¡°La tecnolog¨ªa multiplica las oportunidades en ?frica¡±

Desde Kenia bombea uno de los latidos m¨¢s intensos de la innovaci¨®n en el continente africano. Nairobi es, sin duda, uno de los centros neur¨¢lgicos de las tecnolog¨ªas con esp¨ªritu social y en el coraz¨®n de este fen¨®meno est¨¢ Ushahidi, la plataforma de crowdsourcing nacida en el ?frica oriental y utilizada por colectivos de la sociedad civil; igual que el iHub, uno de los espacios de innovaci¨®n tecnol¨®gica que sirve como modelo en todo el continente. Erik Hersman es uno de los miembros del selecto grupo de impulsores de estas iniciativas.

Hersman aparece tras Ushahidi y el iHub, pero tambi¨¦n de la Maker Fair Africa, la feria del movimiento maker en el continente, o de la BRCK Company, entre muchas otras iniciativas. El ecosistema tecnol¨®gico africano es suficientemente peque?o para que algunas figuras despunten y act¨²en como padrinos otras iniciativas. Pero, al mismo tiempo, es lo suficientemente rico como para que genere innovaciones transformadoras. Hersman lo explica de una manera muy ilustrativa: ¡°?frica ha estado consumiendo las tecnolog¨ªas que creaban los dem¨¢s. Ahora en el continente hay destrezas y habilidades suficientes como para crear las herramientas que m¨¢s se adaptan a nuestros requisitos. Hemos creado estas innovaciones para las necesidades africanas, pero ahora su uso es global y las estamos exportando a todo el mundo¡±.

En esa larga lista de ideas tecnol¨®gicas hay sistemas financieros, como el dinero m¨®vil de MPesa, que desde el este de ?frica se ha extendido a pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo de todo el mundo; hay plataformas de participaci¨®n de la sociedad civil, como Ushahidi que a partir de Kenia se ha utilizado en todo el globo; y hay artilugios como el BRCK, un modem y disco duro ideado para lugares con condiciones ambientales m¨¢s extremas (calor, humedad o polvo) que los del Occidente tecnol¨®gico y con infraestructuras m¨¢s precarias que, sin embargo, no son exclusivas del continente africano. La lista se completa con otras innovaciones m¨¢s cotidianas que demuestran que el objetivo de buscar soluciones africanas a los problemas se ha quedado corto, frente a la posibilidad de aportar soluciones africanas a problemas globales.

La presencia de Hersman es total y sorprendente. Corpulento, con la cabeza afeitada y una poblada barba pelirroja, una penetrante voz grave y una piel blanca, completamente blanca. Este tecn¨®logo tiene una habilidad especial para recorrer el mundo insistiendo en el potencial tecnol¨®gico de ?frica, al mismo tiempo que capitanea en Kenia las iniciativas innovadoras m¨¢s punteras. Sabe que su imagen no encaja con la de la mayor parte de los africanos, pero eso no le frena. Su identidad en todas las redes sociales es WhiteAfrican, desde el blog, en el que comenz¨® sus andaduras tecnol¨®gicas, hasta Twitter o Instagram.

Hersman reconoce que siempre se interes¨® por la tecnolog¨ªa m¨®vil y por la web. ¡°Pero fue la violencia poselectoral en Kenia (en 2008) lo que me llev¨® a buscar el beneficio social de estas tecnolog¨ªas¡±, explica este padrino tecnol¨®gico keniano. De aquella inquietud y la coincidencia extraordinaria con otros blogueros comprometidos, naci¨® Ushahidi. Despu¨¦s vino el iHub, el BRCK¡­ ¡°Esta historia comenz¨® hace siete a?os y despu¨¦s ha ido creciendo y creciendo¡±, comenta con tono sorprendido.

¡°Las TIC multiplican las oportunidades en ?frica¡±

Para este keniano de coraz¨®n el beneficio social, la creatividad y el trabajo colaborativo son los pilares de este proceso de innovaci¨®n. ¡°Con Ushahidi demostramos que la tecnolog¨ªa pod¨ªa ayudar a dar una respuesta, que se puede utilizar para muchas cosas, pero una de ellas es el beneficio social¡±, afirma Hersman. Y a?ade: ¡°En realidad no es dif¨ªcil hacer dinero, pero la pregunta importante es si lo que est¨¢s haciendo es beneficioso o negativo y nosotros nos fij¨¢bamos en las oportunidades que se estaban creando. Lo que hac¨ªamos, Ushahidi y despu¨¦s el iHub estaba teniendo un impacto en todo el mundo, pero adem¨¢s nos ha ayudado a crear una comunidad que a su vez est¨¢ construyendo muchas m¨¢s cosas¡±.

A pesar de ese impacto, Hersman habla con modestia como corresponde a su confianza en el trabajo colaborativo y en el papel de la comunidad. ¡°Cuando hablamos del mundo digital, del mundo de la tecnolog¨ªa es f¨¢cil encontrar proyectos colaborativos por todo, aunque es cierto que en ?frica, aunque sea una generalizaci¨®n, han m¨¢s conciencia comunitaria. Nosotros solemos decir que si quieres ir r¨¢pido, vas s¨®lo y si quieres ir lejos, vas acompa?ado. En ?frica est¨¢ m¨¢s interiorizado que vamos juntos y vamos m¨¢s despacio, pero porque vamos lejos. En EE UU o en Europa, vais solos y vais m¨¢s r¨¢pido¡±, dice.

