Los gases que expulsa tu coche y yo me trago despu¨¦s
Si solo fuera CO2¡ Los veh¨ªculos emiten un 66% de ¨®xido de nitr¨®geno, que es el m¨¢s da?ino para la salud
La contaminaci¨®n del aire es un problema real. Y es un problema de todos. Un buen ejemplo, aunque para muchos tard¨ªo, es la medida tomada este jueves por el Consistorio de Madrid de reducir el m¨¢ximo de velocidad a 70 kil¨®metros por hora en las v¨ªas de acceso a la capital. Madrid lleva superando los niveles recomendados de di¨®xido de nitr¨®geno (NO2) un par de d¨ªas. La iniciativa disminuir¨¢ la contaminaci¨®n, ya que los tubos de escape producen altas concentraciones de compuestos y part¨ªculas nocivas, como la mencionada, o mon¨®xido de carbono (CO), ¨®xidos de nitr¨®geno (NOx), di¨®xido de carbono (CO2), metales pesados¡
Le presentamos algunos datos para que tome conciencia del problema. Los coches son responsables de una cuarta parte de los gases de efecto invernadero; consumen el 15% de la energ¨ªa en Espa?a, y emiten el 66% del ¨®xido de nitr¨®geno (NOx), que es el contaminante del aire m¨¢s da?ino para nuestra salud y que se ha hecho famoso por el caso Volkswagen. No es CO2 todo lo que destroza.
?De qu¨¦ cantidad estamos hablando?
Lecciones del 'caso Volkswagen'
?Cu¨¢l es el alcance de haber manipulado el sistema de control de las emisiones en 11 millones de veh¨ªculos? Coches que han llegado a contaminar hasta 40 veces m¨¢s de lo permitido en los ¨²ltimos siete a?os. ¡°Su impacto en la salud p¨²blica es dif¨ªcilmente resarcible¡±, sostiene Rojas-Rueda, quien habla de un aumento de s¨ªntomas de enfermedades respiratorias, patolog¨ªas cardiovasculares y partos prematuros.
La ambient¨®loga Elena Santamar¨ªa, integrante de la CECCAA, piensa que se debe exigir a los fabricantes que incorporen catalizadores en los motores di¨¦sel para simplificar la reacci¨®n qu¨ªmica en la combusti¨®n y reducir as¨ª el nivel de ¨®xido de nitr¨®geno.
La tecnolog¨ªa ya se usa para fabricar motores di¨¦sel limpios. ¡°El filtro de part¨ªculas est¨¢ eliminando buena parte de estas sustancias, hasta el 99% de las concentraciones, y reduciendo significativamente las emisiones de NOx¡±, asegura Carlos Rivero. Pero estas novedades tecnol¨®gicas encarecen el coste de los coches. ¡°Los esfuerzos del mercado deber¨ªan ir encaminados hacia la generaci¨®n de coches h¨ªbridos, que aunque tienen un mayor coste ambiental en su ciclo de vida no contribuyen a la contaminaci¨®n a corto y medio plazo. Tambi¨¦n, el sector debe centrarse en la tecnolog¨ªa el¨¦ctrica, para lograr un tr¨¢fico rodado sin que comprometa la salud y medioambiente¡±, apunta el investigador.
Para Rojas-Rueda, cient¨ªfico del CREAL, la industria del autom¨®vil ha demostrado que no tiene la capacidad para regularse, ni tampoco la responsabilidad para cumplir con la exigencia de protecci¨®n ambiental y de salud p¨²blica. ?Qu¨¦ podemos aprender del caso Volkswagen? Depender¨¢ de nosotros. ¡°El coche tiene una presencia muy importante en el modelo urban¨ªstico actual. Pero tenemos que llamar la atenci¨®n a las autoridades para que promuevan otros medios de transporte, como la bicicleta, y potenciar la figura del peat¨®n. De esta manera se puede avanzar hacia modelos de movilidad m¨¢s eficientes y sostenibles¡±, insiste.
