¡°El mundo tiene que ir m¨¢s r¨¢pido para solucionar el cambio clim¨¢tico¡±
Steven Chu, Nobel de F¨ªsica y ex secretario de Energ¨ªa de EE UU, habla del futuro de las renovables y de los retos tecnol¨®gicos para dejar atr¨¢s los combustibles f¨®siles
A Steven Chu (Saint Louis, EE UU, 1948) cualquier definici¨®n se le queda corta. Recibi¨® el premio Nobel de F¨ªsica en 1997 por desarrollar, en los famosos laboratorios Bell (un criadero de premios Nobel y otros prestigiosos reconocimientos cient¨ªficos), ¡°m¨¦todos para enfriar y atrapar ¨¢tomos con luz laser¡±. Tambi¨¦n fue director del departamento de energ¨ªa de los laboratorios nacionales Lawrence Berekley entre 2004 y 2009; profesor de f¨ªsica, y de biolog¨ªa molecular y celular en la Universidad de California, y tambi¨¦n secretario de Energ¨ªa del presidente Barack Obama entre 2009 y 2013. Fue el primer galardonado con el Nobel en ser nombrado?ministro en EEUU. Con 10 patentes y m¨¢s de 250 art¨ªculos cient¨ªficos publicados, Chu sigue liderando un grupo de investigaci¨®n interdisciplinar en la Universidad de Stanford (cerca de San Francisco, California).
Los galardonados con el Premio Nobel suelen dividirse en tres grupos: Los que pasan el resto de su vida hablando de s¨ª mismos y de la investigaci¨®n que les ha llevado a ganar el reconocimiento m¨¢s cotizado en el mundo cient¨ªfico; los que se dedican a defender causas m¨¢s o menos dignas; y los que siguen haciendo investigaci¨®n puntera. Representantes de los tres grupos participaron entre el 28 junio y el 3 julio en el encuentro de Premios Nobel en la isla de Lindau, en el lago de Constanza en Alemania que este a?o reuni¨® a 65 premios Nobel y m¨¢s de 700 j¨®venes investigadores.
Steven Chu sin duda pertenece al grupo de los laureados m¨¢s activos. Dio una atestada charla a los j¨®venes cient¨ªficos, fue ponente en varios debates y fue uno de los principales promotores de la Declaraci¨®n de Mainau sobre el cambio clim¨¢tico que cerr¨® la cumbre de este a?o. A pesar de su apretado programa, dedic¨® m¨¢s de una hora y media a atender a las preguntas de los medios internacionales, ente ellos EL PA?S.
El tiempo ha cambiado: no es nuestra imaginaci¨®n, es estad¨ªsticamente cierto"
El cambio clim¨¢tico est¨¢ en el centro de sus preocupaciones, cient¨ªficas y pol¨ªticas. ¡°Estoy cada vez m¨¢s preocupado porque el mundo no se est¨¢ moviendo suficientemente r¨¢pido¡±, explica. ¡°Es cierto que en los ¨²ltimos 35 a?os el tiempo ha cambiado: no es nuestra imaginaci¨®n, es estad¨ªsticamente cierto. La temperatura ha subido solo medio grado en estos 35 a?os, y menos de un grado desde el principio de la revoluci¨®n industrial. Pero si en las pr¨®ximas d¨¦cadas la temperatura sube de dos grados con respecto a antes de la revoluci¨®n industrial, las consecuencias podr¨ªan ser muy graves. En la ¨²ltima edad del hielo la temperatura era solo 5 o 6 grados m¨¢s baja, y el mundo era muy diferente: el hielo cubr¨ªa buena parte de Europa y EEUU. Hay que entender que, si la temperatura aumenta en 4 o 5 grados ¨C tenemos 20% de probabilidad de que pase ¨C eso trasformar¨ªa nuestro mundo y lo har¨ªa much¨ªsimo m¨¢s hostil para dos tercios de la poblaci¨®n mundial¡±.
Pregunta. ?Qu¨¦ puede hacer EE UU al respecto?
