢s de la cuarta parte de los antimal¨¢ricos estudiados hab¨ªan sido deficientemente fabricados o hab¨ªan empezado a degradarse. Esto puede producirse por un almacenaje poco adaptado a las altas temperaturas tropicales. Adem¨¢s, la mayor¨ªa de las medicinas recogidas eran cloroquina, considerada ineficaz contra el tipo de malaria (Plasmodium Falciparum) prevalente en la zona.
¡°Las medicinas de calidad deficiente son un grave problema internacional¡±, opina el Profesor Philippe Gu¨¦rin, Director de WWARN. ¡°Esta investigaci¨®n demuestra que Laos ha tenido ¨¦xito en su respuesta a esta amenaza en la ¨²ltima d¨¦cada, pero queda mucho trabajo por hacer a nivel global. Necesitamos trabajar en colaboraci¨®n con los gobiernos, los profesionales de la salud, los donantes y las ONGs para asumir la verdadera magnitud del problema y desarrollar estrategias realistas si queremos poner fin a este problema. Por todo ello, este suplemento que acaba de ser presentado intenta captar la atenci¨®n de los pol¨ªticos y los dirigentes¡±.
Se necesita voluntad pol¨ªtica
Aunque hay evidencia de que, especialmente en pa¨ªses en v¨ªa de desarrollo, una gran cantidad de las medicinas consumidas son de poca calidad, los esfuerzos realizados para abordar el problema han tenido resultados muy poco tangibles, si lo comparamos con la importancia del problema, principalmente porque los programas han sido ejecutados con lentitud, de forma fragmentada y con muy poca financiaci¨®n. La comunidad internacional deber¨ªa actuar con mayor rapidez para llevar a cabo intervenciones que protejan la distribuci¨®n de medicamentos a nivel global.
Por otra parte, la capacidad limitada de monitoreo en pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo tiene como primera consecuencia que todav¨ªa est¨¦ por conocerse la verdadera magnitud del problema. Se necesita voluntad pol¨ªtica y visi¨®n de futuro de los gobiernos y donantes para demostrar que la inversi¨®n para aumentar la capacidad de an¨¢lisis de la calidad de los medicamentos a trav¨¦s de organismos gubernamentales y polic¨ªa podr¨ªa ahorrar mucho dinero. Ahora mismo esto no parece ser una prioridad debido a su alto costo.
Los inspectores de farmacia en muchos pa¨ªses en desarrollo no tienen los instrumentos necesarios para detectar y analizar adecuadamente las medicinas de calidad dudosa. Es urgente y necesario que las nuevas t¨¦cnicas lleguen a estos pa¨ªses, que les resulten accesibles y, como ha ocurrido en pa¨ªses m¨¢s ricos, que tengan el poder necesario para que la inspecci¨®n rutinaria de medicinas figure entre las m¨¢s altas prioridades de salud p¨²blica.
Con el objetivo de entender la prevalencia de medicamentos falsos y adulterados a nivel global y estudiar el impacto de estos medicamentos en la resistencia y, por lo tanto, en la salud de los pacientes, el Grupo cient¨ªfico de WWARN, ya realiz¨® una extensa revisi¨®n bibliogr¨¢fica para conocer la epidemiolog¨ªa de estos medicamentos y a trav¨¦s de bases de datos represent¨® la informaci¨®n online. La aplicaci¨®n del mapa llamado AQ Surveyor puede encontrarse en Internet.
AQ Surveyor es la primera base de datos global que compila todos los art¨ªculos p¨²blicamente disponibles sobre la calidad de los medicamentos falsos contra la malaria de los ¨²ltimos 60 a?os. El equipo cient¨ªfico mantiene la esperanza de que esta herramienta pueda servir como una seria llamada de atenci¨®n sobre este escandaloso problema.
Patricia Tabernero es miembro de la WorldWide Antimalarial Resistance Network (WWARN), Universidad de Oxford, Reino Unido.
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