La elegancia, el ahorro energ¨¦tico y Sherlock lo dicen: vuelve el bat¨ªn
?Ese pantal¨®n de ch¨¢ndal y esa camiseta vieja le sientan tan bien como cree? Usted sabe que no. Le proponemos una alternativa m¨¢s atractiva
Si a nuestros padres les hubieran dicho que sus hijos querr¨ªan vestir como sus abuelos, les habr¨ªa entrado la risa. Sin embargo, rebuscar en el desv¨¢n o en esa versi¨®n comercializada del desv¨¢n llamada ¡°tienda de segunda mano¡± es una costumbre m¨¢s frecuente de lo que parece. Y, a veces, arroja resultados inesperados. Las camisas estampadas que todos llevamos hoy fueron en su d¨ªa tesoros de trapero. Los tirantes que luce todo hipster de barrio gentrificado estuvieron hasta hace poco condenados al ba¨²l de los disfraces. Y lo mismo sucede con la ropa de estar en casa. Los pijamas vuelven a ser de popel¨ªn (el tejido de las camisas), los calzones largos regresan al rescate de los inquilinos de pisos c¨¦ntricos sin calefacci¨®n y el bat¨ªn masculino, esa prenda casi olvidada, llama a nuestra puerta de nuevo. Hemos preguntado a varios expertos por esta prenda y sus posibilidades de futuro, y esto es lo que nos han contado.
Recon¨®zcalo: en el fondo, es pr¨¢ctico
¡°El bat¨ªn te permite estar c¨®modo en casa al mismo tiempo que descansar de manera elegante y arreglado. Frente a una visita inesperada evita tenerla que recibir en pijama o con ropa inadecuada¡±, explica Jos¨¦ Mar¨ªa L¨®pez Galiacho, experto en indumentaria masculina cl¨¢sica y autor de la web especializada Elaristocrata.com. A primera vista puede que no se vea con un bat¨ªn (la falta de costumbre, claro), pero pi¨¦nselo: ?ese pantal¨®n de ch¨¢ndal y esa camiseta de algod¨®n vieja le sientan tan bien como cree? ?Por qu¨¦ se esconde tras la puerta cuando llega el cartero o el repartidor de pizzas? Ahora visual¨ªcese con un bat¨ªn: retro, s¨ª, pero mucho m¨¢s digno.
Sirve para ahorrar energ¨ªa
Se suele decir que la ropa de casa abrigada (desde el bat¨ªn a las s¨¢banas de franela) decayeron con la llegada de la calefacci¨®n, que la hac¨ªa menos necesaria. Ya en su legendario ABC of Mens Fashion, el sastre Hardy Amies se?alaba que las batas masculinas eran m¨¢s cortas, ¡°como chaquetas o abrigos de tres cuartos¡±, debido a la popularizaci¨®n de la calefacci¨®n central. Sin embargo, hoy el bat¨ªn puede ser un gran aliado para ahorrar algo de energ¨ªa y bajar un par de grados el termostato en casa: p¨®ngaselo al salir de la cama si madruga, o al llegar a casa, y ahorre un poco, aparte de estar elegant¨ªsimo.
Los hay de todos los precios, tejidos y medidas
El precio no es una excusa. A partir de 25 € puede encontrar un bat¨ªn de tejido sint¨¦tico ¨Csimilar al forro polar¨C muy abrigado y pr¨¢ctico. Ahora bien, no es la ¨²nica opci¨®n, ni la m¨¢s ortodoxa. Los expertos recomiendan rascarse el bolsillo para invertir en un tejido de m¨¢s calidad y durabilidad. ¡°Para el d¨ªa a d¨ªa los batines 100% algod¨®n son la mejor opci¨®n; de hecho la mayor¨ªa de ellos se confeccionan con telas de camisas¡±, explica Jos¨¦ Mar¨ªa L¨®pez Galiacho. ¡°Si vivimos en una casa de campo los de lana nos permitir¨¢n combatir mejor el fr¨ªo. La cachemira es muy suave pero al ser un tejido muy fino no aguanta con su mejor aspecto un largo uso diario. La seda es siempre una opci¨®n segura aunque el lavado y planchado de la prenda requiere de cierta pericia¡±, a?ade.
Carmen ?lvarez Olave, que representa la tercera generaci¨®n al frente de la camiser¨ªa Burgos (Madrid), explica que ofrecen un tejido mezcla de lana con?cachemira muy popular en la estaci¨®n invernal. La excepci¨®n, afirma, ¡°es la seda, porque requiere un espesor distinto y dif¨ªcil de encontrar en Espa?a¡±. En esta camiser¨ªa los hacen a medida, ¡°siempre con el largo por debajo de la rodilla¡±, y venden algunos dise?os confeccionados y listos para llevar. Tambi¨¦n en esto hay modas. ¡°Antes lo m¨¢s habitual eran los cuadros escoceses, pero ahora se llevan mucho los colores lisos con vivos (ribetes) en contraste¡±, argumenta ?lvarez Olave. Eso s¨ª, los precios son m¨¢s altos. Ralph Lauren o Calvin Klein ofrecen batines de algod¨®n a partir de 100-150€. En la camiser¨ªa Denis (Madrid), los de lana comienzan en 300€. Y en Derek Rose, el fabricante de batines m¨¢s c¨¦lebre de Londres, a partir de 400€.
Porque es elegante y queda bien
¡°All¨ª estaba Sherlock Holmes, tal y como esperaba, descansando en su gabinete con el bat¨ªn puesto mientras fumaba en pipa y le¨ªa The Times¡±, relata el doctor Watson en El dedo pulgar del ingeniero. La imagen del detective m¨¢s famoso de la Inglaterra victoriana est¨¢ indeleblemente asociada a esta prenda, que sol¨ªa vestir en la intimidad de su hogar de Baker Street. De hecho, los expertos se han puesto a investigar para llegar a la conclusi¨®n de que Holmes llega a lucir tres batines distintos: uno azul, otro burdeos y, el m¨¢s habitual, de color rat¨®n (gris). Los que exhibe Benedict Cumberbatch en la serie Sherlock, de la BBC, son todos de la marca Derek Rose, que ha visto c¨®mo la demanda de sus exquisitos batines satinados ha aumentado espectacularmente desde la emisi¨®n de la serie.
Claro que aqu¨ª hablamos de una variante del bat¨ªn muy elegante, que recuerda a aquella ¨¦poca en que los caballeros acomodados llegaban a casa y se pon¨ªan esta prenda sobre la camisa y la corbata, sustituyendo a la chaqueta del traje formal. De hecho, una curiosidad: el bat¨ªn de terciopelo fue precisamente el origen de la chaqueta de esmoquin, la prenda formal y nocturna por excelencia. As¨ª lo recuerda L¨®pez Galiacho, que sabe muy bien que la etiqueta masculina da cabida, de forma inesperada, al bat¨ªn. ¡°Los de terciopelo pueden hacer las veces de smoking jackets, pudi¨¦ndose acompa?ar de una corbata de lazo, pantalones de vestir y opera pumps¡±. As¨ª que t¨¦ngalo en cuenta: si lleva bat¨ªn en casa, puede que vaya mucho m¨¢s elegante que cualquiera que llame a su puerta.
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