Respuesta. Jugaremos un papel fundamental. El presidente est¨¢ intentando moverse en esta direcci¨®n lo m¨¢ximo posible. Sin embargo, la cuesti¨®n es que cada a?o la energ¨ªa mueve alrededor de mil millones de d¨®lares: producimos petr¨®leo y gas, y tenemos carb¨®n. La industria de la energ¨ªa gana mucho dinero, y eso genera un conflicto. Nos comprometimos a reducir antes de 2025 el 28% de nuestras emisiones, con respecto al pico de 2005. Es un objetivo razonable y alcanzable porque podemos sustituir el carb¨®n por el gas, que tiene menos impacto medioambiental. Adem¨¢s, ahora estamos impulsando las energ¨ªas renovables (sol y viento): junto con la hidroel¨¦ctrica, ahora se produce un 11% de la energ¨ªa de esta manera. Algunos estados, como California, son l¨ªderes y tienen objetivos muy ambiciosos, como el de alcanzar el 80% de renovables en 2050. Los otros les seguir¨¢n, como siempre pasa en EE UU. Los republicanos en el Congreso no quieren apoyar las renovables. Sin embargo, la tecnolog¨ªa va mejorando y las cosas se mover¨¢n por su cuenta.
P. ?Cu¨¢l ser¨¢ el efecto de la ca¨ªda de los precios del petr¨®leo para las renovables?
R. Es dif¨ªcil prever c¨®mo cambiar¨¢n los precios en el futuro. Hace unos a?os, aunque hab¨ªa se?ales claras de que est¨¢bamos produciendo demasiado petr¨®leo, los precios se mantuvieron elevados durante mucho tiempo. Adem¨¢s, desde 2005 EE UU produce m¨¢s de cinco millones de barriles de crudo al d¨ªa, m¨¢s que cualquier otro pa¨ªs exceptuando a Arabia Saud¨ª [hoy EEUU alcanza casi diez millones de barriles al d¨ªa]. El precio influir¨¢ el tema del transporte; hacer los biocombustibles m¨¢s baratos ser¨¢ dif¨ªcil. Pero no afectar¨¢ mucho a la producci¨®n de electricidad. Muy pocos pa¨ªses usan petr¨®leo para la electricidad, ya que el gas es m¨¢s barato. Aparte del coste del gas, el otro factor clave para la producci¨®n de electricidad es que las renovables, sobre todo el solar, cuestan cada vez menos.
P. Las renovables hoy son subvencionadas
Si se obtuviera una bater¨ªa que pesara 100 kilos, menos de un motor actual, durara 500 kil¨®metros y se cargara? en unos minutos, ?eso s¨ª que cambiar¨ªa el mercado!
R. S¨ª, pero dentro de unos a?os no lo necesitar¨¢n. Excepto por un aspecto. Mientras se produzca 10% o 15% de la energ¨ªa con las renovables, no pasa nada. Si se llega al 50% o m¨¢s, el coste de un nuevo sistema de distribuci¨®n, de almacenamiento o del sistema de alimentaci¨®n complementario tambi¨¦n entra a formar parte del coste de las renovables que se tendr¨¢ que tener en cuenta. La buena noticia es que el precio de las renovables ser¨¢ tan bajo que incluso ser¨¢ competitivo si el gas se mantiene en su precio actual, su m¨ªnimo hist¨®rico.
P. H¨¢bleme del problema del almacenamiento
Cuando se llegue a producir un 50% de la energ¨ªa con el sol y el viento, el problema de c¨®mo almacenar esta energ¨ªa se har¨¢ importante. Las bater¨ªas para el almacenamiento o las de los coches est¨¢n mejorando mucho. Con el solar, se genera energ¨ªa sobre todo a mitad del d¨ªa, mientras el pico de utilizaci¨®n es entre las 4 y las 9 de la tarde. Durante la pr¨®xima d¨¦cada seremos capaces de gestionar este desplazamiento temporal de forma econ¨®mica. Lo que las bater¨ªas no podr¨¢n hacer todav¨ªa es almacenar durante un mes, o del verano hasta el invierno. Para eso necesitaremos una tecnolog¨ªa electroqu¨ªmica m¨¢s puntera, que transforme el viento en un carburante qu¨ªmico, por ejemplo el hidr¨®geno.
