Aprovechar al m¨¢ximo una mayor ayuda
Por primera vez tenemos los medios para sacar de la pobreza extrema a todo el mundo Hay suficiente dinero. Es crucial que lo usemos m¨¢s inteligentemente
Los esfuerzos para erradicar la pobreza mundial son los m¨¢s intensos que se hayan desplegado jam¨¢s. En 2014, por segundo a?o consecutivo, la asistencia oficial para el desarrollo (AOD) alcanz¨® un r¨¦cord hist¨®rico de 135.000 millones de d¨®lares, de acuerdo con nuevos datos emitidos por la OCDE. Esto indica que las econom¨ªas avanzadas mantienen su compromiso de promover el desarrollo global, a pesar de sus propios problemas actuales.
Sumemos a este total el gasto significativo de China, los Estados ¨¢rabes y pa¨ªses latinoamericanos mediante inversiones y cr¨¦ditos, y se nota claramente que los flujos de AOD hacia el mundo en desarrollo han alcanzado niveles sin precedentes. Con todo, no se debe permitir que el optimismo generado por estos datos titulares opaquen las oportunidades de canalizar estos fondos de manera m¨¢s eficaz.
La AOD de pa¨ªses donantes ha ayudado a reducir a la mitad la pobreza extrema y la mortalidad infantil, y tambi¨¦n ha sido motor de progreso en muchos otros frentes. Sin embargo, est¨¢ cada vez m¨¢s claro que los flujos sostenidos de asistencia al desarrollo no ser¨¢n suficientes para erradicar la extrema pobreza para 2030 y poner en pr¨¢ctica los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, cuyo consenso se deber¨¢ hacer m¨¢s adelante en el a?o.
El dinero que hoy se gasta en asistencia podr¨ªa tener un impacto sustancialmente mayor si se usara para movilizar flujos fiscales internos e inversi¨®n privada en pa¨ªses dependientes de asistencia. Este uso de la AOD se puede capturar mejor en el nuevo indicador lanzado el 8 de abril por la OCDE: ayuda oficial total para el desarrollo.
Los pa¨ªses en desarrollo obtienen de media el 17% de su PIB mediante recaudaci¨®n fiscal, en comparaci¨®n con el 34% en los pa¨ªses de la OCDE. Para algunos pa¨ªses la proporci¨®n es de solo el 10%. Gran parte de las p¨¦rdidas de la recaudaci¨®n fiscal desaparecen en flujos il¨ªcitos que tienen como destino final el extranjero.
?frica pierde alrededor de 50.000 millones de d¨®lares al a?o en flujos il¨ªcitos
Por ejemplo, ?frica pierde alrededor de 50.000 millones de d¨®lares al a?o en flujos il¨ªcitos, mucho m¨¢s de lo que recibe en ayuda para el desarrollo. Posibilitar que los pa¨ªses en desarrollo generen tan solo un 1% m¨¢s del PIB mediante impuestos movilizar¨ªa el doble del dinero que representa la AOD total, y todo se podr¨ªa dirigir hacia la educaci¨®n, la salud, la seguridad o a programas de ayuda efectiva.
Los rendimientos derivados del gasto en el fortalecimiento de los sistemas fiscales pueden ser impresionantes. En Kenia, el proyecto dirigido por la OCDE, Inspectores fiscales sin fronteras, mostr¨® que cada d¨®lar gastado en trabajar con las autoridades para impedir la evasi¨®n fiscal resulta en 1.290 d¨®lares m¨¢s en ingresos fiscales. De igual manera, en Filipinas, los 500.000 d¨®lares destinados a apoyar la reforma fiscal produjeron m¨¢s de mil millones de d¨®lares adicionales en recaudaci¨®n fiscal. Con todo, actualmente solo el 0,1% del total de la ayuda para el desarrollo, poco menos de 120 millones de d¨®lares, se destina al fortalecimiento de los sistemas fiscales en pa¨ªses en desarrollo.
Si se canaliza adecuadamente, la ayuda para el desarrollo tambi¨¦n ofrece el potencial de movilizar la inversi¨®n privada si se gasta en reducir el riesgo. Las garant¨ªas, pr¨¦stamos en condiciones favorables e inversiones de capital respaldadas con ayuda para el desarrollo pueden contribuir a atraer inversionistas, como ocurri¨® con los proyectos de energ¨ªa solar en Mali y las plantas de manufactura en Etiop¨ªa. En 2014, el entonces Comisario de Desarrollo de la Uni¨®n Europea, Andris Piebalgs, inform¨® que la cantidad total destinada a programas de ayuda, de 2,1 mil millones de euros (2,2 mil millones de d¨®lares), hab¨ªa ¡°logrado un apalancamiento estimado de 40,7 mil millones de euros en 226 proyectos desde 2007¡±.
En Kenia, cada d¨®lar gastado en impedir la evasi¨®n fiscal resulta en 1.290 d¨®lares m¨¢s en ingresos fiscales
Es importante tambi¨¦n destinar la ayuda a ¨¢reas donde m¨¢s se necesita. Incluso cuando esta se mantuvo en niveles hist¨®ricos el a?o pasado, los fondos hacia los pa¨ªses menos desarrollados, en realidad, cayeron. Programas a largo plazo en pa¨ªses m¨¢s pr¨®speros recibieron mayores cantidades de dinero, mientras que los candidatos m¨¢s pobres, una vez m¨¢s, fueron ignorados.
Cuando los dirigentes mundiales se encuentren en Addis Abeba en julio para la Cumbre de financiamiento de desarrollo sostenible, tendr¨¢n que acordar dirigir la ayuda a aquellos pa¨ªses que tienen menos acceso a otras fuentes de financiaci¨®n, m¨¢s dificultades para atraer inversionistas y sistemas fiscales m¨¢s d¨¦biles. Los grupos vulnerables como las minor¨ªas ¨¦tnicas y religiosas o las poblaciones ind¨ªgenas rurales que est¨¢n luchando para romper el c¨ªrculo de pobreza deben recibir atenci¨®n especial.
Los 29 pa¨ªses miembros del Comit¨¦ de Asistencia para el Desarrollo de la OCDE han prometido revertir la disminuci¨®n de la ayuda a los pa¨ªses m¨¢s pobres del mundo. Estos donantes tambi¨¦n han prometido cumplir el objetivo de las Naciones Unidas de inveritr al menos el 0,15% de su PIB en ayuda para el desarrollo. Asimismo, han acordado nuevas reglas que permitir¨ªan canalizar m¨¢s recursos bajo condiciones m¨¢s flexibles a los pa¨ªses m¨¢s pobres y poner en aplicaci¨®n nuevas salvaguardias para asegurar la sostenibilidad de la deuda.
Somos la primera generaci¨®n en la historia de la humanidad con los medios para sacar de la pobreza extrema a todas las personas del planeta. Hay suficiente dinero en el mundo. Es crucial que lo usemos m¨¢s inteligentemente.
Traducci¨®n de Kena Nequiz
?ngel Gurr¨ªa es Secretario General de la OCDE, fue titular de las Secretar¨ªas de Relaciones Exteriores y de Hacienda de M¨¦xico.
Erik Solheim, ex Ministro de Desarrollo Internacional de Noruega, preside el Comit¨¦ de Asistencia para el Desarrollo de la OCDE.
Copyright: Project Syndicate, 2015. www.project-syndicate.org
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.