6 cosas que hay que dejar de hacer antes de los 40 para no llorar despu¨¦s
La diabetes muestra las garras, engordamos m¨¢s r¨¢pido y las enc¨ªas sufren. Pero tambi¨¦n hay un modo de burlarse de todo
Si se est¨¢ acercando a su quinta d¨¦cada de vida, se habr¨¢ dado cuenta de que su cuerpo no le responde como antes: sus resacas ya no duran unas horas, puede que est¨¦ ensanchando sin saber c¨®mo y sus allegados le recomiendan visitar al m¨¦dico con m¨¢s frecuencia. ¡°A partir de los 40 o 50 a?os una prueba anual o bianual no es mala idea. Es como pasar la ITV. Muchas veces, por motivos de trabajo o familia, olvidamos cuidarnos. El examen permite ver nuestra salud f¨ªsica y mental para intentar mejorar algunos h¨¢bitos ante el futuro¡±, cont¨® a BUENAVIDA Christian Shin, responsable de la Unidad de Chequeos M¨¦dicos del Hospital Universitario Quir¨®n de Madrid. Pero esto no significa que haya llegado de pasar de m¨¦dico en m¨¦dico, tan solo que algunos h¨¢bitos de juventud desenfrenada deben quedar atr¨¢s.
Cosas que se acabaron:
1. Faltar al gimnasio cada vez que surja un plan mejor
La cantidad de grasa corporal aumenta de manera constante despu¨¦s de los 30 a?os, seg¨²n la Biblioteca Nacional de Medicina de EE UU
Puede que hasta ahora le haya parecido que correr es de cobardes. No le hac¨ªa falta una carrera diaria ni matarse en el gimnasio para mantener el tipillo de siempre, pero todo lo bueno se acaba. "La cantidad de grasa corporal aumenta de manera constante despu¨¦s de los 30 a?os. Las personas mayores pueden tener casi un tercio m¨¢s de grasa que cuando eran j¨®venes", dictamina la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos. Adem¨¢s, con la edad disminuye la masa muscular, por lo que cambiar diariamente la silla de la oficina por el sof¨¢ ya no es tan buena idea. "A esta edad, disminuye el tejido magro. Los m¨²sculos, el h¨ªgado, los ri?ones y otros ¨®rganos pueden perder algunas de sus c¨¦lulas", se?ala Raquel Blasco, especialista en Medicina Interna en el Centro Regional de Medicina Deportiva de la Junta de Castilla y Le¨®n. Los excesos de una dieta inadecuada no afectan por igual a todos los cuerpos, sino que dependen de su composici¨®n: ¡°Se pueden almacenar como grasa o como masa muscular. A trav¨¦s de un estilo de vida activo, se 'amaestra' al cuerpo. Con una vida activa, el bocata de tortilla le engordar¨¢ menos a alguien con un 49% de masa muscular que a quien tiene un 30%¡±, concluye Blasco.
Pero sin agobios: el ejercicio f¨ªsico repentino conlleva riesgos. La experta desaconseja que al empezar se emule a otros que llevan m¨¢s tiempo de entrenamiento. Blasco afirma que el ejercicio tiene dosis recomendada, indicaciones y contraindicaciones e incluso efectos secundarios.?La Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) recomienda para los adultos y mayores un m¨ªnimo de 150 minutos semanales de actividades f¨ªsicas aer¨®bicas moderadas o 75 vigorosas, o bien la combinaci¨®n de ambas, distribuidas en sesiones de m¨¢s de 10 minutos. Para aumentar los beneficios para la salud, la OMS multiplica por dos la cantidad de tiempo de actividad, es decir, 300 minutos de aer¨®bicos moderados y 150 vigorosos (o la combinaci¨®n equivalente entre ambos). El truco est¨¢ en introducir la actividad en la vida cotidiana: moverse en bicicleta por la ciudad, cambiar algunas ca?as por un paseo o ir a la compra andando. Incluso la nueva crisis de los 40 podr¨ªa pasar por comprarse una bicicleta. Nada de correr solo los s¨¢bados para descarga la culpa de una semana divertida. ¡°Recuperar el fin de semana todo lo perdido entresemana solo sirve para incrementar el riesgo de lesiones graves¡±, destaca Blasco. Del mismo modo, machacarse en carreras de 30 minutos a diario y pasar el resto de la jornada sentado en la oficina, en el coche o en casa est¨¢ muy lejos de una vida saludable. Para la doctora, nada de eso importa si el resto del tiempo va de la silla al coche y viceversa. ?Ha o¨ªdo hablar del entrenamiento invisible? A los 40, cada escal¨®n suma.
