Las cosas que se derrumban
El c¨®mic espa?ol vive una edad dorada y a su alrededor se deshilacha el mundo conocido
Mientras el c¨®mic espa?ol vive una edad dorada, a su alrededor se deshilacha el mundo conocido. De esa iron¨ªa circunstancial surgen piezas redondas, historias perfectas como las que Nadar (Castell¨®n, 1985) recrea en El mundo a tus pies (Astiberri). Sus personajes son pluriempleados con piso compartido, emigrados forzosos con t¨ªtulo bajo el brazo, accidentados sin baja por temor al despido, parados que merodean por turbios m¨¢rgenes de la clase media a la que pertenec¨ªan, j¨®venes sobreformados tan carcomidos por la precariedad como por el resentimiento contra unos padres que llegaron m¨¢s lejos que ellos. En suma, los rostros de la crisis econ¨®mica en plena crisis existencial.
Vi?etas de la crisis
Si una tendencia predomina en el c¨®mic de autor espa?ol es su rabioso presente. Los estragos de la crisis en una generaci¨®n preparada para el triunfo y abocada al paro inspiraron tambi¨¦n ¡®Lo que me est¨¢ pasando¡¯, la primera novela gr¨¢fica del dibujante Miguel Brieva, e ¡®Inercia¡¯, con la que Antonio Hitos gan¨® el VII Premio Internacional de Novela Gr¨¢fica Fnac-Salamandra Graphic. Mientras Brieva e Hitos lo hacen con toques irreales y juegos on¨ªricos, Nadar ha optado por tres historietas realistas.
Tan v¨ªctimas de las burbujas del dinero como de un relato generacional que les predestinaba a comerse el mundo.?Pep Domingo ¨Cque decidi¨® quedarse con el nombre de Nadar en sus d¨ªas de Bellas Artes en Barcelona¨C conoce a la perfecci¨®n esa frustraci¨®n porque ¨¦l es uno de ellos. Despu¨¦s de una estancia becada en la Casa de los Autores de Angulema (Francia), donde sac¨® adelante un aplaudido primer trabajo, Papel estrujado, el retorno le coloc¨® frente a la nada. ¡°Me vi en una circunstancia dram¨¢tica y vi a muchos compa?eros pasar por una gran situaci¨®n de ruptura. Estuve a punto de no hacerlo¡±.
Inc¨®modo papel: ¡°Pisar el lodo y contarlo al mismo tiempo¡±. Arropado por su contexto familiar, Nadar sali¨® airoso. ¡°Somos una generaci¨®n en crisis; sin embargo, el retrato que se hace desde algunos medios es fragmentario y somero. Me interesaba empezar a escribir ese relato que todav¨ªa no existe, sobre todo entre los j¨®venes¡±. Sus tres historias son ficciones pegadas al d¨ªa a d¨ªa con emociones da?inas, como el rencor, y algunos asideros, como la amistad. Nadar hace suya una frase de Paul Auster: ¡°Lo que realmente me asombra no es que todo se est¨¦ derrumbando, sino la gran cantidad de cosas que siguen en pie¡±.
elpaissemanal@elpais.es
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