La vestimenta boliviana de la chola pace?a se pasea por la Gran Manzana
La dise?adora Eliana Paco presenta su colecci¨®n de ropa t¨ªpica de la mujer mestiza aimara en un desfile en Nueva York
Nueva York es estos d¨ªas el epicentro de los m¨¢s afamados dise?adores de prendas de vestir durante la Semana de la Moda. Este magno evento contagia su esp¨ªritu a trav¨¦s de eventos paralelos, como el Uptown Fashion Week (UFW), en la que creadores conocidos y emergentes pueden mostrar su talento en la codiciada pasarela de la Gran Manzana.
El UFW es una plataforma que desde hace cinco a?os permite a latinoamericanos exhibir sus creaciones. En esta edici¨®n la dise?adora boliviana Eliana Paco (La Paz, 1982) es una de las protagonistas. Present¨® el martes su colecci¨®n de vestimenta t¨ªpica de la mujer mestiza aimara ¡ªla chola de La Paz¡ª, a la que llam¨® Pachamama (Madre Tierra en quechua). Doce conjuntos de prendas vieron la luz en las figuras de modelos latinoamericanas, esta dounidenses, europeas y asi¨¢ticas. Paco cumpli¨® uno de sus sue?os. El estr¨¦s por la preparaci¨®n de los ¨²ltimos dos d¨ªas le ocasionaron l¨¢grimas de alegr¨ªa cuando recibi¨® una ovaci¨®n al terminar su pasarela, cuenta la dise?adora v¨ªa telef¨®nica desde Nueva York.
La chola es una mujer mestiza, es la mezcla de la cultura aimara y la espa?ola, que hist¨®ricamente asumi¨® la vestimenta que impuso la corona para las mujeres de esa ¨¦poca de fines del siglo XVIII. Actualmente ha sido reasumida y enriquecida con la propia cultura de ese pueblo amerindio. La vestimenta consiste en: borsalino (sombrero tipo hongo) sobre las dos trenzas largas y apretadas, zapatos bajos, blusa cubierta por un mant¨®n y la pollera, una amplia falda que requiere de m¨¢s de seis metros de tela que al moverse deja entrever las cuatro o cinco enaguas. Este atuendo se complementa con los aretes, un prendedor ¡ªpara cerrar el mant¨®n¡ª y un ramillete para el sombrero, todos de oro.
Paco es hija de artesanos. Su madre confeccionaba estas prendas y su padre se dedicaba a la orfebrer¨ªa. Para esta versi¨®n del UPW, que congreg¨® a dise?adores de M¨¦xico, Venezuela, Ecuador, Espa?a y EE UU, Paco explica que busc¨® fusionar textiles bolivianos como los tejidos hechos de lana de oveja, de alpaca o el aguayo, una tela elaborada por ind¨ªgenas, con seda, encajes, pedrer¨ªas y lentejuelas. Adem¨¢s tambi¨¦n utiliz¨® la fibra de vicu?a, un material muy codiciado. Un mant¨®n de este producto textil puede llegar a costar hasta 1.500 d¨®lares. ¡°El querer rescatar la identidad de la chola pace?a hace que mi trabajo sea m¨¢s constante. Quiero crear un mercado para la mujer que no viste a diario estas prendas, algo m¨¢s sofisticado, pero sin perder la identidad de la mujer de pollera¡±, explicaba Paco desde su oficina en La Paz, unos d¨ªas antes de viajar.
Patrimonio cultural
En 2013 la chola pace?a fue declarada ¡°patrimonio cultural intangible¡± de la sede de Gobierno. Para el Alcalde de La Paz, Luis Revilla, la chola pace?a no solo representa una identidad cultural ancestral, sino tambi¨¦n una posibilidad de identidad futura de la ciudad. ¡°Eliana Paco es s¨ªmbolo de eso, de c¨®mo la moda de la chola pace?a se ha transformado en el transcurso de los ¨²ltimos a?os y c¨®mo est¨¢ representando una nueva tendencia en la manera en que las mujeres en La Paz se entienden a s¨ª mismas¡±, manifest¨®.
Un atuendo de hasta 8.000 d¨®lares
El ascenso del presidente Evo Morales al poder en Bolivia dio lugar a una nueva ¨¦lite econ¨®mica, que surgi¨® desde los barrios populares y el comercio informal ¡ªen el que la chola es un pilar fundamental¡ª. El precio de un atuendo completo de chola pace?a puede costar entre 300 a 8.000 d¨®lares, dependiendo cu¨¢nto quiera una mujer invertir en cada pieza de la vestimenta.
¡°Vestir de chola requiere de mucha plata. S¨ª, puede ser caro, como con cualquier tipo de traje fino. Muchas mujeres gastan ese dinero¡±, afirma Paco. La dise?adora boliviana quiere ¡°democratizar¡± este tipo de vestimenta y quitarle el estigma de ¡°costosa¡±, para que las personas no se limiten, ni se asusten.
En los ¨²ltimos 20 a?os, el atuendo de las mujeres mestizas aimaras ha pasado de ser un estigma a convertirse en una expresi¨®n de reivindicaci¨®n racial. La gran semana de la moda en Nueva York se ha convertido ahora en un gran escaparate.
Paco cuenta que en Nueva York admiraron el conjunto de prendas que formaban parte de su colecci¨®n, ya que llaman mucho la atenci¨®n. ¡°Pensaban que era un disfraz, que yo voy a bailar a alg¨²n lugar as¨ª. Yo les dije que es parte de la cultura, que algunas mujeres vestimos as¨ª todos los d¨ªas en la ciudad de La Paz¡±, a?ade Paco. Ella afirma que siente orgullo de que la vestimenta t¨ªpica de chola haya podido desfilar en la ciudad de los rascacielos, pero sobre todo de haber viajado como una ¡°orgullosa vocera¡± de la cultura y todo lo que representa La Paz, que en 2014 fue elegida entre las nuevas Siete Ciudades Maravillas del Mundo por la organizaci¨®n New 7 Wonders.
La dise?adora est¨¢ en lo m¨¢s alto de su carrera, como en un rascacielos. Once a?os de trabajo le tom¨® para llegar a este momento y aspira a m¨¢s. Espera que sus dise?os la respalden y que la creaci¨®n de sus conjuntos le permitan seguir escribiendo su camino a su pr¨®ximo objetivo: ver el traje de chola pace?a desfilar en las pasarelas de Mil¨¢n y Par¨ªs.
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