¡°Todav¨ªa echo de menos cosas de mi padre¡±
Francisco Rivera Ord¨®?ez es un torero a una exclusiva pegado muy a su pesar y tambi¨¦n un empresario a ratos perdidos. Hombre anuncio, ha vuelto a los ruedos por ¡°necesidad vital¡±
En el ¨¢rbol geneal¨®gico de Francisco Rivera Ord¨®?ez hay diez toreros, as¨ª que por edad (41), ahora le corresponde tomar el relevo de tan impresionante dinast¨ªa y representar el papel de cabeza de cartel. De hecho, ha regresado a los ruedos este a?o. Sin embargo, los avatares de su vida familiar le han convertido en permanente objetivo de la prensa: es un hombre a una exclusiva pegado. Al p¨²blico en general le cuesta distinguir si es un torero famoso o un famoso que adem¨¢s es torero. Alg¨²n beneficio tiene esta contradicci¨®n, porque de paso se ha convertido en hombre anuncio, ahora para la firma de relojes Seiko. Por el camino, tambi¨¦n es empresario. La entrevista se realiza de pie en la barra del bar de un restaurante por razones que no vienen al caso: no se aprecia incomodidad en el entrevistado, detalle que evidencia que es un torero muy toreado en estas lides.
Pregunta. Se retira en 2012 y regresa en 2015. Conclusi¨®n: en tres a?os, arruinado.
Respuesta. En mi caso, a Dios gracias, vuelvo porque lo echaba mucho de menos. Era una necesidad m¨ªa vital. No estoy completo si no cumplo mi ciclo en la plaza. Necesito hacer la vida de torero que es lo que a m¨ª me gusta, y ah¨ª consigo la felicidad plena.
P. ?Realmente cree que puede aportar algo al toreo?
R. No. Lo que vengo es a realizar mis sue?os, los que he tenido tantas noches. Creo que todav¨ªa puedo luchar por realizar esa faena que he so?ado tantas veces y conseguir vivir otra vez esas emociones que solo se viven en el toro.
P. A los 41 a?os, ni es un torero joven que aporte frescura ni tan viejo como para que se le reconozca sabidur¨ªa.
R. Son 20 a?os. La experiencia no solo la dan los a?os sino los toros que toreas. He toreado m¨¢s de 1.000 corridas. Esa experiencia tiene que servir para algo ?no?.
P. ?Plazo para la retirada?
R. Me he planteado torear este a?o para celebrar mis 20 a?os de alternativa.
P. ?Hace planes?. ?Se sit¨²a con 50 a?os?
R. No hago planes de una semana para otra, as¨ª que... Lo que s¨ª me veo es en el campo tranquilito.
P. Se calific¨® como emprendedor. Descr¨ªbalo mejor: ?inversor o empresario?
R. Soy m¨¢s empresario que inversor. En lo que me meto me gusta meterme de lleno y ser part¨ªcipe de la creaci¨®n, como inversor puro y duro me he visto en alguna, pero no me llena.
P. ?Y alguna empresa ha tenido ¨¦xito?
R. El ¨²ltimo proyecto que hemos culminado es la Lonja del Barrranco de Sevilla.
P. ?Ha creado empleo?
R. Mucho empleo.
P. ?Cu¨¢nto es mucho empleo?
R. Directos son 80 puestos de trabajo. Y los indirectos, pues se me va.
P. Si de verdad es empresario, tendr¨¢ una opini¨®n sobre la crisis.
R. La crisis es una realidad. Tiene que servir para afianzar las empresas o para redirigirlas. Cuando todo va bien, se abusa. Hoy en d¨ªa hay que usar la imaginaci¨®n.
P. Ya, pero los sueldos son m¨¢s bajos.
R. Pues hay que trabajar m¨¢s.
P. Su vida privada es un hecho inevitable, pero al mismo tiempo le da fama y le permite ser un hombre anuncio. Entiendo que est¨¦ harto, pero le reporta beneficios.
R. Quiero pensar que por lo que soy famoso es porque soy torero no por mi vida privada. Cuando eres un personaje p¨²blico est¨¢s expuesto y tu vida privada puede interesar, pero lo que soy es torero. He empezado una profesi¨®n y la lucho cada d¨ªa.
P. ?Controla su imagen?
R. Todos estamos preocupados por nuestra imagen desde que salimos de casa y nos ponemos una camisa que vaya acorde con tu personalidad. Mi imagen no siempre la puedo controlar, una vez que entras en ese circuito rosa pues ya la dejas de controlar y parece que vale todo, la manipulan, juegan con ella, es complicado.
P. Me sorprendi¨® saber que la noche anterior a su boda con la hija de la duquesa de Alba, su madre (Carmen Ord¨®?ez) le recomend¨® que se escapara y huyera, que ella se encargar¨ªa de dar la cara por usted.
R. Es el sexto sentido de las madres, eso solo lo tienen las madres. Y as¨ª fue.
P. ?Y no se lo reproch¨® despu¨¦s?
R. Mi madre para nada era rencorosa en ning¨²n sentido. Al rev¨¦s, fui yo quien dijo:? 'qu¨¦ raz¨®n tenias. Nunca jam¨¢s'.
P. Tambi¨¦n sorprende que no pueda llevar a las corridas ning¨²n recuerdo de su padre, ni un triste capote. (Isabel Pantoja no reparti¨® algunas de esas pertenencias).
R. Tengo algunos, pero muy poquitos. Echo de menos tener cosas de mi padre. De hecho lo sigo echando de menos.
Acostumbrado a controlar sus respuestas (y sus emociones), de tan entrevistado como est¨¢, ese, "de hecho lo sigo echando de menos¡±, por fin le delata.
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