Hersman desgrana tranquilo las experiencias de tech lab en ?frica, de Nigeria a Uganda, de Senegal a Zambia. ¡°Cada uno de ellos¡±, anota, ¡°tiene caracter¨ªsticas diferentes, unos tienen muchos miembros y otros comunidades peque?as, unos tienen una orientaci¨®n m¨¢s empresarial y otros m¨¢s social, algunos est¨¢n relacionados con la universidad y otros con las organizaciones de la sociedad civil. A cada uno le sirve un modelo diferente dependiendo de su orientaci¨®n, pero eso no impide que se establezcan lazos¡±. Y en ese recorrido, este tecn¨®logo no desprecia las experiencias en Berl¨ªn o Filadelfia que tambi¨¦n han establecido nexos con el iHub keniano.

?frica ha consumido las tecnolog¨ªas que creaban los dem¨¢s. Ahora en el continente hay destrezas? como para crear las herramientas que m¨¢s se adaptan a nosotros

Para este esp¨ªritu que Hersman proyecta en el espacio de innovaci¨®n de Nairobi ¡°el sentido de la comunidad es que los m¨¢s veteranos ayuden a los m¨¢s j¨®venes, que devuelvan a la comunidad, algo de lo que la comunidad les ha dado¡±.

Al calor de estos espacios de innovaci¨®n, las grandes compa?¨ªas del sector tecnol¨®gico han ido fijando su atenci¨®n en el continente. A pesar de que la mentalidad de estas empresas no se corresponde con el esp¨ªritu social de las iniciativas comunitarias, Hersman no ve una incompatibilidad. ¡°Est¨¢ claro que el enfoque de estas compa?¨ªas es muy comercial, pero para los j¨®venes interesados en el mundo de la tecnolog¨ªa es una oportunidad de trabajar, de formarse, de viajar, de conocer el mundo. Son una salida para las startups y las peque?as empresas cuyos impulsores pueden aprender c¨®mo funciona un sector tecnol¨®gico globalizado¡±, comenta. Pero adem¨¢s, descifra otras realidades: muchos de los j¨®venes que han pasado por las plantillas de estas compa?¨ªas regresan, despu¨¦s, a las iniciativas sociales, a aplicar parte de lo que han podido aprender y vivir a las experiencias comunitarias. La plantilla de Ushahidi, vuelve a ser un ejemplo, de estas puertas giratorias virtuosas.

La pregunta espinosa llega cuando se plantea a Hersman c¨®mo pueden ayudar las TIC al desarrollo de ?frica. ¡°?De qu¨¦ hablamos cuando hablamos de desarrollo en ?frica?¡±, repregunta el bloguero keniano. ¡°En mi opini¨®n el desarrollo es m¨¢s que generar riqueza econ¨®mica, es permitir a la gente que tenga m¨¢s posibilidades de tomar decisiones, es que haya m¨¢s oportunidades¡±, explica antes de sentenciar: ¡°Las TIC pueden ayudar a aumentar la eficiencia y agilizar los procesos en ?frica. La tecnolog¨ªa nos permite localizar las soluciones, no exportar recetas universales, porque hay soluciones concretas para Kenia que son diferentes a las soluciones que se necesitan en Nigeria o en Malawi. Pensar que el desarrollo es s¨®lo generar riqueza es una herencia negativa del sistema. Necesitamos cambiar esta mentalidad y la tecnolog¨ªa es un camino para conseguirlo¡±.

El cambio que est¨¢ operando la tecnolog¨ªa es ya una realidad. ¡°Los tel¨¦fonos m¨®viles han impulsado cambios muy importantes en las sociedades tanto en el comercio y los negocios hasta en la pol¨ªtica. Los medios sociales, los blogs tienen un impacto en la informaci¨®n que ahora tiene la gente. No hay duda de que la tecnolog¨ªa ayuda a la gente a tener una voz. Cuando yo me fui a Nairobi en los a?os noventa, mi padre no ten¨ªa un tel¨¦fono en casa y diez a?os despu¨¦s tiene un tel¨¦fono m¨®vil. La manera en la que yo me comunico con mi familia cambia completamente el mundo. Pero tambi¨¦n ha influido en la forma de trabajar y creo que puede ir cambiando lentamente la percepci¨®n global que se tiene de ?frica. La tecnolog¨ªa cambia m¨¢s la vida cotidiana de las personas de lo que se pueda pensar, m¨¢s que ninguna otra cosa¡±, explica Hersman.

El pasado de las TIC en ?frica es todav¨ªa muy reciente, el impacto en la actualidad es indudable. Pero la mayor inc¨®gnita es el futuro de estas tecnolog¨ªas y este referente africano lo tiene claro: ¡°El uso m¨¢s interesante de la tecnolog¨ªa para el cambio social son las plataformas con las que la gente puede controlar e intervenir en el gobierno y en los servicios p¨²blicos, en un ¨¢mbito muy local. Las que permiten a los ciudadanos decir cu¨¢nto dinero del presupuesto se tiene que gastar en la escuela o cualquier otro servicios que les rodean. Estas plataformas permiten colocar a los ciudadanos mucho m¨¢s cerca de los gobernantes y les dan la posibilidad de tener respuesta. Les dan la posibilidad de estar vigilantes, de controlar, de elegir, de escoger. Empujan a los gobiernos a cambiar, aunque no siempre quieran¡±.