Cumpla sus promesas, se?or presidente

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Lahidi significa en soussou, ¡°la promesa dada¡±, y desde la Rep¨²blica de Guinea es la incorporaci¨®n m¨¢s reciente a un fen¨®meno que se va extendiendo por los pa¨ªses del oeste africano. Los impulsores de Lahidi lo han explicado a sus usuarios de una manera muy simple: ¡°Una promesa es una deuda¡±. Se refieren a las realizadas por los pol¨ªticos, porque ese es su objetivo: supervisar el cumplimiento de las promesas electorales, las que han llevado a los ciudadanos a decidirse por unos u otros, las que les han llevado a sus cargos.

Los presidentes ya no tienen carta blanca, al menos, en ?frica Occidental. Durante las campa?as electorales hicieron promesas, pero han quedado atr¨¢s los tiempos en los que aquellas se olvidaban el d¨ªa de la toma de posesi¨®n. Se ha producido en los ¨²ltimos a?os un curioso fen¨®meno que se reproduce en diferentes pa¨ªses de la subregi¨®n. Las sociedades civiles, en muchos casos en colaboraci¨®n con las comunidades de ciberactivistas, est¨¢n poniendo en marcha plataformas web que no s¨®lo les permiten hacer un balance constante del cumplimiento de los compromisos electorales, sino que adem¨¢s divulgan de manera sencilla si el electo se ha tomado en serio o no la confianza que le han depositado los ciudadanos.

Buharimetre es la primera de estas experiencias en la zona. Fue lanzada en Nigeria en un momento especialmente simb¨®lico, la alternancia pol¨ªtica pac¨ªfica. Las elecciones en las que los ciudadanos desalojaron por las urnas a Goodluck Jonathan y lo sustituyeron por Muhammadu Buhari, sin que eso supusiese ning¨²n trauma. La desilusi¨®n que llev¨® a retirar la confianza a Jonathan, llev¨® tambi¨¦n a pensar herramientas para impedir que el desenga?o volviese a producirse. La soluci¨®n fue poder rendir cuentas constantemente, no ejercer la democracia s¨®lo en la llamada a las urnas, sino mostrar a los candidatos que la sociedad civil les vigilar¨ªa durante todo su mandato.

Yusuf Shamsudeen Adio, uno de los responsables de Buharimeter como encargado de programas senior del Center for Democracy and Development (CDD ¨C West Africa), explica el esp¨ªritu de la iniciativa: ¡°Una evaluaci¨®n objetiva de la gobernabilidad en Nigeria y en otras partes de ?frica demostrar¨ªa que existe una total desconexi¨®n entre lo que los pol¨ªticos prometen hacer durante las campa?as electorales y lo que est¨¢n haciendo despu¨¦s de haber ganado las elecciones. Los pol¨ªticos prometen abordar el deterioro de las infraestructuras, o impulsar la econom¨ªa, por ejemplo, pero inmediatamente despu¨¦s de ganar, se desplazan las prioridades y creemos que esto es una traici¨®n a la confianza de los electores¡±. Por otro lado, asegura que no se produce la interacci¨®n adecuada entre los gobernantes y los ciudadanos. El segundo motivo que desencaden¨® el nacimiento de Buharimeter, seg¨²n Adio, es sensibilizar a los ciudadanos con un concepto de participaci¨®n democr¨¢tica que va m¨¢s all¨¢ de las votaciones y a los gobernantes con la necesidad de rendir cuentas. La ¨²ltima raz¨®n de ser de esta iniciativa es ¡°mitigar la cultura entre los pol¨ªticos de las promesas irreales¡±.

¡°Los pol¨ªticos hicieron decenas de promesas¡±, se queja el responsable de Buharimeter, ¡°s¨®lo para ganar la confianza de los ciudadanos, sin ninguna intenci¨®n de que esas determinen sus pol¨ªticas. A trav¨¦s de la evaluaci¨®n sistem¨¢tica, esperamos profundizar en la cultura democr¨¢tica de Nigeria, asegurando que los pol¨ªticos hacen promesas realizables¡±.