P. ?Cu¨¢les son las tecnolog¨ªas m¨¢s punteras hoy para el almacenamiento?
Hay que decir que ya existe una forma f¨¢cil de almacenar energ¨ªa: si la usas, no importa que no haya sol y viento. Se trata de bombear el agua: lo hacemos desde hace 200 a?os. Cuando hay sol y viento, bombeas el agua arriba, y la haces caer cuando necesitas la energ¨ªa. Hoy en d¨ªa existen varios ejemplos m¨¢s sofisticados, ya que la energ¨ªa nocturna es mucho m¨¢s barata y hay un excedente. Un ejemplo es una planta de cogeneraci¨®n en Tejas que durante la noche utiliza su exceso de energ¨ªa para enfriar el agua que se utiliza para el aire acondicionado de d¨ªa. Es un mecanismo un poco raro para almacenar energ¨ªa, pero es m¨¢s eficiente y hace ahorrar mucho dinero ¨C y la energ¨ªa tiene todo que ver con el dinero.
Luego hay otros tipos de pilas, para m¨®viles o autom¨®viles. La qu¨ªmica del litio que actualmente se utiliza por ejemplo para los m¨®viles ha hecho muchos avances. No nos hemos dado cuenta porque las han hecho m¨¢s peque?as y los m¨®viles hacen m¨¢s cosas; aun as¨ª, la eficiencia por unidad de volumen ha mejorado tres o cuatro veces. Sin embargo, lo que no ha mejorado es la eficiencia por unidad de peso, lo cual es muy importante para los coches. Una bater¨ªa de Tesla pesa unos 500 kilos, cuesta 30.000 d¨®lares y tiene una autonom¨ªa de 120 kil¨®metros. Si se obtuviera una bater¨ªa que pesara 100 kilos, es decir menos de un motor actual, llegara a 500 kil¨®metros y se cargara cinco o diez veces m¨¢s r¨¢pido, en unos minutos, ?eso s¨ª que cambiar¨ªa el mercado! Nosotros estamos trabajando en algo parecido, pero tardaremos m¨¢s de un a?o en saber si puede funcionar, luego habr¨ªa que desarrollarla y hacer todos los test para saber si es segura para ponerla en un coche. Si funciona, habr¨¢ que esperar unos siete u ocho a?os para verla en el mercado. En todo caso, hay muchos investigadores que trabajan con objetivos similares. Las bater¨ªas para el desplazamiento del pico de producci¨®n energ¨¦tica diaria son menos complejas porque no tienen que resistir a un posible impacto, y ya se est¨¢n experimentando con algunas. El hecho de que California se haya empe?ado en comprar una buena cantidad de esta bater¨ªas har¨¢ que vayamos mejorando el proceso de producci¨®n y por lo tanto las abaratemos. ?Yo creo que en 10 a?os tendremos una buenas bater¨ªas!
Espa?a tiene muy buen sol y viento, el problema principal es de geopol¨ªtica energ¨¦tica
P. Espa?a ha abandonado la inversi¨®n en renovables
El problema principal de Espa?a es de geopol¨ªtica energ¨¦tica. Francia no tiene ning¨²n inter¨¦s en que entren en el sistema las renovables baratas porque tiene nuclear, y lo quiere vender. Espa?a, as¨ª como Portugal, tiene muy buen sol y viento. Pero si produces electricidad as¨ª, es necesario poderla dispersar en el sistema y utilizarla lo m¨¢ximo posible cuando hay sol y viento. Europa tiene que ser capaz de superar los intereses locales, y empezar a producir energ¨ªa renovable all¨ª donde cueste menos para luego hacerla traspasar las fronteras, para poder beneficiar a la econom¨ªa europea. Adem¨¢s, si se hiciera as¨ª, la transici¨®n ser¨¢ mucho menos cara.
P. ?Qu¨¦ papel juega la energ¨ªa nuclear?
No estoy seguro de que construyamos centrales nucleares de nueva generaci¨®n. No sabemos hacerlo ni en el plazo ni con el presupuesto previstos, como est¨¢ pasando ahora en Finlandia y en Francia. El coste nominal era de entre 6.000 y 8.000 millones de d¨®lares por gigavatio. Sin embargo, de momento el precio ha subido hasta 20 mil millones de d¨®lares. Es un agujero financiero del cual es imposible recuperarse en los 60 a?os que podr¨ªa durar la central.