Seg¨²n el ¨²ltimo inventario de emisiones contaminantes publicado por el Ministerio de Agricultura, Alimentaci¨®n y Medio Ambiente (MAGRAMA), el transporte produce cada a?o 317.720 toneladas de NOx. Ahora se har¨¢ las preguntas: ?Cu¨¢nto han aumentado las emisiones de este compuesto por la manipulaci¨®n del software en los motores di¨¦sel? ?Cu¨¢l es su impacto en la salud p¨²blica y el medioambiente? ?Qu¨¦ otras sustancias, part¨ªculas y gases produce el tr¨¢fico rodado? Antes de abordar estas cuestiones, le sugerimos que adopte una actitud proactiva. S¨ª, podemos cambiar la situaci¨®n. Y con acciones sencillas. Coja el metro para ir al trabajo. Ahorrar¨¢ los 2,6 kilos de CO2 que expulsa por cada 20 kil¨®metros que recorra al volante con un gasoil. Haga ejercicio, salga a correr¡ Seg¨²n una investigaci¨®n con participaci¨®n espa?ola publicada en la revista Environmental Health Perspectives, la actividad f¨ªsica puede contrarrestar el impacto de la poluci¨®n, que se considera un factor de riesgo de enfermedades, por delante del colesterol y el sedentarismo, seg¨²n la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS). O use la bici. Es m¨¢s barato y nuestros (sus) pulmones se lo agradecer¨¢n. Pero repasemos cu¨¢les son los gases m¨¢s contaminantes que se derivan de la conducci¨®n.
?xido de nitr¨®geno (NOx), el peor enemigo
Se le considera el compuesto m¨¢s da?ino, porque genera lo que se conoce en el argot cient¨ªfico como¡®smog fotoqu¨ªmico¡¯, que es la formaci¨®n de componentes derivados que van a contaminar el aire que respiramos. Carlos Rivero, experto en protocolos de sostenibilidad y gesti¨®n de emisiones contaminantes de la Coordinadora Estatal de Ciencias Ambientales (CECCAA), explica su impacto en la salud:¡°Al crease el llamado Ozono troposf¨¦rico, el ¨®xido de nitr¨®geno puede generar problemas de tipo respiratorio y ocular en la poblaci¨®n, tener incidencia en el desarrollo pulmonar y generar patolog¨ªas cr¨®nicas cardiorespiratorias¡±. ?Y en el medioambiente? ¡°El efecto es la lluvia ¨¢cida, que repercute en la vegetaci¨®n, por la abrasi¨®n de las zonas verdes, un crecimiento m¨¢s d¨¦bil y porque favorece la aparici¨®n de par¨¢sitos sobre l¨¢minas de agua que afectan al ciclo reproductivo de las especies¡±.
La ambient¨®loga Elena Santamar¨ªa habla de otro efecto de la lluvia ¨¢cida: ¡°Es el mal de piedra, que altera el estado de monumentos y construcciones por esa reacci¨®n qu¨ªmica de la lluvia modificando el ecosistema¡±. Se degradan las edificaciones, sobre todo las de tipo caliza, m¨¢rmol y de piedra arenisca. Lo que convierte al ¨®xido de nitr¨®geno en el contaminante m¨¢s t¨®xico es su capacidad para interactuar con otros gases y elementos nocivos, y para aumentar las part¨ªculas en suspensi¨®n. ¡°Las altas concentraciones en el aire afectan tanto a las personas con problemas respiratorios como a la poblaci¨®n en general, en todos los grupos de edad. El NOx se relaciona tambi¨¦n con el riesgo de padecer obesidad, diabetes y problemas neurol¨®gicos¡±, subraya David Rojas-Rueda, investigador del Centro de Investigaci¨®n en Epidemiolog¨ªa Ambiental (CREAL), que est¨¢ aliado con el ISGlobal de Barcelona.
?Cu¨¢l es el l¨ªmite de emisiones de NOx? La normativa Euro 6 establece el tope de 80 miligramos por kil¨®metro recorrido, pero el Ministerio de Industria ha propuesto aumentar el techo a 184 mg/km. ¡°Es inaceptable que se quiera aprobar este l¨ªmite m¨¢s permisivo, teniendo en cuenta que hay alternativas menos contaminantes, como los veh¨ªculos el¨¦ctricos, el transporte colectivo o la bici¡±, remarca Elena Veza, t¨¦cnico de los servicios ambientales en el ?rea Metropolitana de Barcelona. ?Es suficiente la restricci¨®n actual? ¡°Creo que la evoluci¨®n de la legislaci¨®n ha sido correcta, pero quiz¨¢s una estrategia global que afectara a los diversos planes de movilidad y usos de los veh¨ªculos podr¨ªa reducir de forma m¨¢s significativa la presencia de estos contaminantes. Para ello, es vital el monitoreo de las concentraciones de gases contaminantes¡±, opina Carlos Rivero.
