La primera red social de c¨¦lulas

Si comprimimos la edad de la Tierra (4.500 millones de a?os) a la duraci¨®n de una sola semana, veremos que la evoluci¨®n de las primeras bacterias fue bastante r¨¢pida: algunos paleont¨®logos creen que ya estaban ah¨ª a ¨²ltima hora del lunes, y las evidencias f¨®siles universalmente aceptadas datan del martes. La evoluci¨®n de la c¨¦lula moderna ¨Cla c¨¦lula eucariota de la que estamos hechos todos los animales y las plantas¡ª tuvo que esperar hasta el jueves, y el origen de los animales y las plantas acaba de ocurrir en la madrugada de hoy domingo. Con este esquema en la cabeza, podr¨¢s evaluar mejor la enorme sorpresa que supone encontrar un organismo multicelular que data del jueves. L¨¦elo en Materia, junto con las consideraciones esc¨¦pticas de algunos cient¨ªficos del sector.

Un problema que ha desconcertado a generaciones de evolucionistas es que cada una de estas transiciones de fase, o incrementos de complejidad, ha sido relativamente r¨¢pida ¨Csiempre en las escalas de los ge¨®logos, donde r¨¢pido puede significar 10 millones de a?os¡ª, pero cada una ellas ha tardado eones en ocurrir a partir del paso anterior. Una posible respuesta que ha ido tomando forma es que las transiciones son reacciones evolutivas a grandes cambios del entorno terr¨¢queo, como los incrementos en la concentraci¨®n de ox¨ªgeno de la atm¨®sfera y los oc¨¦anos, que no han sido en absoluto continuos.

El origen de la c¨¦lula eucariota, por ejemplo, pudo ser una respuesta de las bacterias primitivas a lo que los ge¨®logos llaman ¡°el gran evento de oxidaci¨®n¡±, un incremento de ox¨ªgeno que tambi¨¦n ocurri¨® el jueves (hace unos 2.000 millones de a?os). De hecho, las mitocondrias, que son el departamento energ¨¦tico de nuestras c¨¦lulas, provienen de antiguas bacterias de vida libre, y hoy se dedican precisamente a respirar ox¨ªgeno produciendo energ¨ªa para el resto de la c¨¦lula. El ox¨ªgeno era un veneno hasta el jueves, y tragarse una mitocondria pudo ser una soluci¨®n eficaz para gestionarlo en aquella ¨¦poca.

La transici¨®n a la que se refiere el nuevo descubrimiento es de una naturaleza m¨¢s enigm¨¢tica. Se trata en este caso de que unas cuantas decenas o centenares de c¨¦lulas, que hasta entonces llevaban un estilo de vida aut¨®nomo plenamente eficaz ¨Clas amebas y paramecios de hoy dan testimonio de ello¡ª optaran por agruparse en una sociedad, donde cada c¨¦lula puede especializarse y trabajar en pos del organismo que forman todas ellas. No sabemos muy bien c¨®mo se hace esto, como queda patente cada ma?ana en las primeras p¨¢ginas de todos los peri¨®dicos.

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