Luther Yameogo, director de la ONG Diakonia en Burkina Faso, una de las impulsoras de la plataforma Presimetre.bf, explica que en el caso de su pa¨ªs uno de los objetivos era ¡°contribuir a la reeducaci¨®n democr¨¢tica y a la consolidaci¨®n de la democracia¡±. No se trata de un objetivo, menor en un caso como el de Burkina, que ha recuperado recientemente la democracia despu¨¦s de que un levantamiento popular pusiese en fuga en octubre de 2014 al antiguo presidente, Blaise Compaor¨¦, acusado de haber secuestrado la soberan¨ªa popular; y de que la resistencia ciudadana frustrase a finales de 2015 un golpe de Estado que pretend¨ªa quebrar la transici¨®n.

En Benin, donde las ¨²ltimas elecciones el pasado 20 de marzo rubricaron la alternancia al frente del pa¨ªs, uno de los impulsores del Talonmetre (por el nombre del nuevo presidente, Patrice Talon), asegura que la plataforma impedir¨¢ que la pol¨ªtica sea como en los a?os sesenta, porque ¡°hay una juventud activa y comprometida y una poblaci¨®n que puede vigilar a los gobernantes¡±. El de Benin es un caso particular. La plataforma de vigilancia de las promesas electorales fue concebida por un grupo de apasionados de las TIC, que una vez lanzada pretenden ¡°entreg¨¢rsela¡± a las organizaciones de la sociedad civil.

M¨¢s all¨¢ del mencionado caso benin¨¦s, el resto de impulsores de las plataformas son organizaciones de la sociedad civil apoyadas en las comunidades de ciberactivistas locales. Todos ellos han montado equipos para enumerar las promesas electorales formuladas por sus gobernantes durante las respectivas campa?as electorales o los discursos de toma de posesi¨®n de los cargos. El Buharimeter nigeriano supervisa 222 promesas; en el caso del Presimetre burkin¨¦s se han agrupado los compromisos del candidato en 14 bloques tem¨¢ticos; en el Talonmetre benin¨¦s han identificado 196; pero en el Lahidi guineano el trabajo ha sido especialmente exhaustivo y les ha llevado a identificar 431 medidas prometidas por el presidente o alguno de sus ministros y est¨¢n abiertos a actualizar la lista a medida que se vayan anunciado nuevas acciones.

Un ciudadano, un vigilante

La fuerza de los an¨¢lisis se basa en su car¨¢cter popular. Las plataformas, precisamente, tratan de movilizar a los ciudadanos y lo hacen implic¨¢ndoles en la supervisi¨®n. Cualquier persona puede inscribirse en ellas y aportar sus balances sobre el cumplimiento de las promesas. En el caso de Benin, dos mil personas se inscribieron para vigilar las medidas avanzadas por Patrice Talon durante las elecciones.

¡°Son los propios ciudadanos¡±, se?ala Yameogo, ¡°los que expresan sus preocupaciones directamente y eval¨²an el ¨¦xito de las autoridades regularmente a trav¨¦s de la plataforma y del resto de mecanismos de interpelaci¨®n. A cambio, las autoridades tienen un altavoz para dar explicaciones y un atril desde el que dialogar¡±. Yusuf Shamsudeen Adio a?ade a esta valoraci¨®n, la respuesta ofrecida por los gobernantes: ¡°En los primeros meses fueron muy cr¨ªticos porque nos acusaban de desinformar a los nigerianos, aunque despu¨¦s han sido mucho m¨¢s colaboradores y se han prestado a participar. Lo que resulta m¨¢s alentador todav¨ªa es que los ciudadanos han sido muy activos ofreciendo sus an¨¢lisis¡±.