CO2, una bomba para el medioambiente
Sus efectos son devastadores porque contribuye a elevar la temperatura media de la Tierra, que es de 15 grados. ¡°Tiene una incidencia significativa en el cambio clim¨¢tico al ser el gas que, a pesar de no tener el impacto m¨¢s potente en el calentamiento global de los generados en los procesos de combusti¨®n, s¨ª produce los efectos en mayor cantidad¡±, sostiene Rivero. La contaminaci¨®n por CO2 tambi¨¦n tiene consecuencias para la salud, porque las temperaturas altas provocan un aumento de los niveles de ozono y de contaminantes del aire que agravan las patolog¨ªas respiratorias. Y problemas graves, como la malaria o el dengue, son sensibles al clima y a sus cambios.
Mon¨®xido de carbono, peligroso cuando se al¨ªa con otros gases
Este compuesto se genera por una mala combusti¨®n de gasolina, gasoil, keroseno o carb¨®n. En concentraciones altas, tiene la capacidad de sustituir al ox¨ªgeno en la hemoglobina de la sangre, por lo que puede ser letal. ¡°En circunstancias normales, el peligro est¨¢ en su capacidad de aceleraci¨®n de reacciones de oxidaci¨®n (¨®xido n¨ªtrico y di¨®xido de nitr¨®geno) en suelos poco oxigenados, oxid¨¢ndose en la atm¨®sfera y pasando a CO2¡±, explica Rivero.
Part¨ªculas en suspensi¨®n, munici¨®n para los contaminantes
Son de holl¨ªn y se forman por n¨²cleos de carbono, hidrocarburos, ¨®xidos de azufre (SO4) y agua. Afectan a nuestras v¨ªas respiratorias. ¡°Los motores di¨¦sel emiten m¨¢s ¨®xido de nitr¨®geno (NOx) y micropart¨ªculas; por ello, consideramos que tienen efectos m¨¢s nocivos para la salud¡±, sostiene David Rojas-Rueda. Es la consideraci¨®n general, pero la evoluci¨®n tecnol¨®gica pone excepciones. Lo apunta Rivero: ¡°Los motores di¨¦sel han evolucionado en los ¨²ltimos a?os hacia una realidad m¨¢s eficiente. En cambio, los de gasolina de inyecci¨®n directa y baja cilindrada han reducido los niveles de CO2, pero han aumentado los de hidrocarburos y di¨®xido de nitr¨®geno¡±.
Hidrocarburos, los mejores gases para el efecto invernadero
Estos compuestos org¨¢nicos, formados por carbono e hidr¨®geno y generados durante la combusti¨®n, tienen efectos claros sobre nuestra salud. ¡°Irritaciones mucosas, dificultades para respirar y enfermedades cr¨®nicas relacionadas con el aparato respiratorio¡±, resume Elena Veza. Pero la peor parte se la lleva nuestro entorno. Sus concentraciones elevadas en la atm¨®sfera contribuyen a la formaci¨®n del famoso smog fotoqu¨ªmico. Produce gas metano (CH4), que tiene un efecto directo sobre el calentamiento global, ya que contribuye al efecto invernadero incluso 20 veces m¨¢s que el CO2.
El plomo, contra sistema nervioso, h¨ªgado y ri?¨®n
Este metal se usa para mejorar el octanaje del combustible. Pero cuando nos exponemos a altas concentraciones puede afectarnos al sistema nervioso, el h¨ªgado y el ri?¨®n. Tambi¨¦n puede da?ar la calidad de los cultivos y tiene un impacto negativo sobre los ecosistemas acu¨¢ticos. Seg¨²n expone Rivero, esto se debe a la extraordinaria capacidad de retenci¨®n de este metal pesado por parte de peces y crust¨¢ceos.
Nitr¨®geno molecular, el m¨¢s abundante
El N2 es el gas que producen en mayor cantidad tanto los motores di¨¦sel como los de gasolina. Pero su concentraci¨®n tiene que ser m¨¢s elevada que la habitual para que afecte a la salud ¨Cpuede causar problemas hormonales o una posible relaci¨®n con procesos de c¨¢ncer.
A la lista de emisiones, podr¨ªamos a?adir el di¨®xido de azufre (SO2), que tiene un efecto directo sobre la lluvia ¨¢cida, aunque solo el 2% lo producen los motores de los coches; los compuestos org¨¢nicos vol¨¢tiles (COV), que son hidrocarburos gaseosos; y otros metales procedentes de los catalizadores de los motores. Las altas concentraciones de estos gases pueden da?ar piel o afectar a las v¨ªas respiratorias.
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