2. Fumarse un cigarrillo de vez en cuando
Es habitual pensar que despu¨¦s de muchos a?os de h¨¢bito, ya es demasiado tarde para dejarlo. Pues bien, la ciencia dice que no hay un punto de no retorno (aunque cuanto antes lo deje, mejor). Seg¨²n un estudio publicado en la revista The Lancet, si apaga su ¨²ltimo cigarro antes de soplar las 40 velas, descender¨¢n las probabilidades de muerte prematura en un 90%. El trabajo afirma que dejar de fumar trae beneficios y aumenta de esperanza de vida, a cualquier edad.
Dejar de fumar antes de los 40 reduce el riesgo de muerte prematura en un 90%
"El tabaquismo comienza generalmente en la juventud, generando un mecanismo de dependencia que hace que sea cada vez m¨¢s dif¨ªcil dejarlo, salvo que haya un claro convencimiento de su inutilidad y perjuicio", indica el m¨¦dico de familia Vicente Baos. Cada cigarrillo contiene unos 4.000 productos qu¨ªmicos, como metanol, un componente de la gasolina; amon¨ªaco, presente en productos de limpieza; o alquitr¨¢n, con el que se asfaltan las carreteras. Y entre ellos, la nicotina, que provoca la necesidad de fumar.
3. Beber alcohol sin pensar en el d¨ªa siguiente
El consumo de alcohol no es, dese luego, una sensata recomendaci¨®n m¨¦dica. Pero a veces se nos olvida. Y pasamos de una copa a otra, con los indeseados efectos de resaca para el d¨ªa siguiente. Cuando se es joven, no importa: esa liberaci¨®n de t¨®xicos suele ser compatible con cualquier tarea pendiente. A los 40, conviene planificar que un d¨ªa con resaca ser¨¢ un d¨ªa perdido. N¨¢useas, escalofr¨ªos, dolor de cabeza, v¨®mitos, malestar, mareos, mal cuerpo¡ La raz¨®n principal por la que este malestar es cada vez mayor reside en la deshidrataci¨®n: ¡°El alcohol se distribuye con el agua y en el organismo de las personas mayores hay menos cantidad, al igual que sucede en el de las mujeres¡±, cuenta Francisco Camarelles, m¨¦dico de familia y miembro del programa de actividades preventivas y de promoci¨®n de la salud de la Sociedad Espa?ola de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC). Como con la edad hay m¨¢s grasa en el cuerpo y menos agua, el alcohol se concentra con fuerza y no se distribuye por el cuerpo, por lo que un cuarent¨®n siempre necesitar¨¢ m¨¢s agua que un veintea?ero. Es una cosa seria, pues al cumplir a?os tambi¨¦n disminuye la sensibilidad a la sed, como se?ala el Instituto Europeo de Hidrataci¨®n. La deshidrataci¨®n ayuda a que la resaca se convierta en un infierno, pero, si la bebida ins¨ªpida no es su fuerte, los sustitutos como el gazpacho, el t¨¦ verde o un caldo calentito tienen un alto contenido en agua y nutrientes, y quiz¨¢ apetezcan m¨¢s.
4. No leer la etiqueta de los alimentos que compra
El 19% de los espa?oles no lee las etiquetas de los alimentos que consume, seg¨²n una encuesta de IMOP y Berb¨¦s Asociados. Pues bien, aunque este es un mal h¨¢bito sea cual sea su edad, a los 40 ya es algo que tiene que acabar. Al fin y al cabo, uno de los objetivos de ese celo es regular su consumo de az¨²car y sal, sustancias que ense?an las garras a medida que vamos cumpliendo a?os. El riesgo de diabetes es ascendente. Y es una enfermedad traidora, como recuerda la m¨¦dica de familia Rosa Iribarnegaray. ¡°En general, sobre todo cuando nos aproximamos a los 40, no causa pr¨¢cticamente s¨ªntomas, pero el exceso de az¨²car circulando en la sangre de forma continuada lo da?a todo: el coraz¨®n, el ri?¨®n, la visi¨®n o la microcirculaci¨®n¡±, apunta. La presi¨®n arterial tambi¨¦n se eleva con la edad, lo que puede producir hipertensi¨®n. La sal es uno de los desencadenantes (la OMS recomienda no superar los 5 gramos por jornada). Y todas esas cantidades se concretan en la etiqueta.
5. Pasar todo el fin de semana encerrado en casa por pura vagancia
Puede que nunca se haya preocupado por la salud de sus huesos, pero ya va siendo hora. La densidad y la calidad ¨®sea disminuyen con la edad, seg¨²n la Sociedad Espa?ola de Reumatolog¨ªa (SER). Con el tiempo, la p¨¦rdida de minerales como el calcio puede debilitar los huesos y crear osteoporosis, culpable de las fracturas de las personas mayores. Adem¨¢s, si es mujer, la menopausia no queda tan lejos (aproximadamente, a los 50), lo que agrava la disminuci¨®n de la masa ¨®sea.
