25.000 trampas mortales para las aves
Solo cuatro comunidades aut¨®nomas han publicado la ubicaci¨®n de sus l¨ªneas de tendidos el¨¦ctricos m¨¢s peligrosas. Las principales ONG ecologistas preparan una campa?a conjunta para denunciar el problema
¡°Tras pasar meses deambulando en b¨²squeda de lugares donde comer, dormir y quedarse temporalmente, su vida parec¨ªa discurrir sin demasiados sobresaltos; con la mala suerte de que un d¨ªa??lora decidi¨® posarse en un tendido el¨¦ctrico donde nunca lo hab¨ªa hecho. Una ¨²nica vez fue suficiente para que cayese fulminada¡±. As¨ª relatan desde el proyecto europeo de recuperaci¨®n del ¨¢guila perdicera Life Bonelli el final de uno de los ejemplares liberados de esta rapaz. Cerca de dicho tendido el¨¦ctrico, situado en la provincia de Toledo, murieron tambi¨¦n recientemente tres ¨¢guilas imperiales y otra perdicera, y el Grupo de Rehabilitaci¨®n de la Fauna Aut¨®ctona y su H¨¢bitat (Grefa), uno de los socios del Life Bonelli, recuerda que?D¨ªlar y?Oteo, otras dos perdiceras soltadas dentro del proyecto, corrieron la misma mala suerte a finales de 2015.
Decenas de miles de aves como??lora caen todos los a?os en estas trampas el¨¦ctricas que, seg¨²n la Sociedad Espa?ola de Ornitolog¨ªa (SEO/BirdLife), est¨¢ compuesta por un m¨ªnimo de 25.000 postes con dise?os peligrosos para la avifauna. El problema es tan grave que por segunda vez unir¨¢ a las principales asociaciones conservacionistas de Espa?a en un programa similar al que impuls¨® en 1997 la lucha contra el veneno (programa Ant¨ªdoto), otra lacra que amenaza a la fauna salvaje. ¡°La intenci¨®n es agilizar la aplicaci¨®n del decreto ley que regula el impacto de los tendidos el¨¦ctricos sobre las aves y exigir que se aporten los fondos necesarios para su efectiva puesta en marcha¡±, afirma Miguel ?ngel Hern¨¢ndez, coordinador de conservaci¨®n de especies de Ecologistas en Acci¨®n.
El Ministerio de Agricultura, Alimentaci¨®n y Medio Ambiente (Magrama) no responde justo a esa pregunta, a la de cu¨¢ndo se destinar¨¢n fondos a corregir este problema, teniendo en cuenta que le obliga a ello un real decreto que fue aprobado en 2008. Reconoce que se ha hecho el trabajo previo: ¡°Hasta la fecha, catorce comunidades aut¨®nomas han delimitado sus ¨¢reas prioritarias de reproducci¨®n, alimentaci¨®n, dispersi¨®n y concentraci¨®n de especies de aves, y publicado las zonas de protecci¨®n a los efectos de la aplicaci¨®n del real decreto 1432/2008 por el que se establecen medidas para la protecci¨®n de la avifauna contra la colisi¨®n y la electrocuci¨®n en l¨ªneas el¨¦ctricas de alta tensi¨®n¡±.
Pero la pelota no est¨¢ solo en el tejado del Magrama; tambi¨¦n bota en el de las comunidades aut¨®nomas, algunas con leyes muy anteriores a la estatal sobre protecci¨®n de aves contra tendidos el¨¦ctricos. SEO/BirdLife muestra un documento en el que solo cuatro cumplen con otra de las obligaciones del real decreto: detectar y publicar en sus diarios oficiales las l¨ªneas el¨¦ctricas que no se ajusten a las prescripciones t¨¦cnicas de seguridad que establece el real decreto. Andaluc¨ªa, Castilla-La Mancha, Castilla y Le¨®n y Catalu?a son las ¨²nicas cumplidoras.
