Soria, al descubierto

La credibilidad del ministro de Industria, Comercio y Turismo, Jos¨¦ Manuel Soria, tras las explicaciones y rectificaciones dadas sobre su participaci¨®n en varias sociedades offshore est¨¢ por los suelos. Tras la difusi¨®n de su nombre entre los implicados por los papeles de Panam¨¢, hemos asistido a una secuencia de declaraciones, rectificaciones y nuevas revelaciones que han puesto al ministro en evidencia y que exigen no solo la aclaraci¨®n del asunto, sino la asunci¨®n de responsabilidades pol¨ªticas de Soria. O del presidente del Gobierno.

En una reciente entrevista, Mariano Rajoy respond¨ªa a la pregunta de ¡°?qu¨¦ es corrupci¨®n?¡± con una explicaci¨®n que se resum¨ªa en que corrupci¨®n es alguna actuaci¨®n irregular ¡°cometida por m¨ª o por alguien nombrado por m¨ª¡±. No conviene adelantar acontecimientos, ni somos nosotros los que debemos juzgar penalmente las actuaciones de Jos¨¦ Manuel Soria, pero dados los antecedentes de casos de corrupci¨®n en el PP o en distintos Gobiernos aut¨®nomos o locales gobernados por ese partido, es imperativo y urgente que el Gobierno act¨²e en consecuencia.

La mala gesti¨®n de algunos de los casos recientes y m¨¢s sonados de corrupci¨®n que afectan a dirigentes del PP, o en ocasiones al propio partido, deber¨ªa hacer reaccionar a Rajoy con celeridad.

La actitud del ministro de Industria ha sido, desde el primer momento, la de negar cualquier relaci¨®n con sociedades en para¨ªsos fiscales y atribuir su nombre en los papeles de Panam¨¢ a un error que se subsan¨® inmediatamente. Sin embargo, a medida que pasaban las horas, la realidad iba desmintiendo la versi¨®n de Soria, que se ha ido encontrando con nuevas revelaciones que mostraban su participaci¨®n en los negocios familiares a trav¨¦s de sociedades en para¨ªsos fiscales.

A estas alturas, se puede concluir que el ministro no ha dicho toda la verdad. Aunque habr¨¢ que esperar a las aclaraciones definitivas para saber si realmente ha mentido abiertamente o si ha ido conociendo la verdad d¨ªa a d¨ªa, fruto de la traici¨®n de personas de su entorno m¨¢s ¨ªntimo. De cualquier forma, y aunque fuera legal participar en una empresa consignataria y log¨ªstica registrada en Reino Unido, los errores sucesivos de Soria y, sobre todo, que haya desmentido algo que la realidad ha demostrado como cierto ponen en duda su capacidad para continuar como ministro, aunque sea en funciones, del Gobierno de Espa?a.

Ayer mismo, fuentes del Ejecutivo reconoc¨ªan su perplejidad ante la evoluci¨®n del caso; y se comprobaba que en el Gobierno y en el partido se hab¨ªa optado por abandonar a Jos¨¦ Manuel Soria a su suerte. Ni sus compa?eros del llamado G-8 (el grupo de ministros m¨¢s leales al presidente) ni el propio Rajoy (que le considera fiel amigo suyo) pudieron ya salir en su defensa tras las ¨²ltimas revelaciones difundidas al mediod¨ªa de ayer.