Un test para predecir la respuesta a los antidepresivos

La depresi¨®n, como otras enfermedades mentales, es dif¨ªcil de definir con criterios objetivos. De hecho, entre los psiquiatras hay dudas sobre las fronteras que separan esta dolencia de otras como la esquizofrenia o el autismo. En los ¨²ltimos a?os, los investigadores han realizado muchos avances para obtener marcadores que acoten los l¨ªmites de la enfermedad para poder as¨ª tratarla con mayor precisi¨®n. Esta semana, un equipo del King¡¯s College de Londres ha anunciado un nuevo paso en esa direcci¨®n: el desarrollo de un test de sangre capaz de predecir si un paciente deprimido responder¨¢ a los antidepresivos habituales.

Los autores del trabajo, que se ha publicado en la revista The International Journal of Neuropsychopharmacology, sab¨ªan que la mitad de los pacientes deprimidos no responden a los medicamentos con los que se empiezan los tratamientos y un tercio son inmunes a cualquier tratamiento farmacol¨®gico. Tambi¨¦n era conocido que las personas con mayores niveles de inflamaci¨®n respond¨ªan a los antidepresivos, pero no se hab¨ªa identificado con precisi¨®n la causa.

La mitad de los pacientes deprimidos no responden a su tratamiento inicial

Para resolver, al menos en parte, el enigma, los investigadores analizaron la cantidad de dos marcadores en la sangre de pacientes deprimidos antes y despu¨¦s de tomar algunos de los antidepresivos prescritos con mayor frecuencia. Estos dos marcadores eran el MIF (factor inhibidor de la migraci¨®n de macr¨®fagos), una prote¨ªna que el sistema inmune emplea para ponerse en alerta cuando detecta una amenaza, y la interleucina 1 beta, otra prote¨ªna con funciones similares, que se produce en grandes cantidades ante infecciones, lesiones o estr¨¦s.

Los cient¨ªficos del King¡¯s College observaron que cuando esos marcadores sobrepasaban cierto umbral en la sangre, la respuesta a los antidepresivos convencionales desaparec¨ªa, pero se pod¨ªa esperar que los pacientes reaccionasen bien si sus niveles no superaban determinado l¨ªmite. La probable explicaci¨®n para que esto suceda es que tanto el MIF como la interleucina desempe?an un papel relevante en mecanismos importantes para la depresi¨®n como el nacimiento y muerte de neuronas.

La informaci¨®n de este tipo de an¨¢lisis har¨ªa m¨¢s racional el proceso de selecci¨®n de los antidepresivos, que ahora tiene mucho de ensayo y error. Eso significa, por ejemplo, que un paciente que por sus caracter¨ªsticas no va a responder a la medicaci¨®n com¨²n deber¨ªa esperar tres meses o m¨¢s para averiguarlo, con el consiguiente tiempo perdido y las posibilidades de empeoramiento.

¡°Los pacientes con elevados niveles de inflamaci¨®n y que tendr¨ªan altas probabilidades de no responder a tratamientos antidepresivos convencionales podr¨ªan empezar desde el principio con un tratamiento m¨¢s fuerte, introduciendo antiinflamatorios o combinaciones con distintos antidepresivos¡±, explica Annamaria Cattaneo, investigadora del King¡¯s College y autora principal del estudio. Cattaneo se?ala que este sistema es a¨²n experimental y que est¨¢n tratando de replicarlo. Adem¨¢s, a?ade, quieren ¡°probar la eficacia de combinar f¨¢rmacos antiinflamatorios con antidepresivos para mejorar los s¨ªntomas en pacientes con altos niveles de inflamaci¨®n¡±.

El diagn¨®stico de la depresi¨®n se basa en unos s¨ªntomas que a veces no permiten una delimitaci¨®n clara

Jer¨®nimo Saiz, jefe de servicio de psiquiatr¨ªa del Hospital Universitario Ram¨®n y Cajal de Madrid, considera que, aunque el estudio es interesante, ¡°desde el punto de vista pr¨¢ctico no va a ser ¨²til porque estos procedimientos no son econ¨®micos ni pueden utilizarse de forma rutinaria¡±. Tambi¨¦n considera que la eficacia de medir estos marcadores ser¨¢ limitada porque definir cu¨¢ndo se est¨¢ delante de una persona con depresi¨®n ¡°se basa en unos s¨ªntomas que a veces no permiten una delimitaci¨®n clara entre si la depresi¨®n existe o no o entre casos distintos de depresi¨®n¡±.

¡°La depresi¨®n como t¨¦rmino diagn¨®stico ha perdido sus l¨ªmites, porque puede depender de situaciones de estr¨¦s, de situaciones desfavorables, de cuestiones de debilidad de car¨¢cter¡±, contin¨²a Saiz, que tambi¨¦n es miembro de la Comisi¨®n Ejecutiva de la Sociedad Espa?ola de Psiquiatr¨ªa (SEP). ¡°Y luego est¨¢ la depresi¨®n que antes se llamaba end¨®gena, m¨¢s ligada a factores gen¨¦ticos y de funcionamiento biol¨®gico¡±, a?ade.

Saiz se?ala que, pese a las limitaciones, la psiquiatr¨ªa sigue trabajando para mejorar el tratamiento combinando el conocimiento sociol¨®gico, psicol¨®gico o biol¨®gico, porque ¡°no son enfoques separados¡±. El objetivo final es, como en muchos otros campos de la medicina moderna, lograr personalizar tratamientos que hasta ahora han sido demasiado generales.