Esta informaci¨®n es vital para que tambi¨¦n act¨²en las compa?¨ªas el¨¦ctricas. Desde Iberdrola apuntan que ¡°la implantaci¨®n de nuevas l¨ªneas con medidas especiales se realiza fundamentalmente en las zonas de protecci¨®n que las comunidades aut¨®nomas han definido a ra¨ªz del real decreto¡±. Estas ¨¢reas incluyen zonas de especial protecci¨®n para las aves (ZEPA), los ¨¢mbitos de aplicaci¨®n de los planes de recuperaci¨®n y conservaci¨®n de especies amenazadas y zonas prioritarias de reproducci¨®n, alimentaci¨®n, dispersi¨®n y concentraci¨®n local de las mismas.
Situaci¨®n cr¨ªtica para el ¨¢guila perdicera
El Magrama expone que ¡°el impacto sobre algunas de nuestras especies m¨¢s amenazadas, como el ¨¢guila imperial, ¡°ha disminuido significativamente gracias a las modificaciones acometidas y al hecho de que los tendidos nuevos tienen ya dise?os adecuados para evitar la electrocuci¨®n¡±. Destacan estas medidas como una de las causas del crecimiento de la especie, que ahora cuenta con 500 parejas, aunque algunos de los ejemplares que se dispersan hasta Marruecos caen precisamente electrocutadas all¨ª. Los ecologistas constatan la recuperaci¨®n del ¨¢guila imperial, pero a su vez demuestran que el peligro sigue presente por el impacto que ocasiona en otras especies, algunas altamente amenazadas, como el ¨¢guila perdicera.
Uno de los seguimientos m¨¢s exhaustivos que se realizan en la actualidad sobre la mortandad de aves en tendidos el¨¦ctricos es el de la Sociedad Ib¨¦rica para el Estudio y la Conservaci¨®n de los Ecosistemas (SIECE) con su iniciativa Pon un tendido en tu punto de mira. Veinte voluntarios centrados principalmente en rastrear y geolocalizar los puntos negros de la provincia de Ja¨¦n detectaron 1.211 aves muertas por colisi¨®n o electrocuci¨®n en 2015. Entre ellas hay precisamente 31 ¨¢guilas perdiceras (tambi¨¦n llamada ¨¢guila de Bonelli), adem¨¢s de cuatro ¨¢guilas imperiales, 253 cuervos, 197 busardos ratoneros, 140 b¨²hos reales y 53 cig¨¹e?as blancas..
El Ministerio de Agricultura no responde a la pregunta de cu¨¢ndo se destinar¨¢n fondos a corregir este problema, teniendo en cuenta que le obliga a ello un real decreto que fue aprobado en 2008
¡°Hace unos meses encontramos en una sola l¨ªnea 16 cig¨¹e?as electrocutadas en un aut¨¦ntico campo de minas para esta especies¡±, recuerda Diego Ortega, uno de los responsables del trabajo realizado por la SIECE. Gracias a esta labor han confeccionado un mapa de la pen¨ªnsula Ib¨¦rica donde se localizan estos ¡°campos de minas¡± bajo cuatro tipos de iconos: los morados se corresponden con postes que no muestran evidencias de electrocuciones pero revisten un especial peligro; las calaveras localizan puntos con cinco o m¨¢s animales electrocutados, incluidas especies amenazadas; los amarillos indican postes donde se han encontrado animales electrocutados; los verdes identifican los que, tras ser denunciados, han sido corregidos y aislados con medidas anti-electrocuci¨®n; y las l¨ªneas rojas son tendidos considerados peligrosos en la totalidad de sus postes.
Aislamientos obsoletos
Iberdrola ha comenzado las labores de correcci¨®n en los postes de Toledo en los que murieron tres ¨¢guilas imperiales y una perdicera. Ha recibido el aplauso de Ecologistas en Acci¨®n, que conf¨ªa en que sirva de punto de partida para acometer otras medidas en el resto de zonas conflictivas. La compa?¨ªa el¨¦ctrica explica que ¡°todos los proyectos de l¨ªneas presentados se encuentran adecuados a la legislaci¨®n vigente seg¨²n los condicionados que establezca la Administraci¨®n ambiental competente en cada caso¡±. El problema es que muchas de las l¨ªneas y postes corregidos en su d¨ªa est¨¢n obsoletos.
