¡°No deber¨ªa de ser tan f¨¢cil aparcar al perro en un albergue y darse la vuelta¡±
No hay excusas para el abandono de mascotas, ni siquiera bajo techo
En tiempo de vacaciones, toca organizar el ansiado tiempo para descansar y pasarlo bien. Por fin libertad de horarios y planes que el resto del a?o no podemos hacer. Pero, ?y Rufo? ?Qu¨¦ hacemos con ¨¦l? El perro nos mira con curiosidad... Recreaciones aparte, las cifras sobre abandono de animales en Espa?a son muy altas: en 2014 perdieron su hogar m¨¢s de 140.000 perros y gatos, seg¨²n el ¨²ltimo estudio de la Fundaci¨®n Affinity, y las protectoras espa?olas recogen un animal cada cinco minutos. Adem¨¢s, el verano ya no es la ¨¦poca cumbre en la que se abandonan las mascotas. ¡°Todo el a?o se produce un goteo continuo de entrada de animales en los albergues, aunque s¨ª se suele notar un incremento en algunos per¨ªodos como en el segundo cuatrimestre, que coincide con el ciclo reproductor de los gatos y entran camadas indeseadas¡±, comenta Isabel Buil, directora de la Fundaci¨®n Affinity.
Un animal nunca se debe abandonar, no solo porque nos lo diga el conocido eslogan ?l nunca lo har¨ªa, existen muchas otras razones.
1. El abandono en la calle est¨¢ penado en Espa?a
Solo un 9% de los perros y gatos que llegan a las protectoras lo hacen acompa?ados de sus due?os, el resto se encuentra en la calle
Isabel Buil, directora de la Fundaci¨®n Affinity
Las leyes de tenencia y protecci¨®n animal de las comunidades aut¨®nomas espa?olas (v¨¦ase Madrid y lo que dice la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico al respecto) recogen como infracci¨®n abandonar en la v¨ªa p¨²blica a un perro o un gato. No obstante, afortunadamente han desaparecido algunas pr¨¢cticas: ¡°Ya no se abre la puerta del coche en la carretera y se deja al perro o al gato tirado, ahora se practica el abandono civilizado, es decir, se lleva al animal a un albergue, donde puede tener la oportunidad de ser adoptado¡±, explica Matilde Cubillo, presidenta de Justicia Animal, que lleva 20 a?os dedicada a recoger perros y gatos abandonados y buscarles un nuevo hogar. Sin embargo, desde la Fundaci¨®n Affinity se?alan que "solo un 9% de los perros y gatos que llegan a las protectoras lo hacen acompa?ados de sus due?os, el resto se encuentra en la calle¡±.
?Y cu¨¢les son las razones que alegan los due?os para dejar a su mascota en un centro de recogida? Seg¨²n el ¨²ltimo estudio de la Fundaci¨®n Affinity, un 16% dice que es por factores econ¨®micos, por camadas no deseadas un 13%, por el comportamiento del animal (12%) o la p¨¦rdida de inter¨¦s por el perro o el gato (9%). Unos datos que corrobora la protectora de animales Huella Canina, que el pasado a?o comprob¨® un incremento en el ingreso de animales en sus instalaciones debido, seg¨²n dec¨ªan sus due?os, a la falta de recursos. Otras protectoras denuncian el lanzamiento de mascotas por la valla del recinto, tambi¨¦n penado por la ley.
2. Rufo y Boby tambi¨¦n se aprietan el cintur¨®n
El gasto medio anual del mantenimiento de un perro asciende a 905 euros y el de un gato ronda los 665 euros. No obstante, esta circunstancia se debe asumir antes de tomar la decisi¨®n de abrir la puerta de nuestra casa a un animal. Las mascotas forman parte de la familia y con algunos sencillos gestos podemos ahorrar gastos en su manutenci¨®n sin renunciar a su calidad de vida, seg¨²n las asociaciones animalistas:
- Invertir en prevenci¨®n para evitar que el animal enferme (antiparasitarios, alimentaci¨®n adecuada).
- Recurrir a bancos de alimentos y de accesorios para animales, en los que ofrecen mantas o productos para combatir garrapatas y pulgas.
- Ver y comparar precios de los productos que necesiten para cubrir sus necesidades de manera adecuada a un precio competitivo.
3. Existe una amplia oferta para viajar con animales
El argumento de deshacerse del perro o el gato porque lastra los planes para las vacaciones carece de fundamento. La oferta de alojamientos y opciones para viajar con animales ha aumentado de manera considerable en Espa?a. Y en otros pa¨ªses como Francia, Reino Unido o Alemania esta asignatura ya est¨¢ superada. La Gu¨ªa para viajar con animales en Espa?a, de la Fundaci¨®n Affinity, da fe de ello. Recoge datos de 3.500 hoteles, 3.700 casas rurales o 1.000 campings donde poder disfrutar de unas vacaciones con nuestra mascota. Otra opci¨®n son las residencias para animales, donde se les atiende en ausencia de sus due?os. Y en Internet se han creado servicios que recogen bases de datos de personas a quienes les gustan los animales y se ofrecen para cuidarlos durante la ausencia de sus due?os a precios asequibles. Sin olvidar que se puede echar mano de amigos o familiares.?