Fod¨¦ Sanikayi Kouyate, presidente de la asociaci¨®n de blogueros guineanos Ablogui, habla en nombre de los ¨²ltimos en llegar a este club de los supervisores desde Guinea: ¡°Para nosotros ser¨ªa imposible vigilar el cumplimiento de las 431 promesas que hemos identificado. La plataforma es extremadamente abierta porque cualquier ciudadano puede rellenar el formulario. Al fin y al cabo ellos son los protagonistas del proceso. Cuando votas le das tu voz, tu confianza a un candidato s¨®lo a cambio de su palabra, despu¨¦s tienes que asegurarte de que cumplan con esa palabra¡±.

En general, los responsables de estas cuatro iniciativas coinciden en que la colaboraci¨®n de las autoridades con este control no resulta demasiado decidida, quiz¨¢ tenga algo que ver con los resultados que est¨¢n arrojando sus an¨¢lisis. S¨®lo a modo de ejemplo, el Buharimeter, la m¨¢s veterana de estas experiencias acredita que en m¨¢s de un a?o de mandato, Muhammadu Buhari s¨®lo ha cumplido con uno de los compromisos que hab¨ªa adquirido, aunque otros 45 est¨¢n en compromiso, pero el cumplimiento de los 176 restantes todav¨ªa no se ha iniciado. La situaci¨®n no es muy diferente en Benin, donde la plataforma ha certificado que Patrice Talon ha iniciado el cumplimiento de 11 de las 196 promesas registradas, el resto, salvo una que ha sido descartada, ni siquiera han sido abordadas pasados ya los cien primeros d¨ªas de mandato.

Lo cierto es que los propios protagonistas reconocen que la participaci¨®n ciudadana no es constante, aunque es una din¨¢mica l¨®gica en estas actividades. Son momentos puntuales los que animan a los ciudadanos a tomar partido en estas campa?as de vigilancia. Uno de los impulsores del Talonmetre benin¨¦s explica que el d¨ªa de la independencia nacional o los cien d¨ªas de mandato animan la implicaci¨®n. El caso m¨¢s claro de c¨®mo estas iniciativas est¨¢n consiguiendo implantarse es el de los cien d¨ªas del mandato presidencial de Roch Kabor¨¦ en Burkina Faso, la campa?a de evaluaci¨®n lanzada por Le Presimetre se extendi¨® a una emisi¨®n televisiva ¡°Dialogue Citoyen¡± que ha permitido ampliar su impacto. ¡°En esa emisi¨®n, el presidente ha respondido en directo a las preocupaciones de los ciudadanos¡±, se?ala con satisfacci¨®n Luther Yameogo.

Una evoluci¨®n l¨®gica

Los impulsores de estos proyectos no est¨¢n, en realidad, dando palos de ciego. Curiosamente, en los cuatro pa¨ªses se han desarrollado previamente intensas campa?as de vigilancia ciudadana de las elecciones. Las comunidades de ciberactivistas han conseguido una considerable movilizaci¨®n para velar por la celebraci¨®n pac¨ªfica y transparente de las elecciones. Despu¨¦s de esos esfuerzos de supervisi¨®n no parece extra?o que se mantenga la implicaci¨®n de los activistas en el control de las autoridades.

¡°Guin¨¦eVote fue un ¨¦xito en la movilizaci¨®n de la sociedad civil y conseguimos muy buenos resultados. Ahora es l¨®gico que mantengamos la preocupaci¨®n y que, igual que vigilamos en las elecciones, sigamos vigilando al candidato que result¨® elegido. Lahidi es la consolidaci¨®n de la toma de protagonismo y de responsabilidad de los ciudadanos en todo el proceso democr¨¢tico¡±, comenta Fod¨¦ Kouyat¨¦, presidente de Ablogui, una de las organizaciones que impulsan Lahidi. ¡°Durante las elecciones en Nigeria, la participaci¨®n de la sociedad civil fue muy intensa¡±, a?ade Yusuf Shamsudeen Adio, ¡°y ahora ese compromiso ha evolucionado en una iniciativa como Buharimeter.

