La nataci¨®n es buena para tu hijo, pero no suficiente

Un estudio reciente, realizado por especialistas de la Facultad de Ciencias de la Salud y del Deporte de la Universidad de Huesca, ha demostrado que la pr¨¢ctica de la nataci¨®n, a diferencia de otros deportes de impacto, no mejora la masa ¨®sea de quienes la practican. Este trabajo, publicado en revistas cient¨ªficas internacionales, resalta la importancia que tiene que los nadadores incluyan en su entrenamiento ejercicios de salto para mejorar su desarrollo ¨®seo.

Los autores de este trabajo, Germ¨¢n Vicente Rodr¨ªguez y Alejandro G¨®mez Bruton, integrados en el grupo de investigaci¨®n Genud (Growth, Exercise, Nutrition and Development) de la Universidad de Zaragoza, subrayan que es importante que los ni?os y ni?as empiecen a nadar cuanto antes por las mejoras cardiorrespiratorias y musculares que este deporte tiene frente a otros. La clave, seg¨²n estos investigadores, est¨¢ en complementar la nataci¨®n con otros deportes. Y eso es as¨ª, seg¨²n ambos investigadores, porque ¡°aquellos nadadores adolescentes que realizan otro tipo de deporte complementario a la nataci¨®n presentan mayores valores de densidad mineral ¨®sea que aquellos nadadores que solo nadan y que los adolescentes que no realizan ning¨²n deporte de manera regular (adolescentes sedentarios)¡±.

El Proyecto Renacimiento (Repercusi¨®n del entrenamiento y la pr¨¢ctica de la nataci¨®n sobre el desarrollo metab¨®lico y estructural del hueso en crecimiento), que da nombre al estudio, ha analizado el desarrollo del hueso en nadadores de 12 a 17 a?os, una etapa vital clave para la conformaci¨®n ¨®sea en relaci¨®n con evitar la osteoporosis en etapas adultas. Una enfermedad que hace que los huesos se debiliten debido a una disminuci¨®n de la densidad mineral ¨®sea (menor acumulaci¨®n mineral en un determinado volumen de hueso) y se rompan con mayor facilidad.

El profesor Germ¨¢n Vicente Rodr¨ªguez, investigador principal del proyecto y miembro del grupo de investigaci¨®n Growth, Exercises, Nutrition and Development (GENUD), explica que ¡°el hueso se encuentra en un proceso constante de formaci¨®n y destrucci¨®n, predominando en las tres primeras d¨¦cadas de vida la formaci¨®n, para posteriormente pasar a predominar la destrucci¨®n. Por este motivo, la actividad f¨ªsica realizada durante la adolescencia ser¨¢ clave para incrementar el pico de masa ¨®sea (cantidad de hueso que acumulamos) y, por lo tanto, reducir el riesgo de sufrir una fractura debida a la fragilidad asociada a la osteoporosis en edades adultas¡±.

Rodr¨ªguez se?ala que ¡°los resultados del proyecto Renacimiento indican que los nadadores adolescentes no est¨¢n estimulando su hueso a trav¨¦s de la nataci¨®n ya que presentan valores similares a los de controles normo-activos (ni?os y adolescentes que no realizan deporte de manera regular)¡±. En esta l¨ªnea de investigaci¨®n, el profesor Germ¨¢n Vicente Rodr¨ªguez comenta que ¡°recientemente publicamos un meta-an¨¢lisis (estudio que engloba todos los datos de diferentes investigadores) que inclu¨ªa 14 estudios que evaluaban a nadadores adolescentes y los comparaban con controles de sedentarios y con otros deportistas. El meta-an¨¢lisis demostr¨® que los nadadores ten¨ªan peores valores de densidad mineral ¨®sea que el resto de deportistas y valores similares de densidad mineral ¨®sea que la de los controles sedentarios¡±.

Alejandro G¨®mez Bruton, investigador del Programa Nacional de Formaci¨®n de Personal Investigador, tambi¨¦n perteneciente al grupo GENUD, aconseja que los ni?os y j¨®venes practiquen deportes que conlleven impacto y cambios de direcci¨®n como pueden ser el f¨²tbol, baloncesto o tenis. En este sentido, G¨®mez Bruton manifiesta que ¡°las recomendaciones actuales de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) para ni?os y j¨®venes de 5 a 17 a?os son de 60 minutos diarios de actividad f¨ªsica de intensidad moderada a vigorosa (aunque mayor tiempo reportar¨¢ mayores beneficios). La actividad f¨ªsica diaria deber¨ªa ser, en su mayor parte, aer¨®bica aunque tambi¨¦n deber¨ªa de incorporar como m¨ªnimo tres veces por semana actividades de fuerza que refuercen m¨²sculos y huesos¡±.

G¨®mez Bruton tambi¨¦n comenta que, ¡°si en lugar de hablar de actividad f¨ªsica general (movimiento), habl¨¢semos de pr¨¢ctica de deportes tales como el f¨²tbol, el voleibol o el balonmano tres horas a la semana, se conseguir¨ªan incrementos muy importantes en el desarrollo del hueso desde edades incluso prepuberales. Juegos predeportivos como saltar a la comba, tan extendido en otros tiempos y tan sencillo, presentan tambi¨¦n un importante est¨ªmulo para el desarrollo del hueso en crecimiento. En lo referente al desarrollo del hueso, parece m¨¢s importante el tipo de ejercicio realizado que la duraci¨®n del mismo, aunque ambos aspectos son importantes¡±.

No obstante, el investigador Germ¨¢n Vicente Rodr¨ªguez insiste en que los resultados de estos estudios "no deben desmotivar la pr¨¢ctica de la nataci¨®n", una disciplina que "ha demostrado mejorar la capacidad aer¨®bica, la fuerza muscular y el rendimiento escolar, adem¨¢s de ser uno de los deportes con menor incidencia de lesiones", una caracter¨ªstica que lo hace "altamente recomendable", precisa. Asimismo, Rodr¨ªguez recuerda que ¡°aquellas personas que practiquen nataci¨®n u otro deporte de manera regular tendr¨¢n un menor riesgo de diabetes tipo 2, hipertensi¨®n arterial, obesidad, s¨ªndrome metab¨®lico, c¨¢ncer de mama y pulm¨®n, entre otros. Tambi¨¦n mostrar¨¢n mejoras en la funci¨®n cognitiva, calidad del sue?o, prevenci¨®n de ca¨ªdas y una diversidad de factores que al final mejorar¨¢n la calidad de vida de la persona¡±.