P. ?Y el tema de los residuos?
Yo creo que eso es un problema solucionable. La gente est¨¢ preocupada porque no quiere un cementerio nuclear a lado de casa, y en un pa¨ªs peque?o esto es un problema m¨¢s grande. Pero EEUU es un pa¨ªs lo suficientemente grande para que eso no sea un problema. Sin embargo, tuvimos un gran debate pol¨ªtico sobre el sitio que se identific¨® para almacenar los residuos, la Yucca Mountain. No era un sitio ideal, ya que se dieron cuenta de que goteaba agua en los t¨²neles, y esto no es buena se?al para evitar infiltraciones. Se pens¨® construir un escudo de titanio de 8.000 millones de d¨®lares, que ten¨ªa que tener una garant¨ªa de durabilidad de 10 mil a?os. Los humanos no han construido nunca algo que durase tanto. Y encima la Corte Suprema decidi¨® que deber¨ªa tener una garant¨ªa contra los goteos de un mill¨®n de a?os, una locura. Pero el problema es que la gesti¨®n fue pol¨ªtica desde el principio, ya que hay otros sitios mucho mejores.
P. Pero, ?realmente necesitamos el nuclear?
Yo preferir¨ªa que tuvi¨¦ramos otra generaci¨®n de reactores nucleares. Eso conllevar¨ªa 10 a?os para construirlos, m¨¢s 60 de operatividad, y eso nos llevar¨ªa a un momento en el que ya no los necesitar¨ªamos para la transici¨®n energ¨¦tica. En 2085 ya sabremos c¨®mo convertir una energ¨ªa renovable en hidr¨®geno y distribuirlo por todo el mundo.
El hecho de que fuera un cient¨ªfico en activo y tuviera un Nobel me ayud¨® a no decir tonter¨ªas
P. ?En qu¨¦ le ayud¨® ser un cient¨ªfico de renombre cuando fue pol¨ªtico?
El hecho de que fuera un cient¨ªfico en activo y tuviera un Nobel me ayud¨® a no decir tonter¨ªas. Soy bastante moderado. No dir¨ªa cosas como que en 20 a?os podemos producir el 100% de la energ¨ªa con las renovables, ni, al contrario, que las renovables no ser¨¢n nunca tan baratas como los combustibles f¨®siles. Como cient¨ªfico, s¨¦ que ambas cosas son falsas. Yo intento explicar como est¨¢n las cosas. Sobre el cambio clim¨¢tico no se puede decir: pasar¨¢ esto. Hay una probabilidad que esto pase, y no es insignificante. Hablamos del 20-30-40%. Si hubiera una posibilidad del 20% de que tu casa se queme, ?verdad que comprar¨ªas un seguro? No hace falta estar seguro para tomar medidas.
Adem¨¢s, consegu¨ª traer al ministerio buenos cient¨ªficos que como yo no ten¨ªan intenci¨®n de trabajar en el gobierno. Nunca hab¨ªa sido pol¨ªtico antes, ni hab¨ªa hecho campa?a para nadie. Pero cuando me llam¨® el Presidente, dado que me interesaba el tema del cambio clim¨¢tico, no pude decirle que no. Y creo que es bueno que haya cient¨ªficos en los niveles m¨¢s altos de la administraci¨®n.
Para mi, fue una experiencia de aprendizaje incre¨ªble. Aprend¨ª cosas sobre las nuevas tecnolog¨ªas en este sector, y aprend¨ª a entender mejor las consideraciones econ¨®micas que explican el rechazo de mucha gente, que no son ni est¨²pidos ni malos, simplemente no les conviene. Luego volv¨ª a trabajar en lo que hac¨ªa antes, biolog¨ªa y medicina, y as¨ª he podido demostrar a mis cr¨ªticos que no hab¨ªa perdido la cabeza mientras era ministro. [r¨ªe]
?C¨®mo conciliaba su actividad de cient¨ªfico con su vida pol¨ªtica?
Trabajaba unas 70 horas a la semana. Pero continu¨¦ supervisando unos estudiantes de doctorado y unos postdoc de mi viejo grupo de investigaci¨®n. Escrib¨ªa art¨ªculos con ellos y manten¨ªa reuniones telef¨®nicas con mi grupo. Durante las vacaciones, iba all¨ª y me quedaba una semana en el laboratorio. Dej¨¦ de leer libros o ir al cine. Mi ¨²nico hobby era escribir art¨ªculos cient¨ªficos. Es que me encanta la ciencia y lo que hago. De hecho, yo pr¨¢cticamente no tomo nunca vacaciones. Creo que las m¨¢s largas en a?os ¨Cuna semana con mi mujer¨C fueron justo despu¨¦s de dejar mi trabajo como ministro. Si no, d¨ªas sueltos; la verdad es que no las necesito.
