?Que se busquen la vida!
?Evita cualquier sufrimiento y tropiezo a sus hijos? Si ha contestado s¨ª, reflexione. Un exceso de protecci¨®n puede crear adultos inseguros y dependientes
Padres y madres tenemos la mala costumbre, y en Espa?a es muy com¨²n, de sobreproteger a nuestros hijos. Miedo a que sufran, a que no sean capaces o a que se sientan frustrados y hundidos por no alcanzar sus metas con autonom¨ªa son algunas de las causas que se esconden detr¨¢s de esta actitud. El sufrimiento de los hijos se convierte en el de los padres, que llegan a sentir angustia, malestar general, excesiva preocupaci¨®n, anticipaciones catastr¨®ficas de las desgracias e infelicidad de su prole.
Hay padres que adem¨¢s tratan de evitar que sus descendientes vivan experiencias que ellos s¨ª experimentaron de peque?os o adolescentes. Pero ni las circunstancias son las mismas ni la persona a la que educa es su clon.
Por este motivo, muchos progenitores tratan de allanar el camino a sus hijos con tal de evitar su sufrimiento, lo que es una de las peores lacras desde el punto de vista de la psicolog¨ªa. Hacerlo evita el aprendizaje, impide que la persona explore nuevas emociones, que se encuentre ante dilemas interesantes para resolver o retos a los que buscar soluciones. Cada vez que evitamos a nuestros hijos una situaci¨®n que pensamos que puede hacerles pasarlo mal, les estamos negando una oportunidad de crecimiento personal, una manera de explorar sus l¨ªmites e impedimos que descubran lo capaces que son.
Ejemplos existen cientos, desde ayudarlos a hacer los deberes para que terminen antes o porque pensamos que no lo har¨¢n solos, a servirles la comida para que no la derramen, no dejarles que se ensucien o se caigan en ning¨²n momento cuando juegan o defenderlos de profesores, amigos o comentarios sin contrastar ni dudar de sus palabras. Sobreproteger es impedir que los hijos exploren las consecuencias de no ser responsables, y justamente son los resultados de lo que hacemos o no los que realmente motivan los cambios.
El arte de ense?ar es el arte de ayudara descubrir¡±
Mark Van Doren
Los l¨ªmites de la sobreprotecci¨®n est¨¢n en cuidarlos ¡°demasiado¡±, evitando as¨ª que se enfrenten de forma natural a los problemas que s¨ª tienen que vivir, a las soluciones que ellos tienen que buscar y las consecuencias propias de cada acto. No se trata de promover una conducta temeraria por parte de los padres y dejar que se enfrenten a responsabilidades impropias de la edad, sino de no educar en una burbuja en la que se encuentren falsamente seguros y al margen de una realidad que educa para la vida, la presente y la futura.
Lo que nunca puede perder de vista su hijo es la sensaci¨®n de seguridad. Si le agreden, alguien le pone en peligro, sus amigos le sugieren actividades peligrosas o fuera de lugar para su edad, tiene que sentir la tranquilidad de que sus mayores le van a aconsejar, poner l¨ªmites y proteger f¨ªsica y moralmente.
Los ni?os que se han educado demasiado a resguardo tienen mayores problemas en el futuro para enfrentarse a emociones b¨¢sicas como son la frustraci¨®n, el miedo, la ansiedad o la tristeza, que deben aprender a gestionar. Nuestros hijos, en un futuro, tienen que llorar el desamor, sufrir una equivocaci¨®n en su puesto de trabajo, la cr¨ªtica de su jefe, la soledad del que empieza una vida independiente, la p¨¦rdida de un ser querido y el amigo que deja de serlo porque le falla. Gestionar de forma eficaz estos sentimientos forma parte del crecimiento personal de todos nosotros. Si se evitan estas situaciones a nuestros hijos con el fin de que no sufran, no estar¨¢n preparados para ser adultos maduros y emocionalmente responsables. Puede incluso que generemos una sociedad de personas socialmente dependientes, ¡°personas mantequilla¡±, que, a la primera adversidad, se derriten.
Estos ni?os pueden mostrar m¨¢s miedo, inseguridad, tiran¨ªa y exigencias dado que est¨¢n acostumbrados a que les sirvan y les resuelvan todo, tienen menos capacidad de esfuerzo, son m¨¢s ap¨¢ticos y vagos. Analicemos cinco ventajas de ¡°buscarse la vida¡±:
1 Educar en la responsabilidad. Deje que se quede sin ropa limpia y planchada que ponerse. Los chavales van acumulando en la silla de su dormitorio y usted repite cada d¨ªa que la eche en el cesto de la ropa sucia. Hasta que un d¨ªa usted comprueba que apenas le queda ropa en el armario y hace su trabajo. Tampoco escriba una nota disculpando las tareas que su hijo no ha hecho en casa por evitarle una rega?ina de un profesor. Hasta que los ni?os no se exponen a las consecuencias de ser irresponsables, no tienen la necesidad de cambiar. ?Para qu¨¦, si no hacer las cosas no tiene consecuencias?
Confucio
2 Fomentar la autonom¨ªa. Que dependan de ellos mismos para resolver problemas y buscar soluciones en la vida en general. Si no les dejan hacerlo, deducen que el esfuerzo lo tienen que realizar los padres y que son ellos los que deben adivinar qu¨¦ necesitan.