La SER advierte de que aunque la descalcificaci¨®n afecta principalmente a f¨¦minas, no hay nadie exento de riesgo. La buena noticia es que los 40 siguen siendo una edad estupenda para apostar por la prevenci¨®n. ?Qu¨¦ tal la vitamina D? Un aporte regular de este micronutriente ser¨¢ un gran aliado, seg¨²n el Instituto Nacional de Salud (INS) de Estados Unidos. Y aqu¨ª se encuadra lo de salir a la calle, esa frase que los padres sueltan con frecuencia a sus hijos adolescentes y m¨¢s convendr¨ªa que fuera al rev¨¦s. Pues la forma principal de obtener vitamina D (es decir, de apostar por los huesos sanos) es a trav¨¦s de la exposici¨®n al sol. No perdone el paseo diario (y mejor si es matutino). Eso s¨ª: prot¨¦jase. "Los diferentes tipos de radiaci¨®n ultravioleta incrementan el riesgo de desarrollar un c¨¢ncer de piel¡±, recuerda la dermat¨®loga Rosa Taberner, ?del Hospital Son Ll¨¤tzer de Palma de Mallorca. Tenga la edad que tenga.
Si es mujer y est¨¢ embarazada, sepa que en la madurez ha de cumplir (siempre) con los tres lavados diarios, am¨¦n del posterior a cualquier comida o bebida extra
6. Irse a la cama sin lavarse los dientes
Al acercarse a los 40 existe m¨¢s riesgo de padecer enfermedad periodontal, un importante da?o en los tejidos blandos y los huesos que sostienen los dientes. Para Bruno Baracco, doctor en odontolog¨ªa de la Cl¨ªnica Rosales de Est¨¦tica Dental, lo importante para prevenirla es ¡°mantener una higiene rigurosa y no fumar, sobre todo si en la familia hay alguien que haya sufrido esta patolog¨ªa, que tiene un fuerte componente gen¨¦tico¡±. A?ade que el riesgo de padecerla es mayor si el sujeto tiene diabetes.
Si, adem¨¢s, es mujer y est¨¢ embarazada, sepa que en la madurez ha de cumplir (siempre) con los tres lavados diarios, am¨¦n del posterior a cualquier comida o bebida extra, "pues incluso as¨ª se eleva el riesgo de sufrir gingivitis, una inflamaci¨®n de los tejidos que soportan la dentadura¡±, explica Baracco, que a?ade que, normalmente, este riesgo acaba despu¨¦s de dar a luz, "pero en algunos casos persiste".
Los dientes se mueven durante toda la vida, y seg¨²n el doctor tienden a api?arse en torno a los 50. ¡°La dentadura tiene un crecimiento residual. Aunque un api?amiento leve es un problema puramente est¨¦tico, el cambio de contacto entre los dientes puede hacer que se acumulen restos entre ellos y provocar caries¡±, afirma el odont¨®logo. Pero estos cambios no afectan ¨²nicamente a la salud de la boca "con una mala dentadura los alimentos se mastican de forma inadecuada, lo que se traduce en una peor digesti¨®n y en una deficiente obtenci¨®n de nutrientes", apostilla el doctor en Odontolog¨ªa Iv¨¢n Malag¨®n.
¡°Visitar al dentista de forma regular -al menos una vez al a?o- permite al especialista detectar el inicio de enfermedades orales (caries incipientes, inflamaci¨®n de enc¨ªas) y evitar su progresi¨®n, adem¨¢s de que es recomendable eliminar el sarro que se acumula con el tiempo", explica Roc¨ªo Barrios, doctora en odontolog¨ªa y docente de Odontolog¨ªa Preventiva y Comunitaria en la Universidad de Granada. La experta recuerda que el cepillado es lo m¨¢s importante y los colutorios antis¨¦pticos no deben usarse como rutina. "Pueden tener efectos colaterales con su uso prolongado (tinci¨®n de dientes, p¨¦rdida del gusto¡)¡±.
?Y no hablamos de sexo?
Respire tranquilo. Aunque algunas cosas acaban, lo mejor est¨¢ por llegar: su d¨¦cada dorada de sexo. Las razones son muchas, como expone la psic¨®loga Nuria Jorba: "Disfrutar de una buena salud f¨ªsica, tener una situaci¨®n socioecon¨®mica estable y favorable, la disminuci¨®n de cargas familiares, una comunicaci¨®n positiva con la pareja, la aceptaci¨®n de los cambios f¨ªsicos, una vida social activa¡ todo suma". Sobre todo si ha hecho los deberes con los asuntos anteriores, pues los deportistas hombres, seg¨²n apunta un estudio de la Universidad de Harvard (Estados Unidos), disminuyen su riesgo de disfunci¨®n er¨¦ctil en un 41% solo con 30 minutos de caminata diaria. Y volvemos a empezar.
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