P. Durante su mandado hubo la explosi¨®n de la plataforma petrol¨ªfera Deepwater Horizon en el Golfo de M¨¦xico. Y usted intervino resolutivamente.
Durante del desastre de Deepwater Horizon tuvimos que tomar muchas decisiones en poco tiempo. Un pol¨ªtico no lo habr¨ªa hecho nunca; ellos siempre quieren esconderse detr¨¢s de un comit¨¦
Me lo pidi¨® el Presidente. Esto no entraba en la jurisdicci¨®n del departamento de energ¨ªa, sino en el de interior. Alguien le hab¨ªa dicho que hab¨ªa sugerido utilizar los rayos gamma, que pueden penetrar el acero, para ver qu¨¦ hab¨ªa pasado exactamente, ya que BP no parec¨ªa estar solucionando el problema. Y finalmente parece que mi idea fue aceptada. El Presidente me llam¨® una ma?ana temprano y me dijo: Chu, vete para all¨¢. Le dije que quer¨ªa llevarme un peque?o equipo informal de cient¨ªficos. No quise ning¨²n ingeniero petrol¨ªfero, sino cient¨ªficos conocidos por su capacidad de pensar ¡°fuera de las normas¡± porque lo que estaba pasando all¨ª era totalmente extraordinario. Finalmente conseguimos convencer a BP de trabajar, coordinarse, y discutir con nosotros lo que iban a hacer. Tuvimos que tomar muchas decisiones en poco tiempo. Un pol¨ªtico no lo habr¨ªa hecho nunca; ellos siempre quieren esconderse detr¨¢s de un comit¨¦ [r¨ªe]. A mi no me importaba: soy cient¨ªfico y tomar¨ªa la mejor decisi¨®n posible. Si lo hubiese hecho mal, el Presidente podr¨ªa haberme cesado, perder¨ªa el trabajo pero algo hubiera hecho. Yo creo que estar en una situaci¨®n donde no te da miedo que te despidan te hace tomar mejores decisiones y con m¨¢s sosiego.
P. ?Qui¨¦n le ha influenciado m¨¢s en la vida?
Mis padres, seguramente, y una madre a la que nunca pod¨ªas satisfacer. Mi familia era una familia de gente muy exitosa. De hecho, yo era la oveja negra de los tres hermanos. Mi hermano peque?o cree que es ¨¦l la oveja negra, ah¨ª tenemos un conflicto [r¨ªe]. Mi hermano mayor tuvo las notas m¨¢s altas de la historia de su instituto, fue a Princeton y luego un doctorado en f¨ªsica al MIT y un postdoc en Berkeley. Yo abandon¨¦ el instituto durante tres meses, no quer¨ªa competir con ¨¦l. Volv¨ª, saqu¨¦ unas ¡®B¡¯ en alem¨¢n y por eso no me cogieron ni en Princeton, ni en Yale. He sido el primero de mi familia extensa que no fue ni a Harvard ni a Princeton. Era una oveja as¨ª de negra. Fui a Rochester y me empezaron a ir bien las cosas. Comenc¨¦ a ganar confianza en mi mismo ¨C por ejemplo, dej¨¦ de ir a clase de alem¨¢n. Y cuando empec¨¦ el doctorado encontr¨¦ a un supervisor que admiro hasta la fecha. ?Mi hermano peque?o fue hasta peor! Dej¨® el instituto y no se gradu¨® nunca. Perdi¨® un a?o con amigos alocados, haciendo cosas como acabar en el libro de los Guiness por atravesar todas las estaciones de la red metro de Nueva York tardando dos horas menos que el anterior detentor del r¨¦cord: unas 22 horas. Finalmente fue a la Universidad de Los ?ngeles donde alg¨²n profesor se dio cuenta que ese chico sin estudios ten¨ªa algo especial. Sac¨® un doctorado con 22 a?os, fue a la facultad de derecho de Harvard y hoy es un famoso abogado experto de patentes, y muy rico. ?l es el m¨¢s listo de los tres, yo estoy en el medio, y mi hermano mayor, profesor de bioqu¨ªmica en Stanford, es el menos listo de los tres. S¨ª, una familia terrible en la que crecer.
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