4. Una mascota alegra las vacaciones del ni?o
Los infantes suelen ser los precursores de la entrada de las mascotas en casa. Estas se suelen convertir en compa?eros de juegos y se forjan entra?ables y s¨®lidas amistades. ¡°Los m¨¢s peque?os pueden dar lecciones a sus padres de c¨®mo responsabilizarse del cuidado de un animal¡±, comenta Jes¨²s Esteban, psic¨®logo, profesor de secundaria (ESO) y exmiembro de la Sociedad Espa?ola para el Estudio de la Ansiedad y el estr¨¦s (SEAS). Al igual que el perro o gato llegan a casa por la insistencia de los m¨¢s peque?os, estos pueden quedarse gracias a su mediaci¨®n cuando los adultos pretenden olvidarse del animal. ¡°Pero no est¨¢ de m¨¢s dar ejemplo a los m¨¢s peque?os sobre el cumplimiento de los compromisos que se adquieren, en este caso con el cuidado de un animal¡±, aconseja Esteban.?
5. La compa?¨ªa de nuestro animal es insustituible
Existen estudios que afirman que un perro o un gato en casa nos aportan bienestar. Gracias al v¨ªnculo que se establece entre los due?os y las mascotas, nos sentimos menos solos. Hasta el ronroneo de un felino aporta placer al ser humano. Quienes comparten la vida con un perro o un gato as¨ª lo confirman. Salvador Mart¨ªnez, due?o de Pi?¨®n y presidente de la protectora de animales Huella Canina, cuenta: ¡°Mi perro, de cuatro a?os, es un miembro m¨¢s de mi familia, el hijo que no tengo. Todos los planes que hago son en funci¨®n de poder compartirlos con ¨¦l y no lo cambio por nada¡±.
6. Abandonar a un animal le provoca sufrimiento
Un perro o un gato desahuciados, y privados de la compa?¨ªa de su familia, sobre todo tras una larga convivencia, sufren un trauma que se puede traducir, en algunos casos, en la muerte del animal por tristeza. ¡°Dejan de comer, se a¨ªslan y mueren de pena¡±, comenta Mart¨ªnez, quien a?ade: ¡°No deber¨ªa de ser tan sencillo aparcar a un animal en un albergue y darse la vuelta con la conciencia del deber cumplido¡±.
Los centros de recogida de animales est¨¢n superados por el esfuerzo de atender a todos los que entran en sus instalaciones
7. Las protectoras est¨¢n saturadas de animales
Los centros de recogida de animales est¨¢n superados por el esfuerzo de atender a todos los que entran en sus instalaciones. Y cada vez que dejamos uno contribuimos a aumentar esa carga de trabajo. ¡°Conviene recordar que un animal que ingresa en un centro, donde es uno m¨¢s entre 100, no puede recibir la misma atenci¨®n que en casa con su familia y en su ambiente¡±, explica Luz Garc¨ªa, presidenta de la asociaci¨®n de protecci¨®n animal asturiana La Xana. ¡°Debemos ser conscientes de que no siempre es oro todo lo que reluce en el trabajo de las asociaciones de protecci¨®n animal y que hay casos, no siempre, en los que se trafica con perros y gatos que acaban en laboratorios de otros pa¨ªses, con la excusa de que son para la adopci¨®n internacional¡±, advierte Garc¨ªa.?
8. Un animal vagabundo puede provocar un accidente de tr¨¢fico
Los animales sin control en la v¨ªa p¨²blica (la DGT explica de una manera muy gr¨¢fica c¨®mo se suele producir este tipo de accidentes en carretera) pueden provocar un accidente de tr¨¢fico o cualquier otro imprevisto que cause da?os y perjuicios a terceros. ¡°Todav¨ªa hay quien abandona a su animal en la calle con el consiguiente riesgo, tanto para otras personas como para el propio animal, lo que demuestra una gran falta de empat¨ªa¡±, lamenta la responsable de La Xana.
Seg¨²n la Fundaci¨®n Affinity, m¨¢s del 70% de los perros y gatos que llegan a los centros de acogida de animales se recogen de la calle. ¡°Aunque una parte de ellos se han extraviado y regresan con sus due?os gracias al microchip (dispositivo de identificaci¨®n), otros han sido abandonados a su suerte en la calle¡±, explica Buil, directora de Affinity.
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