Bendita piel de terciopelo
Asociado al calor, al verano y a las vacaciones... la carne del melocot¨®n, firme y dulce, ocupa un lugar privilegiado en los fruteros
Por el nombre cient¨ªfico del melocotonero, Prunus persica, se podr¨ªa creer que su origen hay que buscarlo en Persia, pero no: su nacimiento est¨¢ en el lejano pa¨ªs de China, donde existen indicios de su cultivo desde hace aproximadamente 3.000 a?os. Es tal la pasi¨®n que sienten los chinos por el melocot¨®n que es el s¨ªmbolo de la inmortalidad y de la longevidad. De all¨ª lleg¨® a Persia (ahora s¨ª) a trav¨¦s de rutas comerciales, luego los romanos se encargaron de traerlo a Europa, y ya en la Edad Media comenz¨® a propagarse por el continente... y hasta hoy. De hecho, es uno de los cultivos m¨¢s importantes en todo el mundo (de Australia y Nueva Zelanda a Estados Unidos; de Oriente Medio a Italia) y, tambi¨¦n, en Espa?a, que es uno de los principales productores, junto al pa¨ªs vecino, de la Uni¨®n Europea. ¡°En nuestro pa¨ªs proceden de Valencia, Murcia, Sevilla, Huelva, Tarragona, Extremadura, Lleida, Barcelona y, claro, los de Arag¨®n, que son los m¨¢s tard¨ªos¡±, apuntan desde Carrefour.
Existen m¨¢s de 2.000 variedades de esta fruta (tambi¨¦n llamada durazno) en todo el planeta, as¨ª que ser¨ªa tarea ardua hablar de todas¡ Los melocotones m¨¢s habituales que nos encontramos en la mayor¨ªa de fruter¨ªas patrias son los amarillos (como los de Calanda, Arag¨®n), los rojos (fresquillas), m¨¢s anaranjados o las nectarinas, cuya piel es lisa y no est¨¢ cubierta por ese t¨ªmido velo de pelo que cubre a la mayor¨ªa de ellos. Unos tienen la pulpa m¨¢s firme y compacta. Otros son de carne m¨¢s blanda¡ En fin, un mundo en el que lo que importa es elegirlos con tino y explayarse con su dulzor y, en algunos casos, con leves pinceladas ¨¢cidas.
En su justo punto de maduraci¨®n
¡°El melocot¨®n es una fruta de temporada, por lo tanto es recomendable consumirla pronto ya que, en cuanto se cogen del ¨¢rbol, no maduran muy bien¡±, cuentan desde Carrefour. Conviene elegir ejemplares de un color brillante, sano, cuanto m¨¢s rojo y oscuro, mejor; y si es amarillo, lo mismo, de un amarillo vivo. Si tienen golpes o peque?as decoloraciones, mejor dejarlos. Es una fruta refrescante, asociada a esas apacibles sobremesas veraniegas, y ¨²til en cualquier dieta de adelgazamiento. Adem¨¢s, es muy rica en minerales, magnesio, zinc, potasio y f¨®sforo, y, sobre todo, en carotenos como la xantofila, que es la que le aporta ese tono amarillo a su carne tan caracter¨ªstico.
Pero qu¨¦ fresco
Un dulce y fragante melocot¨®n es una obra maestra cuando se consume natural, reci¨¦n venido de la fruter¨ªa. Pero tambi¨¦n es vers¨¢til a la hora de emparejarlo con otros alimentos, e incluso de conservarlo en forma de confitura y alegrar las tostadas del desayuno. Karlos Argui?ano elabora una sugerente ensalada de berros y melocot¨®n, tan f¨¢cil de preparar como ligera para las comidas o cenas estivales: se ponen los berros en una fuente grande y se salan; se esparce por encima el melocot¨®n picado en dados; se pican unas avellanas y se echan sobre los berros y el melocot¨®n; finalmente, se ali?a con una suave vinagreta de aceite y zumo de lim¨®n.
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