Ciudades inteligente e hiperconectadas

La tecnolog¨ªa puede convertir un n¨²cleo urbano normal en una ciudad inteligente. Sensores invisibles camuflados en cualquier punto ¡ªpapeleras, farolas, azoteas¡ª facilitan un caudal de informaci¨®n que permiten gestionar de manera m¨¢s eficiente los servicios de una metr¨®poli: desde el transporte a la recogida de basura, pasando por las dotaciones de emergencia, el suministro de agua o los niveles de contaminaci¨®n. Tener datos al segundo sobre estas variables ser¨¢ cada vez m¨¢s importante. Sobre todo si se tienen en cuenta las estimaciones de los dem¨®grafos, seg¨²n las cuales en el a?o 2050 tres cuartas partes de la poblaci¨®n mundial vivir¨¢ en zonas urbanas. Ante el ¨¦xodo que se avecina, los expertos advierten de que las infraestructuras de datos ser¨¢n tan vitales como lo es ahora el metro para el funcionamiento de las megal¨®polis.

Si hay una autoridad en la materia es Carlo Ratti, investigador del Instituto de Tecnolog¨ªa de Massachusetts (MIT), que suele comparar una ciudad con la F¨®rmula 1. Suele explicar que antes, para ganar esta competici¨®n se invert¨ªa en un buen coche y en un buen piloto. Con estos ingredientes, el podio estaba asegurado. Ahora, adem¨¢s, es necesario contar con un complejo sistema capaz de captar informaci¨®n en tiempo real sobre el estado de la pista, la trayectoria del viento o las condiciones del veh¨ªculo. La telemetr¨ªa se ha convertido en un aliado indiscutible para grandes las escuder¨ªas. Y tambi¨¦n para las ciudades.

El foro Smart City World Expo de Barcelona acaba de mostrar las iniciativas llevadas a cabo en todo el mundo para hacer las urbes m¨¢s habitables. Las estrellas han sido el microb¨²s sin conductor, listo para circular por la v¨ªas de Holanda, Singapur y California, y los drones, dotados con aplicaciones capaces de colaborar en situaciones de emergencias m¨¦dicas en lugares remotos, el reparto de mercanc¨ªas o el cartografiado a¨¦reo.

Las tecnolog¨ªas de la informaci¨®n y la comunicaci¨®n (TIC) han revolucionado la vida de las personas, pero las ciudades digitalizadas tienen todav¨ªa mucho camino que recorrer. En Espa?a, Santander es una de las pioneras en adoptar modelos de gesti¨®n inspirados en las TIC. Un enjambre de sensores fijos y m¨®viles instalados en puntos estrat¨¦gicos suministran sin descanso datos que se transforman en informaci¨®n sobre el punto exacto en el que se ubican los autobuses municipales, la saturaci¨®n del tr¨¢fico, los niveles de ruido o la recogida de la basura. Datos provechosos tanto para el Ayuntamiento como para el ciudadano.

En una sociedad hiperconectada, las aplicaciones m¨®viles son la clave. Pero inundar las calles de sensores no convierte a una ciudad inteligente. Una buena idea puede hacer m¨¢s c¨®moda y feliz la vida de los habitantes del planeta, pero, adem¨¢s de tecnolog¨ªa punta, las ciudades necesitan una buena gobernanza. Tener ciudades inteligentes y alcaldes mediocres no es la soluci¨®n.