3 Fomentar el emprendimiento. Imagine que su hijo preadolescente o adolescente le pide dinero para hacerle un regalo a su madre o padre en su cumplea?os. Se lo da y, adem¨¢s, se siente afortunado de tener un hijo detallista. En lugar de facilitarle el dinero, prop¨®ngale un plan de negocio. ?Quieres dinero? Dime c¨®mo vas a ganarlo. No se trata de educar en el materialismo, sino de ser creativos, tener ideas y obtener un beneficio por ellas. Queremos educar para que sean emprendedores, atrevidos, se arriesguen, para que no dependan de otros en el futuro, pero a la primera de cambio, les solucionamos un aspecto econ¨®mico tan sencillo. Puede que si le incita a montar un negocio casero, empiece a cambiar su mentalidad. Igual le da un masaje y cobra un dinerito, o le ayuda a preparar una presentaci¨®n para su trabajo si es un crack de la inform¨¢tica, o le propone llevar a su hermano peque?o a una actividad. Deje que discurra y le ofrezca ideas. De todas formas, al final le facilitar¨¢ el dinero, pero habr¨¢ tenido que pensar y esforzarse para ganarlo.
4 Desarrollar su autoestima. La persona que se involucra en su desarrollo, que invierte esfuerzo en conseguir sus metas, que tropieza y se vuelve a levantar y al final lo consigue, se valora de forma positiva. La lectura que saca de s¨ª misma es ¡°yo puedo a pesar de la adversidad, puedo y lo consigo¡±.
5 Trabajar su seguridad y confianza. Quienes se han educado para resolver situaciones y lo han logrado saben que tienen recursos. Muchos hombres y mujeres se califican como ¡°buscavidas¡±. Son aquellos que saben que, pase lo que pase, ser¨¢n capaces de sobrevivir.
Para conectarnos
Pel¨ªcula
Madre e hijo (La mirada del hijo)
Calin Peter Netzer
Drama en el que una madre asfixiante impide el correcto desarrollo de su hijo.
Libro
The NurtureShock
Po Bronson y Ashley Merryman
Canci¨®n
Esos locos bajitos
Joan Manuel Serrat
Si desea ir soltando la cuerda y permitiendo que se caiga, que se equivoque, que viva las emociones adecuadas, no olvide que dar mimos, mucho amor y seguridad no est¨¢n re?idos con el concepto de sobreprotecci¨®n. El cari?o es ofrecer amor incondicional en forma de besos, achuchones, abrazos, miradas c¨®mplices, estar incondicionalmente ah¨ª. Pero se puede hacer interviniendo y anticip¨¢ndose o situ¨¢ndose a la espera de que le pregunten. Y aun as¨ª, si lo estima oportuno, no tiene por qu¨¦ dar la soluci¨®n. Deje que ellos la encuentren. Aprender¨¢n a disfrutar y a sentirse orgullosos de sus logros si se sienten protagonistas de ellos.
Si tiene dudas sobre la tarea que tiene que realizar su hijo solo o sobre si est¨¢ siendo sobreprotector, h¨¢gase estas preguntas: ?esto lo deber¨ªa saber hacer mi hijo?; ?es algo que, con un poco de esfuerzo y perseverancia, podr¨ªa conseguir si yo no intervengo?; ?si le expongo a la posibilidad de no conseguirlo o que se quede sin hacer, las consecuencias son peligrosas para ¨¦l o solo inc¨®modas? (como que le llamen la atenci¨®n en el colegio si no lleva la tarea); ?ayudarle en esto se ha convertido ya en un h¨¢bito c¨®modo por parte de mi hijo?; ?qu¨¦ beneficios tiene para ¨¦l o ella que yo le resuelva esta situaci¨®n?; ?son los beneficios m¨¢s adecuados que las desventajas que conllevan?
Recuerde que cada vez que sobreprotege a su hijo le impide que entrene una nueva destreza. Uno de los aprendizajes m¨¢s importantes es el que se basa en el ensayo y error. Casi todo lo que aprendemos y automatizamos en esta vida es fruto del ensayo y de la repetici¨®n, desde las jugadas que realizamos cuando practicamos f¨²tbol a la capacidad de organizaci¨®n necesaria para que d¨¦ tiempo a hacer los deberes por la tarde. Si usted resuelve las cosas por ellos, terminar¨¢ por educar a alguien in¨²til en las tareas de la vida cotidiana y tendr¨¢ un autoconcepto negativo. Pensar¨¢: ¡°Yo no s¨¦, yo no puedo¡±. Tenga cuidado, en su af¨¢n por ser padres perfectos terminar¨¢n por educar hijos in¨²tiles.
Su hijo es maravilloso y para usted como padre es el m¨¢s guapo, el m¨¢s h¨¢bil, el m¨¢s ¨¢gil e inteligente. Pero si solo se acostumbra a que lo elogie cada d¨ªa, sin hacer el esfuerzo necesario para ganarse el halago, necesitar¨¢ constantemente su dosis de endiosamiento para sentirse bien y seguro. Necesita fracasar, aprender que es estupendo en muchos aspectos, pero saber tambi¨¦n que tiene ¨¢reas de mejora que entrenar.
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