¡°No somos pajareros. Protegemos el futuro¡±

Una de cada ocho especies de aves est¨¢ bajo amenaza, un n¨²mero que se ha incrementado en los ¨²ltimos a?os y que est¨¢ destinado a seguir creciendo. Patricia Zurita, directora ejecutiva de BirdLife International, sin embargo, cree que todav¨ªa se puede salvar la biodiversidad si se act¨²a r¨¢pidamente.

¡°Esta es la magia de la naturaleza: si le damos oportunidad, regresa. Es un sistema tan especialmente sabio, tan incre¨ªblemente bien conectado, que en el momento en que nosotros restablecemos las conexiones entre los distintos eslabones de la cadena, las cosas regresan¡±, explica la experta de la organizaci¨®n que aglutina a 120 grupos locales de conservaci¨®n alrededor del mundo. Pese a su optimismo, Zurita reconoce que el tiempo juega en contra de esta misi¨®n. ¡°El planeta est¨¢ viviendo una crisis y las aves son solamente uno de los indicadores de c¨®mo est¨¢n el resto de las especies. Es dif¨ªcil, es deprimente, pero es una llamada de alerta que nos avisa de que tenemos que actuar y que tenemos que hacerlo ahora¡±, explica. ¡°No somos pajareros, protegemos el futuro¡±.

Deforestaci¨®n, caza y comercio ilegal de especies, as¨ª como pr¨¢cticas agr¨ªcolas insostenibles son solamente algunos de los factores que amenazan la biodiversidad. Hay poblaciones de aves que ya est¨¢n virtualmente extintas, aunque sobrevivan tres o cuatro individuos de la especie. En otros casos, como el del Gallito de Stresemann, del que existen apenas 15 ejemplares, todav¨ªa hay esperanzas. ¡°Depende mucho del tipo de especie y de la poblaci¨®n gen¨¦tica de ese grupo. Hemos recuperado poblaciones desde n¨²meros muy peque?os, lo importante es asegurarnos de que no solamente se hace un trabajo por esa especie, sino por todo su h¨¢bitat. Es como tratar de conservar una familia sin su casa¡±, sostiene Zurita.

El r¨¢pido crecimiento de la poblaci¨®n mundial y el desarrollo urbano juegan en contra de la biodiversidad

BirdLife acaba de recuperar el h¨¢bitat para el pirolo en las islas Azores y una poblaci¨®n de aves que estaba completamente restringida a una peque?a isla en el mar Amarillo, pero la directora ejecutiva lamenta muchas batallas cuyo ¨¦xito no est¨¢ garantizado, como el caso de cuatro especies de buitres en ?frica o de esta ave en Europa, donde est¨¢ amenazada por el uso del dicoflenaco (un f¨¢rmaco para ganado).

El r¨¢pido crecimiento de la poblaci¨®n mundial y el desarrollo urbano tambi¨¦n juegan en contra de la biodiversidad. ¡°Las zonas rurales se est¨¢n vaciando. Estamos perdiendo a embajadores que pueden recordar realmente lo importante que es esa base natural para nuestra propia supervivencia¡±, explica desde una finca de Torrelodones, a unos 30 kil¨®metros de Madrid. La directora ejecutiva de BirdLife ha venido a Espa?a con ocasi¨®n de las celebraciones, este s¨¢bado, del D¨ªa de la Red Natura 2000, un conjunto de 27.000 ¨¢reas de conservaci¨®n de la biodiversidad repartidas por Europa. ¡°Mientras eso sucede, tenemos que asegurarnos de que estamos restableciendo la conexi¨®n que la gente tiene con la naturaleza, sobre todo entre los m¨¢s j¨®venes. El desarrollo y la conservaci¨®n son totalmente compatibles y lo podemos hacer inteligentemente, con inversiones y protecciones¡±, agrega.

