La nave de ExoMars fall¨® y ¡°lo m¨¢s probable¡± es que se estrellara

Un d¨ªa despu¨¦s de la llegada de la misi¨®n ExoMars a Marte, la situaci¨®n del m¨®dulo de aterrizaje Schiaparelli sigue siendo igual de incierta. Aunque la Agencia Espacial Europea (ESA) a¨²n no ha declarado p¨²blicamente qu¨¦ suerte ha corrido su nave, los ingenieros a su cargo comienzan a aceptar la realidad.

Andrea Accomazzo, responsable de operaciones de naves espaciales la ESA, ha explicado a Materia la situaci¨®n de las investigaciones sobre la sonda, que pretend¨ªa realizar el primer aterrizaje exitoso en Marte de una nave europea. Los datos actuales que manejan son los que envi¨® la Schiaparelli a su nave nodriza durante su descenso. Estos apuntan a que hubo un fallo en los ¨²ltimos segundos de aterrizaje y se perdi¨® la comunicaci¨®n con la sonda, que no ha vuelto a dar se?ales de vida.

De acuerdo con los datos analizados hasta el momento, el fallo sucedi¨® porque los paraca¨ªdas se desprendieron antes de tiempo. ¡°Por alguna raz¨®n la nave se deshizo de los paraca¨ªdas cuando a¨²n estaba demasiado alta y cuando a¨²n iba demasiado r¨¢pido¡±, explica Accomazzo. A continuaci¨®n se encendieron los cohetes, pero ¡°se activaron durante menos tiempo del que deb¨ªan¡±, explica. ¡°Lo m¨¢s probable es que la nave chocase contra la superficie a una velocidad que no pudo aguantar¡±, reconoce el ingeniero, ¡°aunque a¨²n tenemos que analizar toda la informaci¨®n de la que disponemos¡±.

Accomazzo duda de las posibilidades de que Schiaparelli vuelva a funcionar. Hay un umbral de velocidad m¨¢s all¨¢ del cual la nave quedar¨ªa destrozada tras el impacto. Los ingenieros est¨¢n ahora analizando todos los datos de telemetr¨ªa y de radio para determinar si la sonda iba a una velocidad demasiado alta como para que todos sus sistemas de comunicaci¨®n hayan quedado inservibles tras el choque, o si explot¨® al contacto con el suelo. ¡°A¨²n no lo sabemos¡±, reconoce Accomazzo, pero ¡°no parece probable que la nave vuelva a comunicarse¡±. El responsable de la misi¨®n se?ala que ¡°su corazonada es que, con los datos que hay disponibles, se podr¨¢ saber en los pr¨®ximos dos o tres d¨ªas¡± qu¨¦ ha pasado exactamente.

La nave se deshizo de los paraca¨ªdas antes de tiempo

La Schiaparelli tom¨® fotograf¨ªas durante su descenso, pero deb¨ªa enviarlas solo despu¨¦s del aterrizaje. Tras el incidente, es posible que no se puedan recuperar. Los responsables de la misi¨®n a¨²n esperan que las sondas orbitales Mars Express, de la ESA, y MRO, de la Nasa, puedan comunicarse con el m¨®dulo de aterrizaje, aunque esto no ha sucedido en ninguno de los sobrevuelos que han hecho ayer y esta madrugada. Otra opci¨®n que se baraja es reiniciar los equipos de radio, lo que obligar¨ªa a la nave a encenderse y comunicarse, si es que todav¨ªa puede hacerlo.

Seguir adelante

Lo importante ahora, dice el ingeniero, es saber por qu¨¦ ha fallado el m¨®dulo de aterrizaje. ¡°Hay un amplio abanico de posibilidades¡±, como por ejemplo que fallase la programaci¨®n, cargada previamente desde Tierra, o que ¡°fallasen los sensores¡± de la nave, se?ala.

Esta primera fase de ExoMars ten¨ªa dos objetivos: enviar una sonda orbital, llamada Orbitador de Gases Traza, que se ha insertado en la ¨®rbita del planeta con ¨¦xito, y probar tecnolog¨ªas de aterrizaje con Schiaparelli de cara a la segunda fase, cuando se planea enviar un veh¨ªculo de exploraci¨®n m¨®vil a la superficie de Marte que llegar¨ªa en 2021. El presupuesto total de la misi¨®n es de unos 1.300 millones de euros, menos de los 2.000 millones que cost¨® a EE UU enviar a Marte al Curiosity, el mayor robot de exploraci¨®n que ha pisado nunca el planeta.

Jan Woerner, director general de la ESA, ha reconocido hoy en rueda de prensa que ser¨¢ necesario solicitar m¨¢s dinero a los 22 pa¨ªses miembros de la agencia para continuar con ExoMars.

Accomazzo ha opinado que hay que seguir adelante con los planes de enviar el rover a Marte en 2021. ¡°Hay dos posibilidades, que despu¨¦s de analizar los datos veamos qu¨¦ ha fallado una parte de la tecnolog¨ªa o que nos demos cuenta de que hab¨ªamos elegido el conjunto de tecnolog¨ªas equivocadas, que creo que no es el caso¡±, explica. ¡°Posiblemente¡±, concluye el ingeniero, se puedan hacer nuevas pruebas en tierra, ¡°con lo que no ser¨ªa necesario enviar a Marte otra misi¨®n de prueba¡±.