La misma reflexi¨®n es la que hace Yameogo que recuerda que despu¨¦s de los episodios de resistencia popular que ha vivido Burkina, la sociedad civil se involucr¨® activamente en la vigilancia de las ¨²ltimas elecciones presidenciales a trav¨¦s de la plataforma BurkinaVote y que despu¨¦s se reprodujo en las legislativas y las municipales. ¡°Despu¨¦s de la insurrecci¨®n de octubre de 2014, la sociedad civil ha tomado conciencia de su responsabilidad. Tras las ¨²ltimas elecciones hemos recuperado las instituciones democr¨¢ticas y la sociedad civil sabe que debe continuar con su papel de vigilancia ciudadana para reforzar la credibilidad de las instituciones y la democracia en Burkina¡±, asegura Yameogo.

La bola de nieve que rueda

La aparici¨®n de todas estas iniciativas en un periodo de tiempo tan corto y en un espacio tan pr¨®ximo no es una coincidencia. No se trata de experiencias aisladas, sino que es un fen¨®meno que contin¨²a creciendo. Las sociedades civiles se han ido fortaleciendo en los ¨²ltimos a?os y, precisamente, sus actuaciones les han ido dando un mayor prestigio, esa es la explicaci¨®n de esta ola de actividades de vigilancia ciudadana. A esa condici¨®n se une la disponibilidad de herramientas digitales que facilitan esa participaci¨®n de la poblaci¨®n y la aparici¨®n de las comunidades de ciberactivistas que dominan esas herramientas y que despliegan una tremenda creatividad en la b¨²squeda de soluciones imaginativas.

Estas plataformas tienen un impacto directo en el desarrollo de los procesos democr¨¢ticos

Los impulsores de estas iniciativas est¨¢n inmersos en un proceso de aprendizaje mutuo, de reflexi¨®n conjunta y de intercambio de experiencias y coinciden peri¨®dicamente en diferentes foros regionales para compartir conocimientos, proyectos y resultados. ¡°Nos estamos inspirando en lo que otros est¨¢n haciendo en la subregi¨®n (del ?frica Occidental)¡±, confiesa Kouyat¨¦, que siendo los ¨²ltimos en poner en marcha su plataforma han tenido la colaboraci¨®n de los impulsores de los proyectos de otros pa¨ªses. Por su parte, uno de los creadores de Talonmetre reconoce que han estado en contacto con los encargados de llevar adelante iniciativas similares en Burkina Faso y Nigeria.

Yusuf Shamsudeen Adio, representante de la iniciativa con m¨¢s experiencia, expresa esta colaboraci¨®n como una parte fundamental de las iniciativas: ¡°La colaboraci¨®n regional es muy importante teniendo en cuenta que todos los pa¨ªses de ?frica occidental se enfrentan a desaf¨ªos de desarrollo similares. La regi¨®n est¨¢ a la zaga en todos los ¨ªndices de desarrollo y eso se puede trasladar a la calidad de liderazgo y del ejercicio de la ciudadan¨ªa¡±. Estas plataformas tienen un impacto directo en el desarrollo de los procesos democr¨¢ticos, pero algunos de sus impulsores consideran que el efecto puede ser incluso m¨¢s profundo. ¡°Tener plataformas regionales de seguimiento de las promesas supone aunar y maximizar los esfuerzos de la sociedad civil para promover la rendici¨®n de cuentas mediante la mejora de la capacidad de los ciudadanos para la participaci¨®n activa en el espacio p¨²blico. As¨ª es como se pueden abordar de verdad los retos del desarrollo anhelados desde hace mucho tiempo e iniciar el camino del desarrollo¡±, sentencia Yusuf Shamsudeen Adio, activista nigeriano y representante de Buharimeter.