Al mencionar el cambio clim¨¢tico, Zurita suspira. ¡°Impone grandes retos, lo cambia todo¡±, lamenta. ¡°Nosotros lo dijimos alto y claro en la Cumbre de Par¨ªs el pasado diciembre: las soluciones basadas en la naturaleza son las m¨¢s importantes¡±, puntualiza. ¡°Las nuevas tecnolog¨ªas y las energ¨ªas renovables nos van a ayudar, pero lo m¨¢s costo-efectivo es pensar en lo que nos puede ofrecer la naturaleza. Estamos asegurando nuestro futuro en el momento en que estamos protegiendo ecosistemas que tienen espacios para evolucionar por los cambios de temperatura¡±.

Las aves son solamente uno de los indicadores de c¨®mo est¨¢n el resto de las especies

¡°Las aves son mensajeras que nos est¨¢n diciendo que el cambio clim¨¢tico no solamente es una cosa del futuro, est¨¢ pasando ya, pero tambi¨¦n nos indican que en el momento en el que implementamos soluciones basadas en naturaleza las cosas funcionan y los sistemas se mantienen¡±, recalca.

El problema de la conservaci¨®n del medioambiente y de las especies, sostiene la experta, afecta especialmente a los pa¨ªses menos desarrollados. ¡°La diversidad biol¨®gica est¨¢ mucho m¨¢s concentrada en pa¨ªses que no necesariamente tienen los recursos para protegerla, pero todos tenemos las mismas responsabilidades. La naturaleza no tiene fronteras. Entre todos, por ejemplo, tenemos que proteger las rutas de las aves migratorias. Cuanto m¨¢s pensemos que somos ciudadanos globales, empecemos a trabajar conjuntamente por eso, mejor estaremos¡±, destaca.

¡°Creemos que somos los due?os del planeta, pero no nos damos cuenta de que en realidad simplemente somos un eslab¨®n m¨¢s del sistema. Por m¨¢s poderosos que seamos, no podemos agarrar y destrozar todo el resto de la cadena. Tenemos una visi¨®n de desarrollo ¨²nicamente centrada en nosotros que hay que cambiar¡±, dice Zurita. La experta ecuatoriana insiste en que es necesario volver a tejer una estrecha conexi¨®n con la naturaleza, sobre todo entre las nuevas generaciones. ¡°La gente trabaja en sus despachos y se a¨ªsla de lo que es importante, ya no se acuerda de cuando eran ni?os, iban al r¨ªo, saltaban las rocas y observaban a los peces. Para m¨ª, ver un buitre volando a unos pocos kil¨®metros de una gran ciudad como Madrid es extraordinario¡±.

El problema de la conservaci¨®n del medioambiente y de las especies afecta especialmente a los pa¨ªses menos desarrollados

Uno de los principales retos a los que tiene que enfrentarse BirdLife, seg¨²n ella, es hacer llegar al mayor n¨²mero posible de personas el esfuerzo para la conservaci¨®n de la naturaleza, para que todos se den cuenta de que la p¨¦rdida de biodiversidad es la mayor de las amenazas que hay que afrontar como especie y como planeta. ¡°Casi un tercio del territorio espa?ol es parte de la Red Natura 2000, pero la gente no lo sabe¡±, explica. ¡°?C¨®mo vamos a esperar que este espacio sea protegido?¡±.

Zurita elogia la normativa de vanguardia en este ¨¢mbito de la Uni¨®n Europea. Sin embargo, opina que a¨²n existen problemas de implementaci¨®n y de financiaci¨®n. ¡°La pregunta no es si estas normas funcionan. La pregunta es c¨®mo las hacemos funcionar mejor¡±, subraya. Para la experta es prioritario realizar una revisi¨®n completa de la pol¨ªtica agr¨ªcola comunitaria, ya que los incentivos y los subsidios agr¨ªcolas ¡°est¨¢n yendo a pocas personas que est¨¢n haciendo agricultura intensiva y muy da?ina, cuando los agricultores que lo est¨¢n haciendo bien en zonas de Natura 2000, como los que est¨¢n cultivando vi?edos o cereales en Espa?a, no reciben apoyo¡±.

¡°Todo el mundo habla de desarrollo sostenible. Yo quiero hablar de balance¡±, a?ade. ¡°Europa ha sido un ejemplo para el mundo en legislaci¨®n ambiental. Ahora tenemos que demostrar que lo estamos haciendo bien¡±.