¡°A los tendidos que no han sido corregidos se unen los que se aislaron con materiales poco efectivos, con pl¨¢sticos que se van degradando, y sin realizar labores de mantenimiento, por lo que vuelven a convertirse en un riesgo para las aves¡±, se?ala Juan Carlos Atienza, director de Conservaci¨®n de SEO/BirdLife. ¡°En las zonas m¨¢s peligrosas habr¨ªa que realizar actuaciones m¨¢s caras, como cambiar la cabecera del apoyo o el apoyo completo¡±, a?ade Atienza. En uno de los puntos negros de la Pen¨ªnsula, el vertedero municipal de Huesca, mueren decenas de buitres en cuatro torres que cuentan con medidas de aislamiento anti-electrocuci¨®n instaladas hace diez a?os.
La causa m¨¢s com¨²n de electrocuci¨®n deriva del contacto del ave con dos puntos del poste: se posa en un punto, y con el ala o la presa capturada toca otro. Aparte de los recubrimientos pl¨¢sticos que evitan esta electrocuci¨®n, tambi¨¦n se utilizan?chivatos en los cables (lazos y espirales), pero debido a que las aves van casi siempre mirando hacia abajo en busca de carro?as y presas se demandan sistemas m¨¢s efectivos, con iluminaci¨®n y sonidos disuasorios. En casos muy dram¨¢ticos no se desde?a el cambio del trazado del tendido e incluso su soterramiento.
Juan Carlos Atienza a?ade tambi¨¦n que ¡°el real decreto no aborda de forma adecuada la colisi¨®n, que en algunos puntos ocasiona mayor mortalidad que la electrocuci¨®n, como el caso de aves esteparias en Castilla y Le¨®n y alimoches en Arag¨®n¡±. Adem¨¢s, apostilla que las compa?¨ªas, aunque hacen esfuerzos para afrontar el problema, ¡°no son proactivas ni tienen una l¨ªnea de trabajo exclusiva al efecto¡±. Por su parte, Diego Ortega denuncia ¡°lo poco que cuesta aislar debidamente un tendido (de cara al real decreto de 2008 se estimaban entre 10.000 y 12.000 euros por kil¨®metro de l¨ªnea) y lo mucho que representan los beneficios de las grandes el¨¦ctricas¡±.
Las gardu?as tambi¨¦n se electrocutan
La iniciativa Pon un tendido en tu punto de mira est¨¢ motivando, seg¨²n Diego Ortega, miembro de SIECE y uno de los impulsores de la iniciativa, no solo la actuaci¨®n de las compa?¨ªas el¨¦ctricas, sino tambi¨¦n que se ampl¨ªe e incremente el flujo de informaci¨®n sobre electrocuci¨®n y colisi¨®n de aves en tendidos. Voluntarios en Burgos, C¨¢diz, Girona, Granada, Huesca, Sevilla y Valencia reportan informaci¨®n precisa que incluye matr¨ªcula del poste, geolocalizaci¨®n y foto del ave afectada. "Siempre recomendamos que no se toque el cad¨¢ver y se ponga el hecho en conocimiento de la guarder¨ªa forestal o el Seprona de la Guardia Civil", se?ala Ortega.
Este seguimiento tan preciso de los voluntarios ha detectado cosas tan curiosas como la muerte de diecisiete gardu?as, un mam¨ªfero carn¨ªvoro de h¨¢bitos terrestres poco dado a las alturas. Los voluntarios y voluntarias que realizan los seguimientos sospechan que se encaraman a los postes para intentar depredar sobre los estorninos que se posan en los cables y acaban electrocutados.
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